El fantasma de la sociovergencia
El PSC anhela volver a los tiempos de Clos y Hereu y a Trias le beneficiar¨ªa la alianza para tener baza
Un fantasma sobrevuela la plaza de Sant Jaume de Barcelona y no es el del comunismo, por mucho que as¨ª lo invoque la candidata Eva Parera. A ese fantasma se ha venido en llamarle sociovergencia y es el de una eventual alianza del PSC de Salvador Illa y Jaume Collboni con los herederos de CiU, ahora encabezados por Xavier Trias. La alcaldesa Ada Colau dedica buena parte de su campa?a a advertir contra este pacto, que denuncia como un intento de...
Un fantasma sobrevuela la plaza de Sant Jaume de Barcelona y no es el del comunismo, por mucho que as¨ª lo invoque la candidata Eva Parera. A ese fantasma se ha venido en llamarle sociovergencia y es el de una eventual alianza del PSC de Salvador Illa y Jaume Collboni con los herederos de CiU, ahora encabezados por Xavier Trias. La alcaldesa Ada Colau dedica buena parte de su campa?a a advertir contra este pacto, que denuncia como un intento de revertir las pol¨ªticas progresistas aplicadas bajo su direcci¨®n.
Los ocho a?os de Colau como alcaldesa han sido un periodo suficiente para cambiar las prioridades de la capital de Catalu?a y lo que ahora est¨¢ en juego es continuar en esa l¨ªnea o emprender la restauraci¨®n de las antiguas pol¨ªticas y satisfacer a ciertos lobbies econ¨®micos. El PSC lo dice claro, se trata de volver a los tiempos de los alcaldes Clos y Hereu.
Pese a esas intenciones, hay incertidumbre sobre lo que los socialistas vayan a hacer en Barcelona a partir del d¨ªa 28. El PSC persigue en estas elecciones algo muy dif¨ªcil, en parte contradictorio, pero no por eso imposible por extra?o que parezca: quiere mejorar su mediocre resultado de 2019 atrapando ahora el m¨¢ximo n¨²mero posible de los votos de la derecha catalanista moderada, pol¨ªticamente hu¨¦rfanos desde el hundimiento del pujolismo convertido en independentismo; y, al mismo tiempo, aspira a recuperar una parte del voto espa?olista que se le fue a Ciudadanos en los a?os ¨¢lgidos de la crisis constitucional. Ciudadanos se hunde, Converg¨¨ncia no resucita y tanto Illa como Collboni no paran de lanzar gui?os en ambas direcciones. Los sondeos apuntan un repunte del voto al PSC, lo que constituye un indicio de que la t¨¢ctica es acertada. Si adem¨¢s logran neutralizar a Ada Colau y a los comunes, habr¨¢n salido del hoyo en el que cayeron en 2015.
Los gui?os de Illa y Collboni a la derecha se producen, adem¨¢s, al mismo tiempo que los ataques, tirando a rabiosos, con que el l¨ªder de ERC, Oriol Junqueras, obsequia estos d¨ªas al PSC. Y se refuerzan con el rotundo rechazo de su candidato a la alcald¨ªa barcelonesa, Ernest Maragall, a pactar con los socialistas en el gobierno municipal.
Esta posici¨®n de ERC facilita el entendimiento del PSC con la derecha catalana. Los sondeos anuncian que en Barcelona habr¨¢ una s¨®lida mayor¨ªa de izquierdas. Nada menos que 26 concejales sobre 41, seg¨²n la encuesta de 40dB para EL PA?S. Pero si ERC y PSC se declaran mutuamente incompatibles, como ocurri¨® ya en 2019, entonces el giro del PSC a la derecha abre la v¨ªa a que Junts pueda intervenir en la elecci¨®n de alcalde. Con una mayor¨ªa de izquierdas, al PSC le ser¨ªa imposible hacer alcalde a Trias si este queda en primer lugar, pero si el m¨¢s votado es Collboni, a Trias le puede venir bien apoyarle simplemente para tener baza. ?Con qu¨¦ programa? La f¨®rmula para esta operaci¨®n es conocida. Es la que utiliz¨® Illa el oto?o pasado en la negociaci¨®n del presupuesto de la Generalitat: asumir el programa de los poderes econ¨®micos catalanes.
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