Fronteras
Ante unas elecciones generales convocadas precipitadamente, todos los partidos han tenido que apresurarse en modular y codificar estrategias y mensajes
Para algunos de ellos ¡ªy a pesar de la precipitaci¨®n¡ª la tarea ha sido relativamente f¨¢cil. Tanto los socialistas como Sumar-En com¨², con aciertos y errores comunicativos, han seguido marcando sus prioridades, que pasan por revalidar el Gobierno de coalici¨®n progresista e intentar consolidar la verdadera excepci¨®n ib¨¦rica, en la medida en que, en un continente barrido por los vientos de extrema derecha, la experiencia del Ejecutivo presidido por Pedro S¨¢nchez se ha traducido en pol¨ªticas de ampliaci¨®n de de...
Para algunos de ellos ¡ªy a pesar de la precipitaci¨®n¡ª la tarea ha sido relativamente f¨¢cil. Tanto los socialistas como Sumar-En com¨², con aciertos y errores comunicativos, han seguido marcando sus prioridades, que pasan por revalidar el Gobierno de coalici¨®n progresista e intentar consolidar la verdadera excepci¨®n ib¨¦rica, en la medida en que, en un continente barrido por los vientos de extrema derecha, la experiencia del Ejecutivo presidido por Pedro S¨¢nchez se ha traducido en pol¨ªticas de ampliaci¨®n de derechos, fortalecimiento de la democracia y redistribuci¨®n de la riqueza. Que se dice pronto.
El caso de las derechas de adscripci¨®n estatal tambi¨¦n es claro: el PP y Vox han desplegado toda su artiller¨ªa en contra de la inmigraci¨®n, de las supuestas okupaciones, de los derechos de las mujeres y del colectivo LGTBIQ+, de cualquier expresi¨®n de diversidad cultural y ling¨¹¨ªstica. En general, han atizado el odio en contra de lo que llaman gen¨¦ricamente sanchismo, y que en cierta manera sintetiza las pol¨ªticas y los valores de lo que ha sido hasta hoy el Gobierno de coalici¨®n progresista.
El campo del nacionalismo catal¨¢n conservador ha sufrido una diversificaci¨®n interna con impacto electoral incierto, pero que se ha traducido en orientaciones claras. El PDeCAT-Espai CiU de Roger Monta?ola apuesta por dar por amortizado del todo y de forma expl¨ªcita el proc¨¦s y por volver a una oferta pol¨ªtica de derecha implacable desde un punto de vista socioecon¨®mico ¡ªbajada de impuestos, recortes en el Estado de bienestar (que el candidato lleg¨® a calificar, con una cierta pericia dial¨¦ctica ¡°elefant¨ªaco¡±), glorificaci¨®n de la empresa privada, minusvaloraci¨®n de la emergencia clim¨¢tica¡ª, pero moderna por lo que se refiere a las libertades personales. Con este cuadro ¡ªy con el fracaso de la operaci¨®n Trias¡ª, Junts intenta ocupar el espacio del nacionalismo y del independentismo irrendentista, que tiene como ¨²nico objetivo recoger el consenso de quienes, gen¨¦ricamente, quieren manifestar que no colaborar¨¢n con las instituciones del Estado espa?ol. Aunque sea, precisamente, a trav¨¦s de la participaci¨®n en las mismas. Desde un punto de vista de la l¨®gica es un mensaje totalmente contradictorio, pero con los herederos de Converg¨¨ncia nunca se sabe. La CUP est¨¢ haciendo un poco lo mismo que Junts, pero con pendientes y ret¨®rica izquierdista.
ERC, en cambio, parece que no sepa bien c¨®mo encarar esta convocatoria. Despu¨¦s de tres a?os de apoyo al Gobierno de coalici¨®n (aunque haya cometido el gran error de no haber votado la reforma laboral, todo sea dicho), con la victoria de la mesa de di¨¢logo y de los indultos en el bolsillo, en vez de presumir de la apuesta por la colaboraci¨®n, a ratos directamente la esconde y a ratos vuelve, casi por un reflejo pavloviano fruto del eterno complejo de inferioridad ¡°nacional¡±, a la ret¨®rica de la confrontaci¨®n. Probablemente se deba a que tiene muchas y diversas fronteras electorales. Sin embargo, no deber¨ªa olvidar que, a la postre, las fronteras siempre encierran.
Puedes seguir a EL PA?S Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal