El MacGuffin de Esquerra
Acercarse ahora a Salvador Illa es pura criptonita para cualquiera que desee salir vivo de la segunda votaci¨®n, este s¨¢bado, para dirigir el partido republicano
¡°El grupo parlamentario de Esquerra Republicana se ha abstenido este mi¨¦rcoles en el decreto de Patrimonio del Govern en el Parlament como toque de atenci¨®n al Govern¡±. Esta nota la ha mandado el servicio de prensa de ERC para explicar la aparente contradicci¨®n de abstenerse en un decreto que puso en marcha en su momento el Ejecutivo de Pere Aragon¨¨s. El contenido del decreto es lo de menos, se trata de un MacGuffin -un pretexto aleatorio para desencadenar una trama cinematogr¨¢fica, seg¨²n defini¨® Alfr...
¡°El grupo parlamentario de Esquerra Republicana se ha abstenido este mi¨¦rcoles en el decreto de Patrimonio del Govern en el Parlament como toque de atenci¨®n al Govern¡±. Esta nota la ha mandado el servicio de prensa de ERC para explicar la aparente contradicci¨®n de abstenerse en un decreto que puso en marcha en su momento el Ejecutivo de Pere Aragon¨¨s. El contenido del decreto es lo de menos, se trata de un MacGuffin -un pretexto aleatorio para desencadenar una trama cinematogr¨¢fica, seg¨²n defini¨® Alfred Hitchcock. Lo importante de este asunto, lo que quiere remarcar ERC, es que no se somete por sistema a los deseos de Salvador Illa.
En la sesi¨®n de control de este mi¨¦rcoles, el jefe de filas de ERC, Josep Maria Jov¨¦, ha lanzado una dura diatriba contra el president por haber aceptado la inclusi¨®n de la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil en el n¨²mero de emergencias 112. Lo que, en principio, no tiene mucho que ver con ese decreto sobre la retenci¨®n en Catalunya del impuesto de Patrimonio. Pero los actuales dirigentes de ERC est¨¢n ¨¢vidos de distanciarse del PSC. Bueno, y del PSOE, a quien tambi¨¦n dieron un NO esta semana, votando con Vox, PP y Junts contra el impuesto a las energ¨¦ticas. Y hace 15 d¨ªas, mientras la mayor¨ªa de la izquierda se sumaba a las protestas por la situaci¨®n de la vivienda, el propio Jov¨¦ hizo un discurso de tono nacionalista reprochando a Illa su apoyo al aceite de Ja¨¦n.
Es f¨¢cil relacionar esta estrategia reciente con la coyuntura interna de Esquerra. Los republicanos est¨¢n sumidos en un proceso electoral tormentoso y agrio; entre las dos candidaturas en liza apenas hay diferencias ideol¨®gicas, pero ambas se disputan los votos del grupo que qued¨® eliminado en primera ronda, Foc Nou, que ha hecho bandera del alma m¨¢s independentista del partido (su candidata a presidenta, Helena Sol¨¤, lleg¨® a decir que su independentismo part¨ªa de su ¡°identidad¡± catalana, algo que en ERC no suele o¨ªrse desde hace tiempo y que alisar¨ªa de golpe los rizos de la pelambrera de Joan Tard¨¤). En los ¨²ltimos d¨ªas, los seguidores de Oriol Junqueras y el equipo de Xavier God¨¤s han competido por ver qui¨¦n le hac¨ªa el regalo m¨¢s apetitoso a Foc Nou, con la esperanza de apropiarse de los 800 votos que obtuvo su candidatura en la primera vuelta de esta endiablada pelea de gallos a la republicana. Y han modelado su discurso adoptando parte del argumentario de los de Helena Sol¨¤, que incluye un rechazo total del apoyo de ERC a los gobiernos socialistas.
Por eso, acercarse ahora a Illa es pura criptonita para cualquiera que desee salir vivo de la segunda votaci¨®n, este s¨¢bado, y pintar algo en el partido a partir del d¨ªa despu¨¦s (la referencia a la pel¨ªcula catastrofista de 2004 no est¨¢ hecha al tun tun). Entretanto, Illa espera paciente a la resoluci¨®n de la trama para negociar los presupuestos y, a juzgar por el tono que gasta en estas sesiones de control, parece confiado en sus opciones.