Los vecinos de dos edificios siguen fuera de sus casas un a?o despu¨¦s de la tragedia de Badalona
Los propietarios de 420 pisos se enfrentan a una reforma de 25.000 euros por inmueble si quieren salvarlo de la declaraci¨®n de ruina
Faltaban solo unos minutos para las 10.30 del 6 de febrero de 2024 cuando colaps¨® el suelo del comedor y parte de una habitaci¨®n del ¨¢tico tercera del n¨²mero 9 de la calle Canig¨® de Badalona. El desprendimiento se llev¨® por delante los comedores y las habitaciones de las terceras puertas de todo el edificio, desde el ¨¢tico hasta los bajos. Murieron tres personas: Marc que viv¨ªa en el bajo, Mar¨ªa en tercero y Di...
Faltaban solo unos minutos para las 10.30 del 6 de febrero de 2024 cuando colaps¨® el suelo del comedor y parte de una habitaci¨®n del ¨¢tico tercera del n¨²mero 9 de la calle Canig¨® de Badalona. El desprendimiento se llev¨® por delante los comedores y las habitaciones de las terceras puertas de todo el edificio, desde el ¨¢tico hasta los bajos. Murieron tres personas: Marc que viv¨ªa en el bajo, Mar¨ªa en tercero y Diana en el segundo. Las semanas siguientes continu¨® la pesadilla en los edificios anexos. El 14 de febrero, los 20 pisos del n¨²mero 7 fueron tambi¨¦n desalojados ante el riesgo de colapso. El 20 de febrero les toc¨® a los del n¨²mero 11 y, un d¨ªa despu¨¦s, desalojaron un cuarto edificio, el n¨²mero 5. El miedo ante la precariedad de los materiales con los que estaba construida, en los a?os 50, toda la manzana hac¨ªa pensar que la desgracia se extender¨ªa a hasta 22 edificios (420 pisos). As¨ª fue.
Un a?o despu¨¦s, la situaci¨®n no ha cambiado demasiado. Las familias que viv¨ªan en el n¨²mero 9 y 7 de Canig¨® no han podido regresar a sus casas. Tampoco han podido los del bajo del n¨²mero 5. En total, 37 viviendas. Siguen impracticables y sus habitantes llevan un a?o viviendo de prestado. De hecho, solo nueve han sido realojados en pisos municipales mientras que los dem¨¢s se han refugiado en sus familias. El resto de vecinos de lo que se ha pasado a denominar ¡°manzana Canig¨®¡±, 420 familias, regresaron a sus hogares despu¨¦s de que se apuntalaran sus pisos. Llevan meses viviendo entre estructuras temporales, con puntales en todas las habitaciones. La investigaci¨®n de la causa del derrumbe sigue abierta en los juzgados de Badalona mientras los vecinos de toda la manzana se enfrentan ahora al pago de, como m¨ªnimo, unas reformas de m¨¢s de 25.000 euros por piso. Si no se hacen efectivas estas obras, la amenaza es de declarar la ruina en toda la manzana.
El teniente de alcalde de territorio en Badalona, Daniel Gracia, defiende que el Ayuntamiento fue la ¡°¨²nica administraci¨®n que actu¨® con rapidez desde el primer momento de la tragedia¡±. Gracia defiende que en tan solo tres semanas el Consistorio contrat¨® a una empresa que revisara todos los edificios. ¡°El gran problema es que los forjados estaban construidos con material cer¨¢mico sin nada de metal ni vigas de refuerzo. Se instalaron los puntales a¨¦reos y conseguimos que volvieran 80 familias a sus casas. Hay otras que no fueron desalojadas pero que viven con puntales y 37 que no han podido regresar¡±, enumera Gracia.
David Enri es el propietario del 4? 4? del n¨²mero 7. Cuando ocurri¨® el accidente sus suegros viv¨ªan en el piso. No han podido regresar. ¡°En este a?o cada uno ha tenido que buscarse la vida como ha podido. Sin vivir en casa hemos tenido que pagar el Ibi y el recibo de la basura¡±, denuncia.
Gracia defiende que el Consistorio ha destinado un mill¨®n de euros para cubrir los costes iniciales, incluida la instalaci¨®n de puntales, la elaboraci¨®n de los proyectos de rehabilitaci¨®n y el apoyo jur¨ªdico a las personas afectadas. El teniente de alcalde lamenta que el ejecutivo de Pere Aragon¨¨s, que gobernaba cuando tuvo lugar el accidente, no apoy¨® ni al Consistorio ni a los afectados. ¡°Los puntales son provisionales y las obras definitivas no pueden esperar demasiado. La estructura sigue deteriorada y las reformas suponen que cada propietario debe afrontar unas obras muy caras. Sabemos que no todos los vecinos disponen de ese dinero y esperemos que el nuevo ejecutivo en la Generalitat sea m¨¢s receptivo y ofrezca cr¨¦ditos blandos a los vecinos¡±, se esperanza el teniente de alcalde.
¡°Estamos desamparados totalmente. Este es un barrio obrero donde la mayor¨ªa, o son jubilados, o vamos muy justos de dinero. Si no conseguimos la financiaci¨®n la amenaza es de declararlo ruina y derribar¡±, lamenta Enri. ¡°Adem¨¢s, como la investigaci¨®n sigue en el juzgado los seguros no han pagado ni un euro hasta determinar qui¨¦n es el culpable de estos hechos¡±, lamenta el vecino.
Tania Fern¨¢ndez vive en el n¨²mero 5 de la calle Canig¨®. Fue desalojada hace un a?o junto con su perrita Runa y dos ratas blancas que ten¨ªa como mascotas. ¡°Despu¨¦s de semanas con mis padres, por fin volv¨ª a casa, ves los puntales y las maderas por todas partes. Te tumbas en la cama y sientes que todo es provisional,¡± explica Tania. ¡°Ahora hay que hacer la reforma pero debe hacerse en todos los pisos porque de nada sirve si yo reformo y el de abajo no lo hace¡±, lamenta advirtiendo que no va a ser nada f¨¢cil poner a todos los vecinos de acuerdo.
En el n¨²mero 11 viven Alejandro Gares y su marido Miguel ?ngel. Cuando les dejaron entrar, tras ser desalojados, fueron directos a recuperar los trajes con los que se casar¨ªan en junio. Hace un a?o del suceso y ahora est¨¢n de viaje de novios en Disneyland Par¨ªs. ¡°Vivimos de alquiler. Sabemos que el propietario tiene que conseguir la derrama y a lo mejor vende el piso. Nos encantar¨ªa comprarlo porque tras la obra ser¨¢ como un bunquer y sobrevivir¨¢ m¨¢s de un siglo¡±, explica Gares.