El nuevo Mestalla, quince a?os en fuera de juego
El club de f¨²tbol trabaja en un nuevo proyecto tras encarrilarse un pacto entre el alcalde Joan Rib¨® y Layhoon Chan, la enviada del principal accionista Peter Lim
La capital del Turia y el Valencia CF est¨¢n de cumplea?os, pero no feliz. El pr¨®ximo 1 de agosto se cumplen 15 a?os del inicio de las obras del nuevo Mestalla, en el verano de 2007, otro aniversario de la construcci¨®n parada pero con una brizna de esperanza. Despu¨¦s de muchos meses de cajas destempladas en forma de declaraciones, actos administrativos y denuncias, el club y las administraciones p¨²blicas valencianas perfilan el en¨¦simo plan para acabar el recinto deportivo.
El club trabaja en un nuevo proyecto que pre...
La capital del Turia y el Valencia CF est¨¢n de cumplea?os, pero no feliz. El pr¨®ximo 1 de agosto se cumplen 15 a?os del inicio de las obras del nuevo Mestalla, en el verano de 2007, otro aniversario de la construcci¨®n parada pero con una brizna de esperanza. Despu¨¦s de muchos meses de cajas destempladas en forma de declaraciones, actos administrativos y denuncias, el club y las administraciones p¨²blicas valencianas perfilan el en¨¦simo plan para acabar el recinto deportivo.
El club trabaja en un nuevo proyecto que presentar¨¢ en unas semanas y lo hace despu¨¦s de encarrilarse un pacto entre el alcalde Joan Rib¨® y Layhoon Chan, la expresidenta del club y enviada del m¨¢ximo accionista del club Peter Lim, tal y como hab¨ªa reclamado el presidente de la Generalitat, Ximo Puig. ¡°Hay una ventana de oportunidad¡±, admiti¨® el alcalde.
Seg¨²n el acuerdo, el flamante estadio, con una nueva inversi¨®n de 120 millones que se sumar¨ªan a los 172 ya gastados, se inaugurar¨ªa en septiembre de 2025 con capacidad para 66.000 espectadores y la posibilidad de ampliar el aforo hasta los 70.000 en cinco meses si hiciera falta. Adem¨¢s, se concretar¨ªa un protocolo para el montaje de una pista de atletismo para que la ciudad pueda aspirar a grandes campeonatos y el Consistorio construir¨ªa el polideportivo en Benicalap gir¨¢ndole la factura al club, que lo debe desde hace dos d¨¦cadas.
La idea inicial de Lim de abrir el campo con 42.000 localidades en lugar de las 70.000 previstas choc¨® con la negativa frontal de la vicealcaldesa de Valencia, la socialista Sandra G¨®mez. Con la ¨²ltima propuesta, el Valencia se acercar¨ªa a sus compromisos y, a cambio, mantendr¨ªa los cuantiosos beneficios urban¨ªsticos que recibi¨® en su d¨ªa, aunque ya sin el paraguas de la Actuaci¨®n Territorial Estrat¨¦gica (ATE) que la Administraci¨®n le concedi¨® hace a?os para que rescatase el proyecto del estadio. Esas ventajas se concentran en la parcela del actual Mestalla y en el aumento de la edificabilidad de los suelos terciarios, que antes de la pandemia el club pensaba que incrementar¨ªa su precio en 20 o 30 millones de euros. Tambi¨¦n se incluyen dos apetecibles torres junto al nuevo recinto.
El Consell mantiene la idea de dar por caducada anticipadamente la ATE por haber incumplido el club los plazos que ten¨ªa para las primeras fases y ha pedido esta semana un informe preceptivo al Consell Jur¨ªdic Consultiu (CJC), cuyo dictamen ser¨¢ vinculante si afecta a cuestiones esenciales. El plan es firmar sendos convenios que garanticen los pactos y ponerlo en marcha cuanto antes para que la ciudad pueda ser una de las sedes del Mundial de 2030 si triunfa la candidatura de Espa?a y Portugal. ¡°No puede haber un Mundial sin que Valencia est¨¢ presente¡±, apunt¨® Puig hace unos d¨ªas.
¡°Vamos a tener el mejor estadio de Europa, con 75.000 plazas y nos va a sobrar dinero¡±. La chulesca frase la pronunci¨® en 2006 Juan Soler, el entonces m¨¢ximo accionista del Valencia. El 10 de noviembre de ese a?o, en una ostentosa gala en el Museo Pr¨ªncipe Felipe, el constructor destap¨® junto a la entonces alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, y al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, la maqueta del primer Nou Mestalla. Un estadio vanguardista con una ic¨®nica cubierta para poner Valencia en el mapa.
Todo hab¨ªa comenzado unos a?os antes cuando convergieron la b¨²squeda de grandes eventos por parte de los exdirigentes populares y la necesidad del club de aliviar sus cuentas vendiendo la parcela del actual Mestalla en la avenida de Arag¨®n. Quer¨ªa aumentar sus ingresos habituales con una nueva casa m¨¢s grande y lujosa.
En un primer convenio, de julio de 2004, el Consistorio renunciaba a su idea de construir un estadio municipal y le vend¨ªa, en modo de permuta, al club la parcela en la avenida de Les Corts Valencianes para que lo hiciera la entidad, manteniendo el derecho de uso de la ciudad en el caso de ¡°poder aspirar a la organizaci¨®n de eventos deportivos tan relevantes como el mundial de atletismo de 2009, campeonatos internacionales de f¨²tbol de m¨¢xima categor¨ªa, o la celebraci¨®n de grandes espect¨¢culos musicales¡±.
Empezaron a tejerse protocolos y recalificaciones que aumentaron la edificabilidad de las dos parcelas en cuesti¨®n y en los que el Valencia se comprometi¨® a un estadio cinco estrellas con un aforo m¨ªnimo de 70.000 espectadores y con la posibilidad de la pista de atletismo.
La burbuja inmobiliaria
Las obras arrancaron y los planes se multiplicaron. ¡°Hemos expuesto las excelencias de nuestra ciudad para que la UEFA acepte que Valencia albergue la final de la Champions de 2011¡å, contaba Barber¨¢ [ya fallecida] tras una visita de la federaci¨®n europea. En plena euforia, lleg¨® la crisis de 2008 y un accidente en las obras en el que murieron cuatro personas. El ritmo de construcci¨®n se ralentiz¨® hasta que el 25 de febrero de 2009 el club confirm¨® el par¨®n definitivo. .
El proyecto se intent¨® desatascar tres a?os despu¨¦s con un pacto con Bankia y la Generalitat para relanzarlo con nueva financiaci¨®n y la aprobaci¨®n de la ATE. Aquel Bolet¨ªn Oficial de la Provincia del 15 de mayo de 2015 establec¨ªa que en esa misma fecha pero de 2021 el estadio deb¨ªa estar listo.
La venta del equipo a Peter Lim cont¨® con el impulso de Amadeo Salvo, que entonces presid¨ªa el club, y de Aurelio Mart¨ªnez, su hom¨®logo en la Fundaci¨® VCF. Para convencer a una afici¨®n dividida, ambos hablaron en su nombre. ¡°Lim se ha comprometido por contrato a que el equipo juegue en el nuevo estadio en el a?o del centenario (2019)¡±, apunt¨® el primero. ¡°Si nadie compra la parcela de Mestalla, ¨¦l pone dinero (150 millones) de alguna de sus empresas¡±, a?adi¨® el segundo. Pero nada de eso apareci¨® como obligaci¨®n en el contrato de venta.
El accionista singapurense prioriz¨® vender el actual Mestalla a un tercero pero en marzo de 2020 fracas¨® el ¨²ltimo intento de enajenarlo por unos 120 millones y las Administraciones valencianas empezaron a presionar para que se acabase el estadio. Ante la falta de respuesta, llegaron las multas. En junio de 2021 se le puso una de 2,3 millones y se anunci¨® una segunda de cerca de 10 millones. El Valencia trat¨® de ganar tiempo pidiendo una pr¨®rroga de cinco a?os de la ATE (hasta 2030), que le fue denegada y que mantiene en el juzgado.
Pero, en medio, el pasado agosto lleg¨® el milagro del acuerdo de LaLiga con el fondo CVC, que inyecta 120,7 millones en el club, de los cuales 80 deben ir a infraestructuras. Con esa base y tras muchos meses de disputas, todo parece encarrilado pero nadie se f¨ªa. Por la complejidad del asunto, por los precedentes y porque a¨²n resuena el audio robado al expresidente Anil Murthy en abril. ¡°Prefiero ir, que me digan lo que quieren. Siempre con la sonrisa. ¡®Gracias, gracias, gracias¡¯. Luego Germ¨¢n Cabrera [el abogado de Lim en Espa?a], ¡®pum¡¯. Vamos a llevar a la Generalitat a juicio¡±, les avanz¨® a unos empresarios en una comida que acab¨® precipitando su salida, sin que se sepa si fue por la indiscreci¨®n o por la estrategia que planteaba.
El centenario inesperado de un estadio m¨ªtico
Según los primeros planes, el actual estadio de Mestalla debía llevar más de una década demolido… pero ahí sigue. Viejo, irregular y mítico. Incluso ha sorteado una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a demoler parte de su última ampliación. Los vecinos no pidieron la ejecución de la misma tras asegurarles la entidad y las administraciones que su derribo total era inminente por la construcción del Nou Mestalla.
De esta manera y contra todo pronóstico, esta temporada el que ya es el estadio más antiguo de Laliga, inaugurado en un amistoso contra el Levante en la primavera de 1923, celebrará su centenario. Haciendo de la necesidad virtud, el club ha hecho de esta efeméride el gran argumento de la próxima temporada. De la campaña de abonos a las camisetas son un homenaje a un recinto que sigue ‘amenazado’ pero sin fecha de caducidad.
Dhecho, en este largo proceso no han faltado voces que han pedido revertir esta gigantesca y hasta ahora fallido operación. El propio club estudió la opción de demoler lo avanzado hasta ahora en el nuevo estadio, vender esa parcela (previamente recalificada) y reformar el actual recinto para adaptarlo a la ley. Parece imposible pero Mestalla ha vivido remontadas que también lo eran.