El Pacto del Odio
El acuerdo entre PP y Vox no oculta su desd¨¦n por el autogobierno y las instituciones, su voluntad de dar barra libre a la especulaci¨®n, la desigualdad y el pillaje
Fue Isabel Bonig, entonces l¨ªder del PP, quien en 2015 acu?¨® la expresi¨®n ¡°Pacto del Titanic¡± para hacer referencia al reci¨¦n sellado ¡°Pacte del Bot¨¤nic¡± de las izquierdas valencianas. Bonig hac¨ªa referencia a un deseo m¨¢s que a una certeza cuando afirmaba, categ¨®rica, que el Consell conformado por el PSPV y Comprom¨ªs no durar¨ªa m¨¢s all¨¢ de 2017. Trat¨® de que la expresi¨®n permease no s¨®lo en el debate pol¨ªtico, sino tambi¨¦n en la esfera medi¨¢tica, y la repiti¨® una y otra vez... hasta que dej¨® de hacerlo, superada por la realidad. El primer Bot¨¤nic, pese a sus errores, no fue s¨®lo un gobierno c...
Fue Isabel Bonig, entonces l¨ªder del PP, quien en 2015 acu?¨® la expresi¨®n ¡°Pacto del Titanic¡± para hacer referencia al reci¨¦n sellado ¡°Pacte del Bot¨¤nic¡± de las izquierdas valencianas. Bonig hac¨ªa referencia a un deseo m¨¢s que a una certeza cuando afirmaba, categ¨®rica, que el Consell conformado por el PSPV y Comprom¨ªs no durar¨ªa m¨¢s all¨¢ de 2017. Trat¨® de que la expresi¨®n permease no s¨®lo en el debate pol¨ªtico, sino tambi¨¦n en la esfera medi¨¢tica, y la repiti¨® una y otra vez... hasta que dej¨® de hacerlo, superada por la realidad. El primer Bot¨¤nic, pese a sus errores, no fue s¨®lo un gobierno competente y digno, sino tambi¨¦n uno que goz¨® de extraordinaria estabilidad institucional.
Hoy, ocho a?os despu¨¦s, nos encontramos ante un panorama muy diferente. Podemos afirmar, sin miedo a equivocarnos como le pas¨® a Bonig, que el pacto de cincuenta puntos firmado a toda prisa por el PP y VOX para gobernar la Generalitat merece ser bautizado como ¡°El Pacto del Odio¡±. Haci¨¦ndolo no expresamos un anhelo; corroboramos aquello que desgraciadamente es tan cierto como palmario. Tan s¨®lo hizo falta ver los discursos de la noche electoral: su ¨²nica propuesta es el odio, el rencor y la expulsi¨®n del otro. La destrucci¨®n, no la construcci¨®n.
Es un pacto del odio contra las mujeres, lo que resulta poco sorprendente si consideramos que un maltratador condenado ha sido uno de sus m¨¢ximos art¨ªfices. Es un pacto del odio contra el territorio y la naturaleza, a los que se ve como meros proveedores de recursos y servicios a los que seguir explotando. Es un pacto del odio contra la historia y la identidad valencianas, cercenando v¨ªnculos territoriales y borrando la historia a su conveniencia. Y es muy especialmente un pacto contra el valenciano, lengua materna de millones de personas, del que les molesta su mera existencia.
Es un pacto del odio contra la cultura en general, que ya ha tenido traducci¨®n directa en qui¨¦n ocupara la consejer¨ªa correspondiente. Es un pacto del odio contra la ciencia, puesto que no hace menci¨®n alguna al cambio clim¨¢tico en una de las regiones m¨¢s vulnerables de todo el planeta. Es un pacto del odio contra el diferente, contra el migrante, contra las clases bajas, contra quien no tiene nada.
Es un pacto del odio contra una educaci¨®n p¨²blica, de calidad y que fomente la convivencia y el reconocimiento de la diversidad. Es un pacto del odio no s¨®lo contra la sanidad, sino tambi¨¦n contra la salud de todos los valencianos y valencianas. Es un pacto del odio contra nuestra imagen dentro de Espa?a y tambi¨¦n m¨¢s all¨¢ de sus fronteras. Es un pacto del odio contra la memoria y la democracia
Cabe reconocer, eso s¨ª, que tambi¨¦n es un pacto por la vagancia y la corrupci¨®n, puesto que sus puntos, p¨¦simamente redactados y estirados como un chicle barato, son incapaces de ocultar su desd¨¦n por el autogobierno y las instituciones, su voluntad de dar barra libre a la especulaci¨®n, la desigualdad y el pillaje. Y es un pacto que resulta sintom¨¢tico por lo que omite: la derecha ha tenido cuatro presidentes auton¨®micos (Zaplana, Olivas, Camps y Fabra), pero no se siente capaz de reivindicar a ninguno. Por algo ser¨¢.
Ser¨¢ pues un gobierno sin legado y contra el futuro, alimentado por el odio. Y justo por ello no es ahora un momento de derrotismo ni tristeza. Frente a su odio reivindicaremos siempre la memoria, la vida, el amor y el progreso. Cada d¨ªa, con cada gesto. Ni un paso atr¨¢s.