Capitanes de pesqueros, mec¨¢nicos de yates y buzos que sueldan metales bajo el agua

En el costado de poniente del peque?o muelle que tiene asignado el instituto de FP Polit¨¨cnic Mar¨ªtim Pesquer del Mediterrani, en el puerto de Alicante, un contenedor de carga mar¨ªtima concentra buena parte de la actividad. En su interior, un profesor y un alumno dan instrucciones mediante un intercomunicador con v¨ªdeo a dos aprendices de buzo que est¨¢n practicando soldaduras submarinas. Otras dos alumnas del m...

En el costado de poniente del peque?o muelle que tiene asignado el instituto de FP Polit¨¨cnic Mar¨ªtim Pesquer del Mediterrani, en el puerto de Alicante, un contenedor de carga mar¨ªtima concentra buena parte de la actividad. En su interior, un profesor y un alumno dan instrucciones mediante un intercomunicador con v¨ªdeo a dos aprendices de buzo que est¨¢n practicando soldaduras submarinas. Otras dos alumnas del mismo ciclo, el de Buceo, sujetan los cables conectados a los cascos que permiten respirar a sus compa?eros. Un poco m¨¢s atr¨¢s, junto al pa?ol, dos j¨®venes enfundados en monos de trabajo sueldan una estructura met¨¢lica para la clase de Mec¨¢nica. A trav¨¦s de una ventana del piso superior se puede ver a estudiantes enfrascados en la lectura de mapas n¨¢uticos, correspondiente al tercero de los ciclos que imparten, el de Puente. ¡°Los estudiantes de este instituto¡±, admite Marta Cort¨¦s, una bi¨®loga salmantina de 36 a?os que se ha estrenado este curso como profesora de buceo en el centro alicantino, ¡°no tienen perfil de oficina¡±.

Las clases del Mar¨ªtim Pesquer, el ¨²nico instituto de sus caracter¨ªsticas de la Comunidad Valenciana, arrancaron en 1976. ¡°Hasta el pasado mes de julio¡±, indica su directora, To?i Llorca, ¡°depend¨ªa de la Consejer¨ªa de Agricultura¡±. Un decreto del gobierno auton¨®mico de junio de 2023 lo convirti¨® en Centro Integrado P¨²blico de Formaci¨®n Profesional (Ceipfp) y traslad¨® sus competencias a la de Educaci¨®n, por lo que su plantilla, ¡°de una treintena de profesores¡±, la comparte personal dependiente de ambos gabinetes. En este curso est¨¢n inscritos ¡°180 alumnos, de 17 a 60 a?os¡±, se?ala Llorca, de los que seis son mujeres. Ofrecen tres grados medios, uno por ciclo, y otros dos superiores, el de Transporte mar¨ªtimo y pesca de altura y el de Organizaci¨®n del mantenimiento de m¨¢quinas de buques y embarcaciones, detalla la jefa de estudios, Carolina Carrillo. Cualquier oficio relacionado con el mar se certifica aqu¨ª. Desde el patr¨®n de un pesquero hasta el mec¨¢nico de un crucero, pasando por un buzo capaz de trasladar y colocar bajo el mar bloques de hormig¨®n de varias toneladas con la ayuda de globos inflados con aire.

Blanca Romero es una aspense de 36 a?os que trabaja en una f¨¢brica, como operaria. Pero ¡°llevaba mucho tiempo planeando estudiar aqu¨ª¡±, asegura, mientras sostiene el cable que permite respirar a uno de sus compa?eros. ¡°Me llamaba la atenci¨®n el buceo¡±, contin¨²a, ¡°poder trabajar y respirar bajo el agua¡±. Junto a ella est¨¢ Anastasia Muckenberger, alemana de 24 a?os que vive en Espa?a desde que era una ni?a y que, tras estudiar para administrativa y t¨¦cnica de atenci¨®n a personas en situaci¨®n de dependencia, se ha apuntado tambi¨¦n este curso. Vino porque le atra¨ªa el mar. Ahora ha podido comprobar que le apasiona ¡°soldar bajo el agua¡±, entre otras cosas. Cort¨¦s, su profesora, se?ala que el campo de actuaci¨®n submarina es ampl¨ªsimo. ¡°Tras aprender a manejar los equipos y c¨®mo funcionan los gases dentro del cuerpo y dentro del agua¡±, relata, los alumnos de buceo ¡°aprenden todo tipo de obra hidr¨¢ulica, como a soldar, hormigonar, manejar una radial o ensamblar emisarios de aguas residuales u oleoductos¡±, por ejemplo. O a reflotar elementos hundidos, en el litoral ¡°o en aguas fr¨ªas¡±, mar adentro.

El control de una embarcaci¨®n recae en el ciclo de Puente, comandado por el profesor H¨¦ctor Mench¨¦n, madrile?o de 50 a?os. La tradici¨®n pesquera de municipios como Villajoyosa o Santa Pola es la que m¨¢s alumnos env¨ªa, pero tambi¨¦n cuenta con estudiantes que se decantan por el patronaje de yates de recreo, de marina mercante o de transporte de pasajeros, como ferris o cruceros. Dos de sus alumnos son Javier Mor¨®n, de 53 a?os, y Miguel Granell, de 41. Mor¨®n es oficial de la unidad mar¨ªtima de la Polic¨ªa Local de Villajoyosa, que ejerce las labores de ¡°vigilancia y control de los 17 kil¨®metros de costa¡± del municipio alicantino. Entre sus funciones, tambi¨¦n est¨¢ la de ¡°colaborar en la inmersi¨®n mensual para controlar el pecio Bou-Ferrer¡±, el yacimiento submarino de ¨¦poca romana mejor conservado del Mediterr¨¢neo. Se ha apuntado al grado superior de patr¨®n de altura para ampliar sus ¡°competencias para navegar y trabajar en el mar¡±. Igual que Granell, bombero del Ayuntamiento de Val¨¨ncia, que para ¡°promocionar a un cargo oficial¡± necesita titulaciones superiores. ¡°Generalmente trabajamos en altura, en incendios de barcos¡±, explica, ¡°y somos la ¨²nica unidad de la provincia especializada en aguas internas¡±, como r¨ªos o embalses. En su horizonte, no descarta un futuro profesional en un ch¨¢rter, los barcos contratados por turistas que desean navegar por diferentes costas.

En el mismo ciclo estudi¨® David Fern¨¢ndez, hispano-colombiano de 51 a?os. Es ocean¨®grafo f¨ªsico y licenciado en negocios internacionales y se enrol¨® durante 18 a?os en la Armada de su pa¨ªs. Ahora espera que le convaliden los t¨ªtulos acad¨¦micos en Espa?a y mientras, busca un hueco en el mercado laboral mar¨ªtimo. ¡°Es mi mundo, mi alma es el mar¡±, sostiene. De momento, realiza las pr¨¢cticas en una empresa de viajes tur¨ªsticos desde Santa Pola a la isla de Tabarca. Pero con su t¨ªtulo ¡°se abre un abanico de posibilidades, desde marino de puente a personal de cubierta¡±, en el sector pesquero. O en el de marina de recreo, como Vladimir Scurtu, un ingeniero industrial de Moldavia de 49 a?os que trabaja en una empresa de charters de Ibiza. Al llegar a Espa?a en el a?o 2000, se enrol¨® en ¡°un palangranero dedicado a la pesca de at¨²n y pez espada en Torrevieja¡±, recuerda. Cinco a?os despu¨¦s, ya con formaci¨®n reglada, se traslad¨® a Ibiza como ¡°patr¨®n para un magnate holand¨¦s con tres yates¡±. Y ahora, estudia el grado superior de M¨¢quinas. ¡°Hay m¨¢s demanda de mec¨¢nicos navales, con excelentes sueldos¡±, afirma. ¡°Y cuando me canse del mar, puedo encontrar trabajo en tierra¡±. Uno de sus profesores, el ceut¨ª criado en C¨¢diz Alejandro Tejedor, de 53 a?os, ratifica que la mec¨¢nica naval es muy completa, por las necesidades que exige estar a solas en alta mar. Conocen los motores, los combustibles, pero tambi¨¦n fontaner¨ªa o reparaci¨®n de maquinaria de fr¨ªo. ¡°Las condiciones del mar son duras, vives siempre con la maleta hecha¡±, reconoce, ¡°pero despu¨¦s, puedes trabajar en astilleros, en hospitales, en depuradoras, en hoteles¡±. ¡°Cualquier empresa que ve un mec¨¢nico que sabe hacer de todo, se lo queda¡±, sentencia.