El proyecto de bajas emisiones de Valencia deja un a?o sin multas el ¨¢rea residencial de Ciutat Vella

El gobierno local de Valencia, de PP y Vox, respondi¨® a finales de junio a las exigencias medioambientales del Gobierno espa?ol y de la Uni¨®n Europea con el dise?o de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) blanda, de m¨ªnimos, que prohibir¨¢ circular por la capital solo a veh¨ªculos considerados por la DGT como lo m¨¢s contaminantes, los de la clasificaci¨®n A, y que no ser¨¢ plenamente efectiva antes de cuatro a?os. El proyecto de ordenanza es revisado en detalle ahora por diferentes servicios municipales ¡ªtr¨¢mite necesario antes de su aprobaci¨®n¡ª, y advierten de algunas deficiencias: el borrador anula las sanciones del APR (?rea de Prioridad Residencial) de Ciutat Vella durante un a?o si no se rectifica el texto, y no concreta ni cuantifica la reducci¨®n de emisiones contaminantes, denuncian los socialistas. ¡°Somos Capital Verde Europea y, en lugar de hacer una ZBE ejemplar, que pudiera ser una referencia para el resto de ciudades, estamos intentando hacer trampas para no hacer ni una sola pol¨ªtica real en contra del cambio clim¨¢tico¡±, denuncia el portavoz socialista en el Ayuntamiento, Borja Sanju¨¢n.

La Concejal¨ªa de Movilidad revel¨® a finales de junio el contenido de la ordenanza que est¨¢ en estudio: la prohibici¨®n de circular afectar¨¢ a turismos, motocicletas y ciclomotores ¡ªno a los camiones¡ª con distintivo A, es decir los veh¨ªculos con motor de gasolina y 27 a?os de antig¨¹edad (a fecha de 2028) o con motor di¨¦sel y 22 a?os, seg¨²n el borrador de ordenanza aprobado por los dos partidos de gobierno el viernes pasado. Su aplicaci¨®n ser¨¢ de car¨¢cter progresivo: en 2025 no habr¨¢ sanciones y la ordenanza se aplicar¨¢ solo a t¨ªtulo informativo; a partir de 2026 los que porten la etiqueta A y sean de fuera de la provincia de Valencia no podr¨¢n entrar a Valencia o ser¨¢n sancionados, en 2027 no podr¨¢n hacerlo los que sean de fuera de la ciudad, y solo a partir de 2028 tendr¨¢n vedada la circulaci¨®n los matriculados en el municipio.

El borrador de Proyecto de ZBE, que acompa?a al articulado de la ordenanza, la que justifica y sostiene la norma municipal y que la oposici¨®n no conoce, se somete ahora a revisi¨®n de los diferentes servicios municipales para que hagan sus observaciones. Y el de Mejora Clim¨¢tica advierte, por ejemplo, de que en algunas estaciones medidoras de la calidad del aire de Valencia, el valor estimado tras la implantaci¨®n de la ZBE se mantiene e incluso aumenta respecto a los datos de 2023, como ocurre en la Pista de Silla, Viveros y el Bulevar sur. Adem¨¢s echan en falta la estaci¨®n de Olivereta [que corresponde con una parte de la ciudad de tr¨¢fico intenso] a la hora de evaluar el efecto que tendr¨ªa la ZBE.

Las objeciones continuan en el punto referido a objetivos cuantificables para reducir la contaminaci¨®n en la capital. El texto recoge que el objetivo es reducir los niveles de di¨®xido de nitr¨®geno (NO2), part¨ªculas en suspensi¨®n menores de 10 micras (PM10) y part¨ªculas en suspensi¨®n menores de 2.5 micras (PM2,5) pero el proyecto no concreta ni cuantifica la reducci¨®n de emisiones contaminantes, seg¨²n denuncian los socialistas. ¡°Se considera que esos objetivos deber¨ªan de plasmarse en este apartado, tanto los objetivos parciales para las progresivas fases de implantaci¨®n de la ZBE como los objetivos a alcanzar en el denominado escenario ZBE¡±, apunta el Servicio de Mejora Clim¨¢tica.

El departamento alerta de otro de los puntos del proyecto de ZBE cuando precisa que las estaciones medidoras de la contaminaci¨®n de Olivereta y Centro estar¨ªan por encima de lo establecido por las directivas europeas. Cuando habla del escenario 2030, el proyecto dice que se estima suficiente la restricci¨®n del acceso, circulaci¨®n y estacionamiento de los veh¨ªculos con etiqueta A sin necesidad de extender la prohibici¨®n a otras etiquetas puesto que, con estas restricciones, ya se estar¨ªa garantizando los umbrales de calidad del aire de la nueva Directiva, deber¨ªa revisarse este aspecto, plantea el servicio municipal.

El Servicio Central del Procedimiento Sancionador municipal advierte de otro desajuste con el APR de Ciutat Vella. Cuando entre en vigor la ordenanza ¡ªtal y como est¨¢ redactado ahora el proyecto¡ª, el documento que regula el APR, ya en funcionamiento, dejar¨¢ de tener validez. Y el problema est¨¢ en que la futura norma tendr¨¢ un efecto informativo en su primer a?o de aplicaci¨®n, 2025, por lo que se dejar¨ªa de multar a quien acceda al APR. ¡°Si se desea continuar formulando denuncias por infracci¨®n al APR en el periodo transitorio entre la aprobaci¨®n de la Ordenanza de Bajas Emisiones y la finalizaci¨®n del periodo informativo, ser¨ªa necesario la modificaci¨®n de la Disposici¨®n Derogatoria ?nica¡±, recoge la alegaci¨®n.

A la vista del articulado y de la falta de informaci¨®n sobre la documentaci¨®n que acompa?a al anteproyecto de ordenanza de la ZBE, la concejala socialista Mar¨ªa P¨¦rez pregunt¨® y la respuesta por escrito del equipo de gobierno fue cr¨ªptica: ¡°Los criterios y el impacto estimado en materia de reducci¨®n de contaminaci¨®n en virtud de los cuales se ha decidido la redacci¨®n del borrador de ordenanza de las ZBE est¨¢n en ¨ªntima conexi¨®n con el contenido del proyecto que se ha remitido para informe de los diferentes servicios del Ayuntamiento¡±.

¡°Lo ¨²nico que ha hecho Mar¨ªa Jos¨¦ Catal¨¢ es proponer una Zona de Bajas Emisiones fantasma. Es decir, no proponer nada e intentar hacer creer lo contrario. Somos Capital Verde Europea y, en lugar de hacer una Zona de Bajas Emisiones ejemplar, que pudiera ser una referencia para el resto de ciudades, estamos intentando hacer trampas para no hacer ni una sola pol¨ªtica real en contra del cambio clim¨¢tico. Una situaci¨®n que ahora han puesto de relieve los propios servicios municipales con los informes que desacreditan que la ZBE fantasma que ha anunciado a bombo y platillo el PP se base en datos objetivos ¡°.

¡°La realidad es que Catal¨¢ est¨¢ pensando en una ciudad a imagen y semejanza de aquellas personas que viven en urbanizaciones fuera de Valencia y quieren llegar en su coche al centro de la ciudad a costa de los vecinos y vecinas. Y nosotros necesitamos una alcaldesa que piense que los vecinos y vecinas est¨¢n por delante de las necesidades de todos aquellos que creen que las calles son solamente para los coches¡±.