Las izquierdas rechazan abstenerse para facilitar a Moreno un gobierno sin Vox

Los partidos de la izquierda andaluza se han puesto de acuerdo t¨¢citamente para proclamar que si el PP suma m¨¢s que todos ellos juntos, no permitir¨¢n con su abstenci¨®n la investidura del popular Juan Manuel Moreno y aislar as¨ª a Vox. ¡°Rotundamente, no¡±, contest¨® ayer en La Sexta la candidata de la coalici¨®n Por Andaluc¨ªa, Inma Nieto, quien en una entrevista a EL PA?S, el pasado 12 de mayor, ...

Los partidos de la izquierda andaluza se han puesto de acuerdo t¨¢citamente para proclamar que si el PP suma m¨¢s que todos ellos juntos, no permitir¨¢n con su abstenci¨®n la investidura del popular Juan Manuel Moreno y aislar as¨ª a Vox. ¡°Rotundamente, no¡±, contest¨® ayer en La Sexta la candidata de la coalici¨®n Por Andaluc¨ªa, Inma Nieto, quien en una entrevista a EL PA?S, el pasado 12 de mayor, se hab¨ªa mostrado dispuesta a abrir una ¡°reflexi¨®n¡± sobre ese asunto si se diera tal circunstancia. Tambi¨¦n el socialista Juan Espadas est¨¢ en la posici¨®n de no prestar apoyos para bloquear a la ultraderecha, al igual que Teresa Rodr¨ªguez, la l¨ªder de Adelante Andaluc¨ªa.

El debate sobre qu¨¦ posici¨®n van a adoptar los partidos en torno a Vox, al que las encuestas le pronostican una moderada subida respecto de los 12 esca?os que obtuvo en 2018, sigue siendo el eje b¨¢sico sobre el que pivota la campa?a andaluza que finaliza este viernes. Los envites han ido de un partido a otro. Los socialistas y las confluencias de izquierdas basan sus estrategias en advertir del peligro de la entrada de Vox en el Gobierno andaluz para movilizar a sus votantes.

Vox ha dejado claro que, aunque solo le haga falta a Moreno un voto o una abstenci¨®n, le exigir¨¢ al candidato del PP entrar en el Ejecutivo andaluz. El presidente nacional de los populares, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, intent¨® trasladar este ¨®rdago a los socialistas: ¡°Si al PSOE le molesta tanto Vox, que lo acredite¡±. Espadas ha dicho que no a esa posibilidad; Nieto, despu¨¦s de apuntarse a la ¡°reflexi¨®n¡±, ha dicho que no; y Teresa Rodr¨ªguez tambi¨¦n ha dicho no al cord¨®n sanitario. Y todo, sin que los 6,6 millones de andaluces con derecho al voto hayan sentenciado a¨²n qu¨¦ Parlamento quieren y c¨®mo lo quieren. Nuria L¨®pez, la secretaria general de Comisiones Obreras de Andaluc¨ªa, se apunta a ¡°darle un pensamiento¡±, pero despu¨¦s de que los andaluces vayan a las urnas. El sindicato mayoritario de Andaluc¨ªa pide el voto para las opciones progresistas.

A tres d¨ªas de la apertura de urnas se desconoce si el PP de Moreno necesitar¨¢ o no los votos de la extrema derecha para consolidar un ciclo pol¨ªtico que se inici¨® en 2018, cuando las fuerzas conservadoras sumaron m¨¢s que los progresistas y se puso fin a un periodo de casi 37 a?os seguidos de gobiernos socialistas. El objetivo del PP sigue siendo sumar m¨¢s que todas las candidaturas de izquierdas y a partir de ah¨ª jugar con la geometr¨ªa variable si el resto se presta.

Moreno no ha aclarado en ning¨²n momento qu¨¦ har¨¢ si necesita a Vox, aunque este jueves verbaliz¨® por primera vez en Onda Cero un escenario del que lleva rehuyendo toda la campa?a: ¡°Pedro S¨¢nchez necesita para las generales que en Andaluc¨ªa haya un gobierno con Vox. En ning¨²n caso va a permitir que no lo necesitemos, en el supuesto caso de que entrara Vox¡±.

El resto de los partidos, incluido Cs, su socio de coalici¨®n, no tiene dudas de que se aliar¨¢ con Olona, pero el candidato del PP est¨¢ en estos instantes apurando las ¨²ltimas horas y aspira a la mayor¨ªa absoluta (55 de 109 esca?os). El PP aseguraba al comenzar la campa?a que las cosas iban ¡°demasiado bien¡± y a punto de terminar mantienen la misma impresi¨®n, aunque est¨¢n preocupados con la abstenci¨®n en plena ola de calor porque la gente prefiera antes ir a la playa y luego al colegio electoral, en pleno atasco.

Encuestas fallidas

El presidente andaluz dijo este jueves en Chiclana (C¨¢diz): ¡°Sue?o con una mayor¨ªa amplia en coalici¨®n con los andaluces¡±, al tiempo que advirti¨® del riesgo de ¡°dos gobiernos en uno y con bronca interna¡± como el que, sostiene, preside Pedro S¨¢nchez. En este acto se vieron dos caras de Moreno: el que se mostr¨® seguro de que esa mayor¨ªa suficiente ¡°est¨¢ cerca¡± porque lo ve en la calle; y el Moreno que se rega?aba a s¨ª mismo por decirlo y creerse unas encuestas que ¡°a veces fallan m¨¢s que una escopeta de ca?a¡±. ¡°No nos podemos confiar. Yo mismo me contagio, me vengo para arriba y luego me bajo¡±, remach¨®. Hasta el candidato popular se sorprend¨ªa de pedir una mayor¨ªa amplia cuando en otras campa?as se limitaban a reclamar una oportunidad. ¡°?Qu¨¦ cosas!¡±, apostill¨®. Todo es producto del v¨¦rtigo que provoca estar a punto de lograr ¡°un momento hist¨®rico¡± o un decepcionante resultado, aunque suba bastante de los magros 26 diputados actuales.

Otra sorpresa para el PP es la campa?a de su principal rival. En la sala de m¨¢quinas de los populares llevan esperando muchos d¨ªas a que el PSOE de Andaluc¨ªa haga algo, entendiendo por ¡°algo¡± un zarandeo, una sorpresa, un malabarismo que saque a Moreno de su c¨®modo safari electoral fotogr¨¢fico (ayer particip¨® en una suelta de b¨²hos y cern¨ªcalos) y polarice la campa?a. Ya saben que esperan en balde. ¡°No podemos hacer nada m¨¢s¡±, confiesan desde el equipo del aspirante socialista, Juan Espadas, que lleva recorridos cerca de 5.000 kil¨®metros desde el 1 de junio. ?l se desplaza, pero el votante socialista no le sigue en el trayecto. Lo dice el soci¨®logo Manuel P¨¦rez Yruela con datos del estudio del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas: el 58,7% de los votantes del PP sigue con inter¨¦s la campa?a, 16,4 puntos m¨¢s que los del PSOE.

El PSOE se ha propuesto en la recta final alcanzar lo que para la mayor¨ªa de las encuestas es inalcanzable: conseguir ser la fuerza m¨¢s votada y, si no, sumar con Por Andaluc¨ªa y el partido de Teresa Rodr¨ªguez m¨¢s votos y esca?os para el bloque progresista. A los soci¨®logos no les gusta la palabra imposible, porque trabajan con datos y saben que la loter¨ªa toca, aunque no saben a qui¨¦n: ¡°Los indicadores apuntan a una direcci¨®n. No hay nada imposible, pero hay muy baja probabilidad¡±, afirma P¨¦rez Yruela.