¡°El 1 de junio la residencia dejar¨¢ de estar intervenida y volver¨¢ a ser un infierno¡±

De los 615 fallecidos por coronavirus en Galicia, casi la mitad eran usuarios de residencias de ancianos y los mayores focos se registraron en algunas del grupo DomusVi, en el ¨¢rea de Vigo y, sobre todo, en Santiago. La red se enfrenta ahora a la ofensiva judicial que perge?an abogados de diversas asociaciones de familiares. Anuncian ya al menos una querella criminal, adem¨¢s de la admisi¨®n a tr¨¢mite de sus escritos por parte de la fiscal¨ªa y una gran demanda colectiva por la v¨ªa civil. La Federaci¨®n d...

De los 615 fallecidos por coronavirus en Galicia, casi la mitad eran usuarios de residencias de ancianos y los mayores focos se registraron en algunas del grupo DomusVi, en el ¨¢rea de Vigo y, sobre todo, en Santiago. La red se enfrenta ahora a la ofensiva judicial que perge?an abogados de diversas asociaciones de familiares. Anuncian ya al menos una querella criminal, adem¨¢s de la admisi¨®n a tr¨¢mite de sus escritos por parte de la fiscal¨ªa y una gran demanda colectiva por la v¨ªa civil. La Federaci¨®n de Asociaci¨®ns de Familiares de Usuarios de Residencias, conocida como REDE, y la Asociaci¨®n de Consumidores e Usuarios de Galicia (Acouga) sientan las bases de una demanda ¡°a nivel estatal¡± contra DomusVi, que prev¨¦n presentar en torno al mes de octubre ante los juzgados de lo Mercantil de Vigo, donde se encuentra la matriz de la cadena. El abogado Xo¨¢n Ant¨®n P¨¦rez-Lema, de Acouga, define lo ocurrido dentro de sus paredes como una ¡°cat¨¢strofe humanitaria¡±.

En lo peor de la crisis, la Xunta intervino la residencia DomusVi Barreiro, en Vigo, que desde ayer ya no tiene contagiados, y la de Ald¨¢n, en Cangas (al otro lado de la r¨ªa). Las familias reclamaron al Gobierno gallego que tomase tambi¨¦n el tim¨®n de la de San L¨¢zaro, en Santiago, pero eso nunca sucedi¨®. En su lugar, la Xunta traslad¨® a los infectados con movilidad a un centro p¨²blico, Porta do Cami?o, pero los m¨¢s dependientes, seg¨²n los familiares, quedaron dentro.

Xos¨¦ Bern¨¢rdez, presidente del colectivo Vellez Digna, que tiene a su t¨ªa en la residencia de Cangas, una mujer de 94 a?os que ha superado la covid-19, asegura que despu¨¦s de lo que han vivido tienen ¡°p¨¢nico¡± de la vuelta a la normalidad. ¡°El 1 de junio se acaba la intervenci¨®n y regresaremos al infierno de antes¡±, vaticina: ¡°Yo digo que all¨ª, menos pegar, se producen todas las formas de maltrato. El abandono, las ca¨ªdas, la desnutrici¨®n, las curas mal hechas son la marca de la casa¡±. El 21 de abril, el juzgado de Instrucci¨®n 1 de Cangas archiv¨® provisionalmente la denuncia del caso. La juez no ve¨ªa ¡°indicios suficientes de delito". Vellez Digna, no obstante, anuncia ahora que prepara ¡°una querella criminal¡±.

Cuando hacen balance del n¨²mero de fallecidos durante la pandemia, las asociaciones de familiares hablan de 27 en la residencia de Barreiro, 37 en Cangas y 51 en Santiago. Esta ¨²ltima residencia est¨¢ considerada el mayor foco en la comunidad, y seg¨²n Xabier Qui¨¢n, sobrino de una anciana que se infect¨® y portavoz de la Asociaci¨®n de Familiares de Residentes de San L¨¢zaro, la ¡°negligencia¡± y la ¡°falta de personal y medios de protecci¨®n¡± en este centro con plazas privadas y concertadas ¡°multiplic¨®¡± los casos. ¡°De 150 residentes, 116 se contagiaron, adem¨¢s de 37 trabajadores de una plantilla que cada d¨ªa volv¨ªa a casa a convivir con sus familias", denuncia Qui¨¢n. ¡°Contra ellos no tenemos nada", matiza. "Los empleados fueron ¨¢ngeles para nosotros. Se portaron muy dignamente, pero estaban desbordados¡±.

"De los que murieron, 22 lo hicieron en la propia residencia. El virus se propag¨® por la segunda planta, la de los m¨¢s impedidos¡±, que fue aislada cuando se conoci¨® el primer caso, ¡°pero acab¨® llegando a las otras dos¡±. ¡°Durante una semana¡±, en el momento de mayor desesperaci¨®n de las familias, Qui¨¢n dice que no logr¨® hablar con su t¨ªa. ¡°El 3 de abril, la Xunta realiz¨® pruebas a todos, y el d¨ªa 4 mi t¨ªa fue llevada a la p¨²blica¡±, recuerda: ¡°A partir de ah¨ª, todo cambi¨®. Desapareci¨® el oscurantismo. Hablaba por videoconferencia con ella d¨ªa s¨ª, d¨ªa no, y los m¨¦dicos, incluido el jefe, me llamaban a diario para contarme c¨®mo estaba¡±.

En declaraciones a EL PA?S, DomusVi responde que comparte ¡°el dolor¡± de las familias y que ¡°comprende que todos los que han sufrido una p¨¦rdida reclamen una explicaci¨®n¡± y ¡°responsabilidades¡±. ¡°Entendemos y nos parece necesario que sean los tribunales quienes lo determinen¡±, contin¨²a en referencia a la gran demanda colectiva que se anuncia. Ser¨¢ ¡°la oportunidad de demostrar que se adoptaron todas las medidas¡±, defiende el grupo. DomusVi asegura que instaur¨® su ¡°primer protocolo¡± contra la pandemia ¡°el 24 de febrero¡± y pidi¨® sin ¨¦xito a ¡°diversas consejer¨ªas¡± que se prohibieran las visitas. ¡°Demostraremos c¨®mo intentamos multitud de derivaciones a hospitales de toda Espa?a y no se admitieron¡±, concluye el grupo empresarial, que avanza ¡°total colaboraci¨®n¡± con las investigaciones que se abran.