Un proyecto ¡®fotograf¨ªa¡¯ la sensibilidad gen¨¦tica a la m¨²sica de las personas con alzh¨¦imer
Sensoxenona presenta los resultados de su primer a?o de estudio de muestras biol¨®gicas recogidas a pacientes con enfermedades neurodegenerativas en conciertos sorpresa
Hace ahora justo un a?o, el 30 de septiembre y el 1 de octubre de 2022, un ins¨®lito mosaico de personas se congregaba en la platea del Auditorio de Galicia, en Santiago de Compostela, para asistir a conciertos sorpresa de la Real Filharmon¨ªa. Bajo la batuta de Baldur Br?nnimann, su director, los m¨²sicos interpretaban durante una hora siete partituras de Charles Ives, Otto Nicolai, Dvo?¨¢k, Piazzolla, Brahm...
Hace ahora justo un a?o, el 30 de septiembre y el 1 de octubre de 2022, un ins¨®lito mosaico de personas se congregaba en la platea del Auditorio de Galicia, en Santiago de Compostela, para asistir a conciertos sorpresa de la Real Filharmon¨ªa. Bajo la batuta de Baldur Br?nnimann, su director, los m¨²sicos interpretaban durante una hora siete partituras de Charles Ives, Otto Nicolai, Dvo?¨¢k, Piazzolla, Brahms, Rossini y Arturo M¨¢rquez. Antes e inmediatamente despu¨¦s del recital, un ej¨¦rcito de 200 voluntarios de la sanidad p¨²blica tomaban muestras de saliva y sangre de los asistentes, desde ancianos a ni?os, desde sanos a enfermos: en especial pacientes de alzh¨¦imer, personas con s¨ªndrome de Down, TDAH, autismo, c¨¢ncer o da?o cerebral. Las m¨²sicas hab¨ªan sido seleccionadas por la enorme paleta de sentimientos que entre todas pod¨ªan transmitir.
Se trataba de comprobar si las t¨¦cnicas m¨¢s novedosas de la neurociencia eran capaces de fotografiar la huella molecular de esas sensaciones y detectar cambios en la expresi¨®n de los genes, tambi¨¦n de saber si estas reacciones eran diferentes en las personas seg¨²n existieran, o no, patolog¨ªas. A las pocas semanas de an¨¢lisis, centrados en pacientes con alzh¨¦imer, ya hab¨ªa resultados ¡°sorprendentes¡±. Ahora, la palabra que le gusta usar al neurocient¨ªfico Antonio Salas, uno de los impulsores del Proyecto Sensoxenoma, es la de ¡°fascinante¡±. Los genes que toca la m¨²sica no solo se expresan de una manera mucho m¨¢s exagerada en las personas con dolencias neurodegenerativas, sino que lo hacen en el ¡°sentido contrario¡± a su habitual devenir, como si la melod¨ªa causase un ¡°efecto compensatorio¡± de los mecanismos propios de la enfermedad.
Despu¨¦s de varios art¨ªculos publicados, el ¨²ltimo estos d¨ªas en la revista BioRxiv, la convocatoria de la Filharmon¨ªa de Galicia (RFG) y el IDIS (Instituto de Investigaci¨®n Sanitaria), con base en el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), se va a repetir los d¨ªas 29 y 30 de septiembre, y van a colaborar varias asociaciones de apoyo a personas enfermas y un par de institutos de Secundaria. Esta vez, seg¨²n avanz¨® la directora t¨¦cnica de la orquesta, Sabela Garc¨ªa Fonte, se van a agrupar las partituras que se van a interpretar ¡ªcomo en 2022 dentro de un repertorio mantenido en secreto¡ª en dos bloques diferenciados, seg¨²n las emociones que son capaces de transmitir. A los conciertos del a?o pasado acudieron m¨¢s de 2.000 personas, y los resultados prueban que las melod¨ªas no solo impactan en los genes relacionados con las emociones, sino que pulsan teclas del ADN que se asocian a funciones ¡°cognitivas y de la memoria¡±, tal y como explicaron el martes pasado las almas del proyecto: Antonio Salas, investigador principal de Sensogenoma y catedr¨¢tico de Medicina en Santiago, y Federico Martin¨®n, jefe de servicio de Pediatr¨ªa en el Complejo Hospitalario Universitario de la capital gallega.
Las primeras evidencias del proyecto que se desarrolla en el IDIS con apoyo de la Universidad de Santiago (USC) abren puertas para entender el efecto beneficioso de la m¨²sica en personas con deterioro cognitivo y caminar hacia el futuro desarrollo de dianas moleculares espec¨ªficas. No obstante, los investigadores admiten que ¡°es a¨²n demasiado pronto¡± para saber ¡°la persistencia del efecto¡± de la m¨²sica, el ¡°impacto a largo plazo¡± o si ¡°estimula o inhibe¡±. El estudio analiz¨® el universo de mol¨¦culas que se expresan a partir del ADN de una persona como respuesta a un est¨ªmulo musical, lo que se conoce como el transcriptoma. El ADN se mantiene m¨¢s o menos estable a lo largo de toda la vida, pero el transcriptoma es din¨¢mico y refleja la respuesta de una persona a los cambios que se producen en el entorno o derivados de la edad, los est¨ªmulos sensoriales, la nutrici¨®n o las enfermedades. Uno de los hallazgos m¨¢s llamativos del equipo es el de que ¡°las personas con demencia tienen una mayor sensibilidad a la m¨²sica, si por esto se entiende la cantidad de genes que modifican su expresi¨®n con el est¨ªmulo musical y en comparaci¨®n con personas sanas¡±, explica Salas. En la segunda fase del proyecto, el laboratorio compostelano est¨¢ analizando las muestras de los donantes diagnosticados con trastornos del espectro autista que asistieron a los recitales del a?o pasado.
Los resultados se refieren a muestras de personas con ¡°des¨®rdenes cognitivos asociados a la edad¡± (age-related cognitive disorders). Entre los pacientes analizados ¡°los hay con un deterioro m¨¢s leve (MCI o mild cognitive impairment) y alzh¨¦imer¡±, detalla Antonio Salas a EL PA?S, ¡°por lo tanto, no todos tienen demencia, si t¨¦cnicamente entendemos que MCI no lo es, si no, digamos, un paso previo¡±. ¡°Cuando digo que presentan mayor sensibilidad a la m¨²sica me refiero al hecho de que son muchos m¨¢s los genes que se estimulan en estos pacientes que en los controles sanos [con los que los comparamos]¡±, desgrana el catedr¨¢tico, ¡°del orden de 2,3 veces m¨¢s... concretamente 2.605 genes frente a 1.148¡å en los donantes sin estas patolog¨ªas diagnosticadas.
La investigaci¨®n avanza de la mano de los grupos multidisciplinares GenPoB (Grupo de Gen¨¦tica de Poblaciones en Biomedicina) y GenViP (Grupo de Investigaci¨®n en Gen¨¦tica, Vacunas y Enfermedades Infecciosas) de la USC y del IDIS, de momento sin los patrocinios econ¨®micos que querr¨ªan conseguir para avanzar m¨¢s r¨¢pido. Pese a esto, seg¨²n Salas Ellacuriaga los descubrimientos de este primer a?o superan de largo las expectativas iniciales: ¡°La verdad es que no pens¨¦ que fueran a salir tantas cosas¡±, admite el cient¨ªfico, ¡°ni en el mejor de nuestros sue?os imagin¨¢bamos obtener resultados tan sorprendentes, tanto por el reto t¨¦cnico como por el valor y la trascendencia de los hallazgos¡±.
¡°Nos emociona el trabajo realizado¡±, confiesa Martin¨®n Torres, ¡°tenemos miles de hip¨®tesis y miles de muestras, nos sobran ideas pero nos faltan recursos¡±. ¡°Hasta ahora hemos tenido muy buenas palabras de empresas, b¨¢sicamente¡±, reconoce el jefe de Pediatr¨ªa, que sin embargo agradece el apoyo recibido por una firma distribuidora del sector alimentario y una fundaci¨®n ben¨¦fica de A Coru?a. ¡°Es mucho m¨¢s dif¨ªcil conseguir fondos para esto que para otros de nuestros proyectos¡±, reconoce el m¨¦dico, ¡°porque no es f¨¢cil apostar por algo tan novedoso, que puede tener mucho ¨¦xito o no ir a ninguna parte¡±.
Pero los gr¨¢ficos publicados hasta ahora en los que se ve claramente c¨®mo grupos de genes se encienden ¡°como leds¡± con la m¨²sica parecen augurar lo primero. ¡°La m¨²sica modifica la expresi¨®n de m¨¢s del doble de genes que en las personas sin patolog¨ªa diagnosticada, y muchos de estos est¨¢n relacionados con procesos neurodegenerativos¡±, explica Salas. Estos genes diferencialmente expresados tienden a la sobre-expresi¨®n (se expresan m¨¢s de lo corriente), mientras que los de las personas sin deterioro tienden a expresarse por debajo de lo normal, especifica el catedr¨¢tico. ¡°Y lo m¨¢s sorprendente es que el est¨ªmulo musical propicia que la inmensa mayor¨ªa de los genes se expresen en direcci¨®n contraria a como lo hacen normalmente en los enfermos con deterioro cognitivo¡±, contin¨²a describiendo el investigador, es por tanto ¡°intuitivo pensar que este efecto de la m¨²sica implica una compensaci¨®n en los genes alterados en el alzh¨¦imer, como si se tratase de un efecto terap¨¦utico¡±.
El equipo detect¨® cientos de genes con su expresi¨®n alterada, como por ejemplo el identificado como el GATA2 (vinculado por estudios recientes con enfermedades neurodegenerativas) o el GIGYF1 (este otro relacionado, adem¨¢s de con estas dolencias, con trastornos del espectro autista). ¡°Queda mucho hasta conocer el papel espec¨ªfico que juega cada uno de ellos en la respuesta al est¨ªmulo musical¡±, avisa Salas. Pero lo visto hasta ahora ayuda a entender las rutas biol¨®gicas donde todos estos genes est¨¢n involucrados, ¡°la labor orquestada que ejercen como respuesta al est¨ªmulo musical¡±. Las rutas gen¨¦ticas que m¨¢s se modifican con la m¨²sica en las personas enfermas est¨¢n estrechamente relacionadas con el deterioro cognitivo, y con mecanismos naturales la autofagia celular (proceso de eliminaci¨®n de las c¨¦lulas da?adas y de limpieza, esencial para la proliferaci¨®n de c¨¦lulas nuevas y saludables) o la acumulaci¨®n de cuerpos beta-amiloides (un proceso que precede al desarrollo de alzh¨¦imer).
Martin¨®n indica que ¡°es en las enfermedades neurodegenerativas, en la par¨¢lisis cerebral o en el trastorno del espectro autista, donde tenemos cada vez m¨¢s evidencias que apuntan a los beneficios de la m¨²sica en la enfermedad¡±. En los conciertos de Sensoxenoma23 se tomar¨¢n muestras de donantes sordos, ciegos y con autismo.
Puedes seguir a MATERIA en Facebook, Twitter e Instagram, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.