Dorian Wood, una voz ap¨¢trida y no binaria al servicio de Chavela Vargas
Su espect¨¢culo ¡®Xavela Lux Aeterna¡¯ recuerda este martes el cancionero de la legendaria cantante mexicana en los Teatros del Canal
Una peque?a tienda cercana al metro La Latina sirve de refugio para Dorian Wood (Los ?ngeles, 1975) cada vez que pasa por Madrid. Se llama Molar Discos & Libros y est¨¢ repleta de vinilos y de textos en su mayor¨ªa dedicados a la m¨²sica. Entre sus estantes, se siente como en casa. Aunque el t¨¦rmino ¡°hogar¡± cobra un sentido propio para alguien que se ha criado entre dos mundos, los Estados Unidos de su nacimiento y la Costa Rica de sus padres, y que recorre los escenarios del mun...
Una peque?a tienda cercana al metro La Latina sirve de refugio para Dorian Wood (Los ?ngeles, 1975) cada vez que pasa por Madrid. Se llama Molar Discos & Libros y est¨¢ repleta de vinilos y de textos en su mayor¨ªa dedicados a la m¨²sica. Entre sus estantes, se siente como en casa. Aunque el t¨¦rmino ¡°hogar¡± cobra un sentido propio para alguien que se ha criado entre dos mundos, los Estados Unidos de su nacimiento y la Costa Rica de sus padres, y que recorre los escenarios del mundo reventando etiquetas con sus melod¨ªas y su rotundo f¨ªsico. ¡°Eso de sentirse de ning¨²n sitio es un lujo y una maldici¨®n¡±, advierte. Conoce a los due?os de este lugar a trav¨¦s del artista y mediador cultural Christian Fern¨¢ndez Mir¨®n, que es quien hace de anfitri¨®n para esta inusual estrella cada vez que llega a la ciudad. ¡°No son los objetos que hay en la tienda los que me hacen sentir apego hacia este lugar, sino las conversaciones y los encuentros que retomo en ella¡±, confiesa poco antes de actuar este martes en los Teatro del Canal, dentro del Festival Internacional de Arte Sacro de la Comunidad de Madrid (FIAS).
Su presencia extra?amente angelical encaja con la divina premisa de este ciclo. Y eso que ni su g¨¦nero, ni su fisionom¨ªa, ni el color de su piel coincide con la imagen que el arte y la cultura han creado de los ¨¢ngeles. El de hoy ser¨¢ el segundo de una serie de conciertos especiales que le traen de nuevo a la capital con el proyecto Xavela Lux Aeterna, que tambi¨¦n sonar¨¢ este s¨¢bado 7 de marzo en el Real Coliseo de San Lorenzo del Escorial. Con este espect¨¢culo pone su rotunda voz ap¨¢trida y no binaria, con la que representa a la comunidad LGTBI+, a los migrantes y a la belleza disruptiva, al servicio de los himnos de Chavela Vargas (1919-2012). ¡°Ella gritaba amor a trav¨¦s de su m¨²sica, por m¨¢s dolorosa que fuera. Sus canciones son la historia de mi vida¡±, cuenta de quien ha sido un referente para esas mismas minor¨ªas.
El a?o pasado, cuando el FIAS propuso al artista estadounidense que creara este espect¨¢culo con motivo del centenario de nacimiento de Vargas, a Wood se le present¨® la oportunidad de ¡°buscar los porqu¨¦s¡± de la legendaria cantante. Asegura que en estos meses que lleva girando con el espect¨¢culo por varios pa¨ªses, ha encontrado m¨¢s porqu¨¦s relacionados con la vida que con la mexicana. ¡°Quiz¨¢ es lo que Chavela estaba intentando encontrar. He aprendido que, en estos tiempos en los que se pueden poner las cosas todav¨ªa m¨¢s oscuras, a¨²n hay tiempo para tomar una pausa y celebrar aunque sean amor¨ªos fallidos, angustias y frustraciones como las de sus canciones¡±, reflexiona.
En este conocido repertorio reinventado por Dorian Wood no puede faltar el canto casi ancestral de La llorona: ¡°Representa por completo esa exaltaci¨®n del dolor y, aunque hemos perdido la cuenta de las veces que se ha representado, siempre hay una lectura nueva porque puede ser lo quiera para quien est¨¦ escuchando al otro lado del escenario¡±. En su caso, queda una lectura optimista a ese desgarro. Siente que los extremismos y turbulencias actuales son ¡°una reacci¨®n a lo que las minor¨ªas han logrado avanzar en los ¨²ltimos tiempos¡±, defiende. ¡°Esta ola opresora va a seguir reaccionando de la ¨²nica forma que sabe, que es robando derechos e imponiendo una moral falsa que solo protege a la verdadera minor¨ªa, la de la poblaci¨®n blanca y normativa ha conquistado sus privilegios con violencia¡±.
El cambio de perspectiva que propone Wood pasa por normalizar un cuerpo como el suyo a trav¨¦s de sus redes sociales. A pesar de la continua censura, insiste en compartir en ellas im¨¢genes de su desnudez, peleando con algoritmos que a menudo encuentran su imagen f¨ªsica como algo no adecuado. ¡°Mi cuerpo ha existido desde hace mas de 40 a?os y seguir¨ªa haci¨¦ndolo durante un buen tiempo. Somos millones de personas los que hemos vivido en las tinieblas durante much¨ªsimo tiempo, bajo capas de ropa para esconder nuestro cuerpo por ser gordo. Es mi deber demostrar que no tengo miedo¡±, defiende.