Escribir en japon¨¦s para no pensar

Mensaje n¨²mero 23.994.876 al whatsapp ¡ªperd¨®n si la cifra no es la exacta. Ya he perdido la cuenta. Que tire la primera piedra quien lleve un conteo riguroso. Aunque siendo sinceros, esta curva tambi¨¦n la estamos aplanando, no pod¨ªamos seguir el ritmo de la primera semana de cuarentena¡ª. Un tuit llega al grupo familiar: ¡°Aviso para los entusiastas de la caligraf¨ªa japonesa #Shodo. En breve os ofreceremos c¨¢psulas de v¨ªdeo formativas a cargo de nuestra p...

Mensaje n¨²mero 23.994.876 al whatsapp ¡ªperd¨®n si la cifra no es la exacta. Ya he perdido la cuenta. Que tire la primera piedra quien lleve un conteo riguroso. Aunque siendo sinceros, esta curva tambi¨¦n la estamos aplanando, no pod¨ªamos seguir el ritmo de la primera semana de cuarentena¡ª. Un tuit llega al grupo familiar: ¡°Aviso para los entusiastas de la caligraf¨ªa japonesa #Shodo. En breve os ofreceremos c¨¢psulas de v¨ªdeo formativas a cargo de nuestra profesora Madoka Kubota, y os propondremos retos para que nos envi¨¦is vuestros propios #kanjis. Estad atentos! #Qu¨¦dateEnCasa¡±. ?Novedad!: no es ning¨²n v¨ªdeo de una procesi¨®n que va del sal¨®n a la cocina con parada para saeta en el cuarto de ba?o. Ni vecinos de un patio interior cantando Resistir¨¦, algunos con actitud de Cyndi Lauper, Michael Jackson?, Tina Turner o Stevie Wonder en We Are the World y otros un poco m¨¢s como Bob Dylan.

?A qui¨¦n se le ocurre aprender caligraf¨ªa japonesa ahora? Quiz¨¢ a alguien le d¨¦ tiempo entre videollamada y videollamada, rutinas de cardio, trabajo, cocinar para instagramear, desinfectar pomos, aplausos de las ocho y empezar a ver Perdidos (haberlos haylos). Puede que a los alumnos de Madoka Kubota, que han visto sus clases interrumpidas por el estado de alarma, pero tambi¨¦n a m¨¢s interesados por la cultura japonesa. El primer v¨ªdeo se public¨® el lunes en las redes sociales de Casa Asia (Twitter, Facebook e Instagram). Son 49 segundos en las que solo se ven unas manos que con un pincel y en tinta negra escriben los dos kanjis que forman la palabra ¡°libertad¡±.

Voy a intentarlo. No parece tan dif¨ªcil. ?Ja! Lo que a simple vista es un rect¨¢ngulo partido en tres partes iguales con un trazo que le sale arriba, como si fuese un tup¨¦ (perd¨®n por el sacrilegio), se convierte en un kanji (letra con significado propio, estos ideogramas tienen origen chino) de seis trazos, cada movimiento del pincel ha de empezar y terminar en un sitio exacto y mantener el grosor correcto.

Pero no solo hay que mantener las formas sobre el papel. Todo es una actitud. ¡°Shodo [en japon¨¦s caligraf¨ªa] es el arte de la escritura, el camino de la escritura. Es el arte del trazo. La intensidad y la forma de cada uno tiene su sentido y encanto. Lo m¨¢s importante es la concentraci¨®n. Se escribe en silencio y solo pensamos en realizar los trazos, sintiendo el olor de la tinta. As¨ª, autom¨¢ticamente desconectamos de la vida cotidiana¡±, explica Kubota imprimiendo en sus palabras la misma tranquilidad que requiere el rito que cuenta. ¡°Espalda recta, cuerpo a un pu?o de escritorio, papel recto enfrente. Se mira modelo, se dibuja trazo, se mira modelo, se dibuja trazo, se mira modelo, se dibuja trazo...¡±, repite como un mantra. Habla sin art¨ªculos porque en japon¨¦s no existen, confiesa que cuando escribe espa?ol con calma s¨ª los pone, pero en una charla telef¨®nica se le pasan. Evidentemente no hay ning¨²n problema en la comprensi¨®n y as¨ª le da un car¨¢cter m¨¢s cercano a la letan¨ªa: cada movimiento del pincel hay que observar y concentrarse en lo que se est¨¢ haciendo. Buena receta para huir del mundanal ruido o, en los tiempos que corren, del mundanal y extra?o silencio que se ha instalado en las calles. Ese es el motivo por el cual Francisco Jurado Molina, un profesor de artes pl¨¢sticas de un instituto de ?beda (Ja¨¦n), se ha animado a participar en el reto que propone Casa Asia con estos v¨ªdeos que han creado bajo el marco de la campa?a #Qu¨¦dateEnCasa. Solo se ha publicado el primero, colgaran, al menos, cuatro m¨¢s, uno cada lunes. Los que se animen a reproducir las palabras pueden compartirlas en sus redes para que Madoka Kubota elija la mejor. ¡°El dejar fluir el pincel, la gestualidad¡­ me sirven para despejarme, para abstraerte de la realidad¡±, cuenta Jurado que ya ha colgado el resultado en Facebook e Instagram y que sigue el trabajo de la profesora. Esta propuesta le da una oportunidad que no tendr¨ªa porque ella normalmente da clases en Madrid.

No lo logro: ni la postura ¡ªy no es diferente a la que hay que tener si se siguen a rajatabla las recomendaciones para teletrabajar¡ª. Ni el abstraerme ¡ªaunque una pase la cuarentena sola, hay demasiados factores de distracci¨®n¡ª. Ni esos trazos tan seguros que aparecen en el v¨ªdeo y de los que adem¨¢s se puede consultar un modelo con el orden y la direcci¨®n de cada uno (uno de los principios del shodo es no repasar la l¨ªnea, no repetirla, no volver para atr¨¢s. Si sale mal hay que comenzar de nuevo). Y ya advierte la profesora que si bien el material ideal ser¨ªa un pincel grueso de pelo de animal, papel de arroz y tinta hecha con holl¨ªn de pino y plantas mezclada con cola y que se puede comprar online. No es indispensable para este acercamiento a la caligraf¨ªa japonesa, sin ninguna noci¨®n y con unos rotuladores o t¨¦mperas se puede conseguir. Alguien podr¨¢, hay gente pa¡¯to.

Pero me falla algo, o muchos algos: no es lo mismo un rotulador carioca-de-toda-la-vida, que el pincel que utiliza ella y tambi¨¦n es importante la diferencia con un pincel despeluchado de esos que se han usado en el colegio y que no se sabe muy bien por qu¨¦ vive confinado en un caj¨®n hasta que encuentran su momento, alg¨²n lustro despu¨¦s de su ¨²ltimo uso: ?escribir ¡°libertad¡± en japon¨¦s! El pincel esperaba que la libertad le liberara, dir¨ªa el haiku.

Libertad es la primera palabra de este reto, el resto son: ¡°tranquilidad¡±, ¡°cielo azul¡±, ¡°salud¡± y ¡°solidaridad¡±. Todas de dos kanjis, los que forman el t¨¦rmino de esta semana son ¡°Ji¡±, que significa ¡°uno mismo¡±, y ¡°Yuu¡±, que quiere decir ¡°depender de algo¡±. Ojal¨¢ la libertad que ahora queremos dependiera de nosotros mismos.