El Ayuntamiento de Alcal¨¢ de Henares denuncia que una residencia p¨²blica impidi¨® la entrada a su inspectora durante hora y media
La Polic¨ªa Local medi¨® en el incidente, que se produjo en un hogar de mayores del que cientos de familias se quejan porque el agua no es potable y la comida, de mala calidad
Una residencia p¨²blica de la Comunidad de Madrid, criticada por cientos de familias por su ¡°mala comida¡± y el agua no potable, neg¨® este martes la entrada a la inspectora sanitaria municipal de Alcal¨¢ de Henares durante hora y media, seg¨²n denuncia el alcalde, Javier Rodr¨ªguez Palacios (PSOE). Palacios considera que esta obstrucci¨®n ¡°bordea la legalidad¡±. La residencia Franci...
Una residencia p¨²blica de la Comunidad de Madrid, criticada por cientos de familias por su ¡°mala comida¡± y el agua no potable, neg¨® este martes la entrada a la inspectora sanitaria municipal de Alcal¨¢ de Henares durante hora y media, seg¨²n denuncia el alcalde, Javier Rodr¨ªguez Palacios (PSOE). Palacios considera que esta obstrucci¨®n ¡°bordea la legalidad¡±. La residencia Francisco de Vitoria, con 526 plazas, vive un creciente conflicto con las familias, que se han organizado para denunciar las carencias del centro y que han buscado ayuda en el Ayuntamiento. Seg¨²n un portavoz auton¨®mico, el director de la residencia llam¨® a la Direcci¨®n General de Salud P¨²blica, ¨®rgano de la Comunidad, para saber si deb¨ªan abrir sus puertas a la inspectora porque no se produc¨ªa una visita de ese car¨¢cter desde 2018, pero el Ayuntamiento desmiente esta versi¨®n y asegura que, tras esa supuesta consulta, negaron el acceso y solo cedieron el paso cuando acudi¨® una patrulla de la Polic¨ªa Local.
La inspectora se present¨® en el centro a las 11.30, acompa?ada de cuatro t¨¦cnicos cargados con neveras para preservar las muestras. El tira y afloja se alarg¨® hasta las 13.00. Por parte de la Comunidad, lleg¨® desde Madrid un alto cargo, el coordinador m¨¦dico asistencial de las 25 residencias auton¨®micas, Primitivo Ramos. Durante varios minutos, se produjo una reuni¨®n en un despacho, tambi¨¦n con los polic¨ªas presentes, y finalmente la direcci¨®n del centro dej¨® trabajar a la inspectora y a sus t¨¦cnicos, seg¨²n la versi¨®n municipal.
El Ayuntamiento dice que este tipo de visitas se hacen a todos los establecimientos que sirven comida y que eran rutinarias hasta que lleg¨® la pandemia de coronavirus, cuando se frenaron. Recientemente, visitaron la otra residencia de la Comunidad en el municipio, Cardenal Cisneros, y no tuvieron ning¨²n problema. El alcalde relaciona la obstrucci¨®n con las carencias que sufre la residencia Francisco de Vitoria: ¡°El retrasar durante hora y media la entrada de los inspectores para tomar muestras podr¨ªa parecer un intento de ocultar una realidad cuanto menos comprometida por parte de los responsables del Gobierno regional¡±.
Un portavoz de la Consejer¨ªa de Pol¨ªticas Sociales asegura que, una vez recibida la confirmaci¨®n, los inspectores realizaron su labor con normalidad. ¡°En ning¨²n momento se ha impedido la entrada a la residencia y la toma de muestras, de las que los inspectores municipales no han dejado ning¨²n tipo de documentaci¨®n ni acta¡±.
Las quejas en Francisco de Vitoria han crecido desde septiembre, cuando entr¨® en vigor un nuevo contrato de suministro de alimentaci¨®n por el cual una empresa lleva la comida a diario. La empresa, Plataforma Femar, gan¨® los concursos para suministrar comida a nueve residencias p¨²blicas de la Comunidad, adem¨¢s de 21 centros de menores y otros centros sociales. Femar present¨® ofertas por debajo del presupuesto que planteaba la Comunidad, que en la licitaci¨®n daba hasta 70 puntos de 100 al criterio del precio propuesto por las empresas. En el caso del lote que incluye la comida de la residencia Francisco de Vitoria y otras cuatro m¨¢s, el Gobierno de Ayuso presupuest¨® un coste de 3,8 millones de euros en 12 meses (5,96 euros en comida al d¨ªa por cada residente) y Femar lo rebaj¨® hasta 2,9 millones de euros, precio al que finalmente le fue adjudicado el contrato.
En cuanto al agua no potable, es un problema que arrastra desde hace a?os el viejo edificio, que abri¨® sus puertas en 1973. El pleno del Ayuntamiento aprob¨® a principios de febrero una moci¨®n para que la Comunidad rompiera el contrato con Femar, con los votos del PP en contra. La Consejer¨ªa defiende que tras varias sanciones, Femar est¨¢ prestando un buen servicio.
Hace dos semanas, compareci¨® en la Asamblea regional el gerente de la Agencia Madrile?a de Atenci¨®n Social, Jos¨¦ Manuel Miranda, que rest¨® peso a las quejas de las familias de una forma que estos han considerado ofensiva. ¡°Es completamente falso que alguien haya perdido 14 kilos¡±, dijo Miranda. ¡°Hay una p¨¦rdida de un residente de 10 kilos, que tiene p¨¢rkinson desgraciadamente; entr¨® con sobrepeso, con un ¨ªndice corporal alto y ahora mismo est¨¢ en su peso ideal¡±.
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