Por cada 14 nuevas habitaciones de Airbnb en Madrid abre un restaurante

Cualquiera que conozca bien el centro de Madrid puede apreciar el cambio que ha experimentado a causa del turismo: donde antes hab¨ªa una carnicer¨ªa, una pescader¨ªa o una ferreter¨ªa operan en su lugar un bar, otro bar y otro bar. Ahora, un estudio de la Universidad Complutense ha puesto cifras al fen¨®meno y ha establecido una clara relaci¨®n entre el ¡®boom de la gastronom¨ªa y el turismo: se inaugura un negocio de restauraci¨®n por cada 14 nuevas habitaciones de la plataforma de viviendas tur¨ªsticas Airbnb en una misma secci¨®n censa...

Cualquiera que conozca bien el centro de Madrid puede apreciar el cambio que ha experimentado a causa del turismo: donde antes hab¨ªa una carnicer¨ªa, una pescader¨ªa o una ferreter¨ªa operan en su lugar un bar, otro bar y otro bar. Ahora, un estudio de la Universidad Complutense ha puesto cifras al fen¨®meno y ha establecido una clara relaci¨®n entre el ¡®boom de la gastronom¨ªa y el turismo: se inaugura un negocio de restauraci¨®n por cada 14 nuevas habitaciones de la plataforma de viviendas tur¨ªsticas Airbnb en una misma secci¨®n censal (una unidad territorial donde viven entre 1.000 y 2.500 personas).

Airbnb ofrece 25.543 alojamientos en Madrid, seg¨²n la web de investigaci¨®n InsideAirbnb. El impacto de esta plataforma en la subida de los precios de la vivienda ha sido estudiado, pero se ha puesto menos el foco en c¨®mo est¨¢ transformando el comercio de lo barrios, dice Alberto Hidalgo, investigador principal de este estudio conjunto con la Escuela de Altos Estudios Avanzados IMT Lucca (Italia) que ha sido publicado en Journal of Regional Science.

Los autores se centraron en el per¨ªodo entre 2014 y 2019, unos a?os en que Madrid experiment¨® un incremento espectacular del 60% en los flujos del turismo. En esa etapa, los alojamientos Airbnb estudiados pasaron de 2.153 a 12.763 (los investigadores excluyeron las ofertas que no ten¨ªan cr¨ªticas recientes y aquellas donde los turistas conviven con el hu¨¦sped) y los establecimientos de restauraci¨®n (bares, restaurantes, establecimientos de comida r¨¢pida o cafeter¨ªas) crecieron de 15.660 a 17.212.

Los investigadores se han preguntado si el crecimiento de la restauraci¨®n pod¨ªa deberse a un incremento del poder adquisitivo de los madrile?os o a cambios en los h¨¢bitos de consumo que hayan hecho m¨¢s com¨²n visitar el centro, pero introdujeron m¨¦todos estad¨ªsticos de control que les llevaron a descartar esas hip¨®tesis. De hecho, descubrieron que el mayor aumento de bares junto a nuevos alojamientos Airbnb se ha producido en secciones censales fuera del distrito Centro, como los barrios de Embajadores, Goya, Palos de Moguer, Recoletos, Trafalgar o el ¨¢rea cercana al aeropuerto de Barajas.

El estudio tambi¨¦n hall¨® que el mismo incremento de 14 alojamientos de Airbnb en un barrio supone 11 nuevos trabajos en el sector hostelero, como camareros y cocineros. Este impacto econ¨®mico de Airbnb en las empresas de restauraci¨®n y el empleo tambi¨¦n se ha observado en otros dos estudios en Estados Unidos, uno en el Estado de Texas y otro en la ciudad de Nueva York.

Los autores asumen que los hoteles tambi¨¦n contribuyen al ¡®boom¡¯ hostelero, pero decidieron centrarse en el efecto de Airbnb porque estos alojamientos se distribuyen de manera m¨¢s generalizada por el mapa de Madrid a diferencia de los hoteles.

Madrile?os desplazados

El resultado de este estudio aislado muestra beneficios para la ciudad, pero Hidalgo quiere recalcar que esta investigaci¨®n es hermana de otra publicada el a?o pasado en la que comprobaron c¨®mo est¨¢ desapareciendo el comercio enfocado en las necesidades vecinales en las zonas donde crece Airbnb, desplazados precisamente por estos bares y restaurantes.

¡°El efecto econ¨®mico en cuanto a creaci¨®n de empleo es positivo¡±, dice Hidalgo, ¡°sin embargo, estamos avanzando hacia una ciudad mucho m¨¢s hiperespecializada en el sector de la restauraci¨®n y eso va a acabar desplazando a la poblaci¨®n local, bien sea porque se encuentra fuera de lugar o bien sea por el aumento del precio de los alquileres. Al final, esto acaba en una decisi¨®n pol¨ªtica sobre el tipo de ciudad que queremos, ?queremos m¨¢s restaurantes o m¨¢s carnicer¨ªas?¡±.

El alcalde de Madrid, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, anunci¨® en octubre que en 2024 introducir¨ªa una nueva regulaci¨®n de los alquileres tur¨ªsticos, pero siguen sin conocerse detalles sobre esa reforma. El regidor conservador dice estar haciendo un esfuerzo de inspecci¨®n y sanci¨®n a las viviendas tur¨ªsticas ilegales, pero defiende que el turismo se ha convertido en ¡°santo y se?a de la ciudad¡±. La oposici¨®n critica que Almeida antepone los intereses de los negocios a los de los vecinos. Este malestar se palpa en la ciudad, donde algunos residentes est¨¢n haciendo las maletas, cansados de las molestias que causan los turistas.

Los autores creen que los pol¨ªticos pueden basarse en esta investigaci¨®n para regular el mercado, de forma que los alojamientos Airbnb se distribuyan por las ciudades de forma m¨¢s equilibrada. Proponen fomentar este tipo de oferta tur¨ªstica en ¨¢reas distintas al centro, donde podr¨ªan notarse sus efectos m¨¢s positivos: ¡°La redistribuci¨®n de los flujos tur¨ªsticos a lo largo de la ciudad es clave para la supervivencia del sector¡±, concluyen, ¡°ya que sus efectos nocivos sobre los residentes en las zonas c¨¦ntricas pueden alimentar reacciones contra los turistas, lo que podr¨ªa poner en peligro a todo el sector¡±.

Escribe al autor a fpeinado@elpais.es o fernandopeinado@protonmail.com

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