¡®Estirando el chicle¡¯: ¡°Que alguien piense por qu¨¦ no hay apenas c¨®micas en Espa?a de m¨¢s de 40 a?os¡±

Carolina Iglesias y Victoria Mart¨ªn parecen algo exhaustas cuando aparecen por la puerta principal del Teatro Campos El¨ªseos de Bilbao. Arrastrando sus dos maletas hasta llegar a los camerinos, van saludando a todo el que se van encontrando. ¡°No sab¨ªamos que eras t¨² el periodista¡±, bromean. Juntas llegan a Bilbao dentro de una gira de grabaciones en directo de su podcast Estirando el chicle, que logra semana tras semana ...

Carolina Iglesias y Victoria Mart¨ªn parecen algo exhaustas cuando aparecen por la puerta principal del Teatro Campos El¨ªseos de Bilbao. Arrastrando sus dos maletas hasta llegar a los camerinos, van saludando a todo el que se van encontrando. ¡°No sab¨ªamos que eras t¨² el periodista¡±, bromean. Juntas llegan a Bilbao dentro de una gira de grabaciones en directo de su podcast Estirando el chicle, que logra semana tras semana agotar las entradas y un ¨¦xito superlativo en cada ciudad que pisan. El reloj no perdona y apenas resta media hora para probar sonido y verificar que todo se encuentra en perfecto orden de revista, aunque eso no es impedimento para que Iglesias y Mart¨ªn den rienda suelta a su verborrea antes de saltar al escenario a despotricar contra alguna cosa que no sea de su agrado. Quiz¨¢s sea precisamente esa la clave para que se llevaran el Premio Ondas al mejor Podcast o Programa de Emisi¨®n Digital.

Pregunta: 24 d¨ªas desde que se llevaron el Premio Ondas. ?Qui¨¦n lo tiene y d¨®nde?

Respuesta. (CI): Lo tengo yo.

VM: Pero vamos a pedir una r¨¦plica que cuesta un dineral para que Nacho (productor del programa) y yo podamos tener el nuestro y Susi (directora de comunicaci¨®n) tambi¨¦n tenga el suyo. Y cuando me separe de Nacho, pues lo dividiremos como Salom¨®n al beb¨¦.

CI: Yo lo vender¨¦ cuando seamos un juguete roto [risas].

P.: Se les vio muy emocionadas al recoger el premio. ?Han tocado el cielo?

R. VM: No lo creemos, la verdad. Pensamos que a¨²n queda mucho recorrido. Nos gustar¨ªa que las mujeres c¨®micas no acabasen a los 35, ese es el reto verdadero para m¨ª, no ser joven y de repente tener un producto de ¨¦xito, sino que eso se mantenga. Que alguien piense por qu¨¦ no hay apenas c¨®micas en Espa?a de m¨¢s de 40 a?os. Y ya con 45 haces de abuela.

P.: El ¨¦xito en las audiencias se traduce en entradas agotadas semana tras semana en los teatros de toda Espa?a. ?Hay alguna f¨®rmula para lograrlo?

R. CI: No s¨¦ decirte exactamente el motivo del ¨¦xito. Creo que somos muy sinceras con lo que hacemos. No imponemos nada, nosotras hacemos lo que nos hace gracia y que, por suerte, el p¨²blico nos ha dado la raz¨®n, porque tambi¨¦n buscan este tipo de comedia y este tipo de discursos. Todo ello nos ha respaldado mucho para darnos cuenta de que lo que nos hace gracia a nosotras, le hace gracia a m¨¢s gente. Y tambi¨¦n influye la sinceridad, Victoria y yo somos amigas y hablamos desde un punto de vista de amistad total, y cuando vienen invitadas para que les entrevistamos, siempre les hablamos desde un punto de admiraci¨®n absoluto. Cada mujer que viene al programa es porque la admiramos por algo, lo que hace que todas se sientan c¨®modas, porque saben que est¨¢n en un sitio seguro, de alguna manera. La parte de la asimilaci¨®n es algo que a¨²n no te podemos decir, no hemos procesado todo lo que ha pasado ni siquiera desde que empezamos el podcast en mayo de 2020. Si haber ganado el Ondas sirve para que se abran puertas para que se piense de una manera m¨¢s plural a la hora de elegir elencos, eso para nosotras es la satisfacci¨®n m¨¢xima, m¨¢s que una cosa personal.

P.: En cada programa sacan algo que les indigna sobremanera. ?Hay de verdad tantas cosas que les sacan de quicio?

R. VM: S¨ª, sin duda. Tengo que tener una libreta de todo lo que odio porque luego me doy cuenta de que hay cosas que tampoco odio tanto y me dicen: ¡°Oye, est¨¢s haciendo esto y dijiste que lo detestabas¡±.

CI: El odio le dura poco, tambi¨¦n te digo.

VM: Sinceramente, es como una descarga absoluta de pensamientos que ten¨ªamos y que tampoco los hab¨ªamos compartido. Y eso creo que tambi¨¦n les pasa a las invitadas.

P.: ?Las invitadas saben de qu¨¦ va el programa?

R. VM: S¨ª, nosotras mandamos una escaleta siempre.

CI: Ahora, que la miren...

VM: Eso ya es otra cosa. Pero s¨ª, ellas saben el tema, a qu¨¦ vienen y saben todo. Y si no lo saben, pues al final se encuentran con el pastel, cosa que es peor porque a veces dicen: ¡°Qu¨¦ est¨¢ pasando aqu¨ª¡±. Normalmente, suele ser s¨²per c¨®modo, porque es lo que ha dicho Carolina, nosotras hacemos las entrevistas desde un prisma de admiraci¨®n, lo que no puede salir mal nunca. El problema es cuando haces las entrevistas desde el desconocimiento y desde sentirte por encima del entrevistado.

CI: Una cosa que estamos percibiendo mucho en entrevistas es la condescendencia que recibimos.

P.: ?Han notado un cambio en la manera en la que les tratan las invitadas en su programa a ra¨ªz de la consecuci¨®n de su ¨¦xito?

R. CI: Ser¨ªa injusto decir que no ha cambiado nuestra actitud desde que nos convertimos en el podcast m¨¢s escuchado. Cambi¨® un poco con la entrevista que nos hizo [Andreu] Buenafuente en junio y cambi¨® con el Ondas. Me refiero a la prensa. Los que no nos conocen, en general, suele ser gente m¨¢s mayor que nosotras. Hay de todo, es verdad. Nos han entrevistado muchas mujeres que son m¨¢s mayores que nosotras, que no nos conoc¨ªan y que despu¨¦s de la entrevista nos dec¨ªan que iban a escuchar todos los programas. Y luego hay gente que nos han tratado como dos chavalas que est¨¢bamos haciendo un trabajo de fin de carrera. Lo que queremos es que no se nos admire, sino que se nos respete.

P.: Ha pasado m¨¢s de un a?o y medio desde que empezaron esta aventura. ?Consideran que en este tiempo se ha avanzado en materia de g¨¦nero en el mundo de la comunicaci¨®n? Dicho de otro modo, ?las nuevas v¨ªas de comunicaci¨®n han permitido que predomine la igualdad?

R. VM: Sin duda, pero m¨¢s que nada porque es absolutamente democr¨¢tico y tambi¨¦n porque es gratis, no implica ning¨²n tipo de inversi¨®n. Entonces, es evidente que si t¨² tienes la capacidad de tener Internet y tienes algo que contar, pues ya ah¨ª no hay ninguna persona o empresario que diga que no puedes contar una determinada cosa. Internet lo que ha hecho es democratizar todo este tipo de contenidos, lo que tiene que ocurrir es que haya una visibilidad real en los contenidos con altos presupuestos. Coment¨¢bamos en el programa que vino Leticia Dolera que las pel¨ªculas de mujeres suelen tener un presupuesto mucho menor. Debemos entender por qu¨¦ ocurre esto.

P.: ?Ello supondr¨ªa el primer paso para lograrlo?

R. CI: Por supuesto, pero es b¨¢sicamente porque ya est¨¢ el p¨²blico ah¨ª. Es que ya no puedes basarte en tu opini¨®n personal que dice: ¡°Esto no lo veo, o no digas lo otro¡±. En nuestro caso, tenemos un p¨²blico enorme, lo que hace que no se pueda decir que lo que hacemos nosotras es una cosa de nicho, porque no es as¨ª.

VM: Yo ya estoy cansad¨ªsima de hablar de por qu¨¦ pasa. Yo no estoy decidiendo esto, ya ocurrir¨¢, y espero que as¨ª sea. Nosotras seguiremos haciendo lo que hacemos, y luego tendr¨¢n que tomar decisiones desde las altas esferas, porque todo este ascenso de popularidad femenino no va a parar. Y tambi¨¦n masculino, sin duda.

CI: Actualmente, no se busca la diversidad en ning¨²n ¨¢mbito. Hay j¨®venes que est¨¢n haciendo unos mon¨®logos buen¨ªsimos. El problema es que no se est¨¢ abriendo el panorama de visi¨®n, lo que debe servir para reflexionar de que hay muchas c¨®micas y c¨®micos que mueven a un p¨²blico que no puedes considerar que sea una cosa de nicho, m¨¢s bien cae por su propio peso. Y nosotras ahora nos damos cuenta de lo f¨¢cil que es contar con una c¨®mica. Ahora tenemos tres y se hace un producto que creemos que est¨¢ bien e incluso sirve para que se descubran caras nuevas. Es tan sencillo como darles una oportunidad. L¨®gicamente, si no se la das, es imposible que pase.

P.: Dec¨ªa ?scar Wilde que ¡°la seriedad es el pecado original del mundo¡±. D¨ªganme, ?es la risa la mejor medicina?

R. VM: Es important¨ªsimo. Porque es lo mejor que hay en el mundo. No es la soluci¨®n para absolutamente nada, pero re¨ªrte es el paliativo de muchos males. No te va a solucionar la vida, pero para la risa es algo principal en mi vida, es algo que forma parte fuera y dentro de mi trabajo.

CI: Re¨ªr y hacer re¨ªr es genial. Ya no solo en tu trabajo, sino tambi¨¦n en tu propio entorno. Rodearte de gente que te hace re¨ªr es s¨²per sano y liberador.

VM: Y no tom¨¢rselo todo tan en serio, de verdad.

P.: ?Consideran que la radio y la comedia funcionan mejor juntas?

R. VM: Lo bueno que tiene el podcast es que es un formato de larga duraci¨®n. Por lo tanto, da lugar a que una conversaci¨®n en la que surjan risas improvisadas, al disponer de todo el tiempo del mundo. Habr¨¢ veces que la conversaci¨®n sea m¨¢s tensa y otras, m¨¢s distendida, pero lo que permite la larga duraci¨®n es que broten esos momentos. La televisi¨®n tendr¨ªa que reflexionar acerca de la rapidez con la que se producen los contenidos. Si es un formato de entrevista, la magia la consigues en un tiempo largo.

P.: ?Y el poder de improvisaci¨®n con el directo?

R: CI: La improvisaci¨®n para nosotras es la base. Tenemos una escaleta en la que viene el tema principal a tratar en cada programa y de puntos que nos gustar¨ªa tratar, muy generales. Eso, o preguntas a las que no ponemos una respuesta com¨²n. Cada una trabaja su parte con esa escaleta y lo compartimos en directo. Yo no s¨¦ lo que va a decir Victoria y al rev¨¦s. Con lo que ella dice, yo improviso y con lo que yo digo, ella improvisa. En general, no hay ning¨²n programa que hagamos en el que no improvisemos nada. Y tambi¨¦n se ve, no puedes estar leyendo. Depende mucho de que con qui¨¦n est¨¦s. Nosotras, cuando estamos fuera de c¨¢mara, estamos todo el d¨ªa haciendo el tonto. Valga para que a Victoria le haga gracia cualquier cosa para que yo la repita todo el tiempo [risas].

VM: Lo que pienso tambi¨¦n es que la improvisaci¨®n, y eso supongo que te lo dir¨¢n la mayor¨ªa de c¨®micos y c¨®micas, es un poco supervivencia. Yo lo percibo as¨ª. Sufro mucho cuando tenemos un invitado o invitada que le cuesta m¨¢s y que es m¨¢s t¨ªmida. Me arrastro por la mesa, invent¨¢ndome cosas, lo que haga falta. Me agobia menos cuando estamos las dos solas, ah¨ª fluye en el sentido m¨¢s sano del poder de improvisaci¨®n.

P.: ?Hacia d¨®nde creen que avanza la radio tal y como la conocemos? ?Qu¨¦ debe hacerse para conectar con los j¨®venes?

R. CI: Lo que se debe hacer es respetarlos. No es verdad que los j¨®venes hagan todo mal y que est¨¦n de botell¨®n a todas horas. ?De verdad lo hacen todo mal? Debemos preguntarnos c¨®mo lo han pasado y c¨®mo lo siguen pasando durante la pandemia y no les est¨¢n haciendo ni caso. Hay muchos que han pasado a?os clave de su vida confinados en su casa y sin poder relacionarse con sus amigos en un momento de la vida en el que es muy importante que suceda. Poco se quejan a veces. Me hace falta un poco de entendimiento y no demonizarlos tanto. Nosotras no vamos con la intenci¨®n de hacernos las j¨®venes.

VM: Es que intentar hacerte la joven...

CI: Eso da mucha verg¨¹enza, no se puede. Hay que convivir con ellos y no entenderlos, lo que creo que no ha sucedido. No puedes hacer un contenido dirigido a j¨®venes con una plantilla en la que edad media sea de 60 a?os.

VM: Habr¨¢ j¨®venes de todo tipo, pero me parece muy injusto meterlos todos en el mismo saco de la indiferencia. A nuestros shows viene gente de 18 a?os que son maravillosas personas.

CI: Si eres seguidor de Estirando el chicle te da un plus para ser mejor persona [risas].

P.: ?D¨®nde va a pasar el Pegaso de bronce los pr¨®ximos meses?

R. CI: Pues va a seguir en mi casa.

VM: No s¨¦ lo que le har¨¦ a Carolina con ese perro.

CI: Si es un caballo.

VM: No me digas, si yo pensaba que era para darle prestigio al perro.