La inspectora buce¨® en el d¨ªa a d¨ªa de la cantante colombiana en Barcelona para demostrar que no viv¨ªa en Bahamas sino en Espa?a, y que por ello deb¨ªa pagar sus impuestos aqu¨ª. Sabe que Shakira recib¨ªa clases particulares de franc¨¦s, que su profesora de zumba se llamaba Betsie, que iba al peluquero dos veces por semana, que sus gastos en El Corte Ingl¨¦s, restaurantes y hoteles los pagaban sus asistentas con tarjetas de cr¨¦dito de American Express. Hasta sabe que, cuando acud¨ªa a la cl¨ªnica Teknon donde dio a luz a sus hijos, lo hac¨ªa bajo el pseud¨®nimo de Sila Prieto.

El nombre real de la artista vale tanto como un pseud¨®nimo: Shakira es Isabel Mebarak Ripoll, ¡°la contribuyente¡±, seg¨²n la ve Susana C., convencida en su extenso informe ¨Dal que ha accedido EL PA?S¨D de que en 2011, tras comenzar su relaci¨®n con Gerard Piqu¨¦, ancl¨® en Espa?a. Primero alquil¨® una casa al nadador David Meca, despu¨¦s se instal¨® en una c¨¦ntrica calle de Barcelona con el central azulgrana y al final ambos compraron una casa a la altura de su patrimonio en un barrio exclusivo de Esplugues, cerca de la ciudad deportiva del Bar?a.

Como el mejor Colombo, Susana C. ha seguido la pista de la cantante en ¡°cl¨ªnicas, centros de belleza, estudios de grabaci¨®n, actos promocionales, tiendas de ropa y decoraci¨®n¡±. Tambi¨¦n ha rastreado las redes, donde los clubs de fans de la artista ¨Dcomo uno llamado Te quiero a morir¨D se dedican a etiquetarla por donde pasa. Esos fans se han convertido, a su pesar, en una prueba m¨¢s del presunto fraude fiscal. En 2011, la ubicaron 60 veces en Espa?a, muchas m¨¢s que en cualquiera de los 37 pa¨ªses del mundo que visit¨® ese a?o. Ninguno de ellos, por cierto, era Bahamas.

La batalla de Nassau

La isla caribe?a ocupa un lugar central en esta historia. La inspectora denuncia la ¡°nula colaboraci¨®n¡± de Shakira, tozuda al afirmar ¡°sin pruebas¡± que no vivi¨® en Espa?a hasta finales de 2014, cuando ya era madre de su primer hijo (Milan) y estaba embarazada del segundo (Shasha). En la inspecci¨®n, la artista dijo que hasta entonces resid¨ªa en una casa comprada en Nassau por 1,1 millones de d¨®lares. Y aport¨® como prueba un permiso de residencia permanente otorgado por Bahamas en 2007. Pero Susana C. no cedi¨®. Demostr¨® que el ¨²nico requisito para obtener ese certificado es comprar una casa; cuanto m¨¢s cara mejor, porque ¡°si supera cierto importe, se aceleran los tr¨¢mites¡±.

La disputa en la sede de la Agencia Tributaria fue intensa. Shakira aport¨® gastos de luz, agua y televisi¨®n por cable de la casa de Nassau. Result¨® que esos servicios los pagaba una empresa y no los consum¨ªa ella, sino los empleados que cuidaban la finca. El exnovio y exm¨¢nager de la cantante de Barranquilla, Antonio de la R¨²a, ech¨® una mano a la inspectora sin propon¨¦rselo. El amor entre los dos se acab¨® en 2010, cuando Shakira conoci¨® a Piqu¨¦ mientras grababa el videoclip de Waka-waka, la canci¨®n del Mundial de Sud¨¢frica que gan¨® Espa?a. Tras ser apartado de los negocios, De la R¨²a le demand¨® en Nueva York, donde reclama 100 millones de euros por contribuir a crear ¡°la marca Shakira¡±. La inspectora consigui¨® su declaraci¨®n judicial, en la que afirmaba que ¨¦l iba a quedarse la casa de Bahamas y que Shakira ¡°mand¨® a sus asistentes a recoger sus pertenencias¡±.

La burocracia da pistas de lo ¡°artificioso¡± de la residencia en Bahamas, que ten¨ªa una mera ¡°finalidad fiscal¡±, porque all¨ª no existe un impuesto que, como en Espa?a, grave lo que se gana con independencia de d¨®nde se gane (el nombre t¨¦cnico, grandilocuente, es ¡°renta mundial¡±). Pero es la esfera personal lo que permite ver el puzle completo. La inspectora presume de haber ¡°identificado a todo el n¨²cleo¡± ¨ªntimo de Shakira: sus padres y hermanos, sus asistentes, la directora de la Fundaci¨®n Pies Descalzos; los contables, estilistas, productores y amigos norteamericanos. Incluso su m¨¦dico de confianza en Colombia. Todos ellos, en alg¨²n momento de los a?os investigados (2011-2014) la visitan en Barcelona. La mayor¨ªa ven¨ªan expresamente desde Estados Unidos. ¡°Si de verdad resid¨ªa en Bahamas¡±, reflexiona en el informe, ¡°les era mucho m¨¢s f¨¢cil visitarla en su residencia de Nassau¡±.

El peluquero, el m¨¦dico y el fot¨®grafo

Ni un solo d¨ªa visit¨® Shakira su isla en ese periodo. Tampoco ha aportado pruebas (como billetes de avi¨®n) de que lo hiciera. No le une con Bahamas ¡°ning¨²n lazo profesional, familiar, personal o social¡±, resalta la inspectora. Viaj¨® por todo el mundo para dar conciertos, rodar anuncios y descansar. Pero, por muy largos que fuesen algunos de esos viajes ¨Dgrab¨® The Voice en Estados Unidos varias semanas al a?o¨D, Hacienda los considera ¡°ausencias espor¨¢dicas¡±. Porque cuando el trabajo (y el ocio) terminan, cuando toca volver a casa, su destino es Barcelona. Susana C. afrontaba, no obstante, el reto de demostrar que pas¨® aqu¨ª la mitad del a?o m¨¢s un d¨ªa en Espa?a, el m¨ªnimo para considerar a Shakira residente fiscal.

Hacienda obtuvo la ficha de cliente de la cantante en un centro de est¨¦tica de Sarri¨¤, en la parte alta de Barcelona. Logr¨® informaci¨®n de los d¨ªas en que fue a visitarse a la cl¨ªnica Teknon. Pidi¨® a Getty Images, la agencia que suele fotografiar su vida profesional y personal, en qu¨¦ lugar y d¨ªa se hab¨ªan tomado ciertas im¨¢genes. Obtuvo datos de los conciertos organizados por Live Nation en Barcelona, Madrid, Valencia o Bilbao en 2011, a?o grande para Shakira, que complet¨® su gira mundial Sale el Sol. Supo qu¨¦ d¨ªas alquil¨® y utiliz¨® el estudio de grabaci¨®n Mandinga, de los hermanos Mu?oz (Estopa), en Sant Feliu de Llobregat. Habl¨® con Codorniu para conocer las fechas de grabaci¨®n de un videoclip con Man¨¢ en las Cavas Rondel del Pened¨¨s (Barcelona). Conoci¨® por boca de su peluquero que iba a peinarla a la casa de Esplugues dos veces por semana y que lo hac¨ªa gratis. En el colegio de ¨¦lite de los ni?os le informaron de que la madre es una de las personas que los lleva por las ma?anas y que va ¡°habitualmente¡± a las reuniones.

Las tarjetas de cr¨¦dito tambi¨¦n han sido esenciales. Su hermano Antonio ¨Dque Shakira identific¨® en la inspecci¨®n como ¡°coordinador de los equipos de seguridad¡±¨D y tres asistentes de la cantante gastaron, en cuatro a?os, la friolera de 418.046 euros en 279 establecimientos de Barcelona. Los pagos corresponden a servicios que usaban ellos (residentes, en teor¨ªa, en Estados Unidos), pero sobre todo la cantante: restaurantes, farmacias, taxis, hoteles; entre otros, para Anna Kieser, la entrenadora que ¡°la puso en forma tras el embarazo¡±, detalla el informe. Un documento de pago del hotel Santo Mauro de Madrid, abonado con la tarjeta de una colaboradora, se?ala literalmente: ¡°Lo paga Shakira¡±.

El resultado de esa labor detectivesca es un calendario detallado de la vida de Shakira, que agota con solo verlo. Hacienda trata de demostrar que su campamento base fue siempre Barcelona, por m¨¢s que no dejase de viajar. Sirva 2012 como ejemplo. Shakira acude a la gala del bal¨®n de oro, a los NRJ Awards en Cannes, graba un spot para Puig en Sud¨¢frica, se escapa a Italia con Piqu¨¦, va a California a grabar el videoclip Addicted to You, asiste a la cumbre de las Am¨¦ricas en Colombia, visita a su familia en Miami, acompa?a a la Eurocopa de Polonia al defensa del Bar?a, graba las audiciones de The Voice en Estados Unidos y hasta da un concierto en Azerbaiy¨¢n. Pasa un agosto lejos de las c¨¢maras en casa de sus suegros, en Cabrils (Barcelona): est¨¢ embarazada y el 22 de enero de 2013 dar¨¢ a luz a su primer hijo.

La gran evasi¨®n

Un an¨¢lisis similar vale para otros a?os. Dado ese paso, la inspectora reconstruy¨® el imperio mundial de Shakira: una estructura de hasta 14 empresas ¡°sin medios materiales ni humanos¡±, algunas en para¨ªsos fiscales, que solo serv¨ªan para ocultar a la verdadera titular de las ganancias millonarias: Shakira. La primera pista de la estructura opaca la dio, de nuevo, el empresario Antonio de la R¨²a.

El a?o clave es 2008, cuando Shakira cede sus derechos de imagen a una empresa en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas, que los cede (?por un euro!) a otra en Luxemburgo. Es esta empresa, Ace Entertainment, la que firma un contrato con Live Nation, que garantiza a Shakira 300 millones en 10 a?os. La primera gira con esas condiciones es Sale el Sol. La cantante llega a un acuerdo con las autoridades de Luxemburgo para pagar un 2% de impuestos. Despu¨¦s, los ingresos casi netos ¡°fluyen¡± de nuevo a las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas y, de ah¨ª, a una sociedad en las islas Caim¨¢n, Carpe Diem, y al bolsillo de la cantante.

Hacienda concluye que Shakira defraud¨® en el impuesto de IRPF y patrimonio durante cuatro a?os. Su a?o de m¨¢s ingresos, 2011, despu¨¦s del exitazo del Mundial y con la gira mundial en marcha, no pudo llevarse ante la justicia porque hab¨ªa prescrito. Se cerr¨® con un acta de desacuerdo: la cantante pag¨® 24 millones de euros (la cuota defraudada) para regularizar antes de reclamar ante la Agencia Tributaria. Los inspectores s¨ª llevaron a la Fiscal¨ªa el fraude de 2012, 2013 y 2014. En esos tres a?os se embols¨® 34,9 millones y dej¨® de pagar al fisco 14,5. La Fiscal¨ªa se querell¨® y la cantante permanece ahora imputada por seis delitos fiscales. El verano pasado, Shakira declar¨® ante la juez y volvi¨® con lo mismo que le dijo a la inspectora: no viv¨ªa en Espa?a, no viv¨ªa en ning¨²n sitio en particular, estaba de aqu¨ª para all¨¢, era una ¡°n¨®mada sin ra¨ªces¡±.