El nacionalismo no acaba aqu¨ª
Emilio Gentile
Historiador italiano especializado en el estudio del fascismo, profesor de Historia Contempor¨¢nea en la Universidad La Sapienza
¡°Cuando termine la pandemia, en el mundo seguir¨¢ habiendo Estados soberanos con fronteras consideradas sagradas e intocables¡±
¡°La historia es una gran improvisadora¡±, sosten¨ªa el conde de Cavour, fundador del Estado italiano. Lo imprevisto forma parte de la historia y es a menudo tr¨¢gico, como las guerras y las pandemias. Nadie hab¨ªa previsto que en el primer semestre de 2020 gran parte de la poblaci¨®n mundial se iba a ver obligada a encerrarse en casa para protegerse de una epidemia mortal cuya consecuencia es una crisis econ¨®mica y social de dimensi¨®n planetaria, m¨¢s grave que las de 1929 y 2008. Nadie puede profetizar cu¨¢ndo terminar¨¢ esa pandemia ni qu¨¦ repercusiones va a tener en el futuro de la humanidad. Sin embargo, se ha popularizado la idea de que ¡°el mundo ya no ser¨¢ el de antes¡±. Es una predicci¨®n que se presta a objeciones, al menos en lo relativo a la vida entre los Estados y dentro de ellos. La realidad es que, siempre que la historia no nos sorprenda con otras improvisaciones catastr¨®ficas, cuando termine la pandemia, en el mundo seguir¨¢ habiendo Estados soberanos con fronteras consideradas sagradas e intocables. Seguir¨¢ habiendo Estados poderosos que querr¨¢n tener m¨¢s poder. Seguir¨¢ habiendo guerras entre Estados independientes. Dentro de las fronteras, seguir¨¢ habiendo poblaciones que reivindicar¨¢n, por las armas o con otros m¨¦todos, el derecho a tener su propio Estado. La pandemia no terminar¨¢ con estas situaciones, que constituyen las principales manifestaciones del nacionalismo en el siglo XXI.
En la vida interna de los pa¨ªses, despu¨¦s de la pandemia seguir¨¢ habiendo Estados con gobernantes elegidos por los gobernados y otros cuyos gobernados no tengan derecho a elegir a quienes los gobiernen. Y seguir¨¢ habiendo Estados parlamentarios con tendencia a la democracia recitativa (como explico en mis libros ¡®El l¨ªder y la masa¡¯, Edhasa, 2017, y ¡®La mentira del pueblo soberano en la democracia¡¯, Alianza, 2018), en los que los parlamentarios no representar¨¢n m¨¢s que a una parte de los electores, mientras que los votantes de la oposici¨®n los considerar¨¢n demagogos, aspirantes a dictadores o dictadores de hecho, pese a contar con el visto bueno del parlamento.
El mundo que vaya a existir despu¨¦s de la pandemia depender¨¢ sobre todo de lo que dure esta. Existen dos hip¨®tesis. El mundo ser¨¢ como antes, quiz¨¢ un poco peor, con m¨¢s nacionalismo y m¨¢s autoritarismo. Pero tambi¨¦n podemos esperar que, tras la experiencia de la pandemia, el mundo pueda ser un poco mejor, m¨¢s solidario y m¨¢s liberal. Se dice que la esperanza es lo ¨²ltimo que se pierde. Pero la estupidez humana ha demostrado, muchas veces, que tiene m¨¢s capacidad de sobrevivir.
Cr¨¦ditos
Edici¨®n y Coordinaci¨®n: Joseba Elola, Carmen P¨¦rez-Lanzac, Braulio Garc¨ªa Ja¨¦n, Carla Mascia, Andrea Aguilar, Pablo de Llano, Jorge Morla, ?ngeles Lucas, Pablo Le¨®n, Jes¨²s Albor¨¦s.
Direcci¨®n de arte: Fernando Hern¨¢ndez
Ilustraciones: Sr. Garc¨ªa
Fotograf¨ªa: Carmen Guri y Almudena Mart¨ªn
Desarrollo: Jacinto Corral
Frontend: Alejandro Gallardo
Traducciones: News Clips y Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia