Carreras contra el crimen
Criminal¨ªstica y Criminolog¨ªa son t¨ªtulos con mucha demanda, pero su encaje en el mercado laboral es complicado
Ligadas en el imaginario com¨²n a series como CSI y Mentes criminales, los grados en Criminal¨ªstica y Criminolog¨ªa, dos disciplinas a menudo confundidas entre s¨ª, son opciones formativas para los que buscan hacer carrera plantando cara al crimen. Eso s¨ª, lejos de la espectacularidad y dramatismo de las ficciones audiovisuales. Estas dos titulaciones j¨®venes cuentan con una gran demanda, pero lidian con salidas al mundo laboral a¨²n un tanto borrosas.
Ambas pueden ser comple...
Ligadas en el imaginario com¨²n a series como CSI y Mentes criminales, los grados en Criminal¨ªstica y Criminolog¨ªa, dos disciplinas a menudo confundidas entre s¨ª, son opciones formativas para los que buscan hacer carrera plantando cara al crimen. Eso s¨ª, lejos de la espectacularidad y dramatismo de las ficciones audiovisuales. Estas dos titulaciones j¨®venes cuentan con una gran demanda, pero lidian con salidas al mundo laboral a¨²n un tanto borrosas.
Ambas pueden ser complementarias, se?ala por videollamada Carmen Garc¨ªa, decana adjunta de Criminal¨ªstica de la Universidad de Alcal¨¢, pero son distintas. ¡°La criminal¨ªstica estudia, empleando el m¨¦todo cient¨ªfico, los vestigios de un hecho criminal para obtener informaci¨®n sobre su fuente y actividad para poder conocer las circunstancias del hecho criminal¡±, relata. La criminolog¨ªa, dice Arantxa Hern¨¢ez, vicepresidenta del Colegio de Crimin¨®logos de Catalu?a, estudia el delito, el delincuente, la v¨ªctima y el entorno social que rodea estos tres factores.
El aterrizaje de estas disciplinas como titulaciones oficiales es reciente. El grado en Criminal¨ªstica: Ciencias y Tecnolog¨ªas Forenses, por ejemplo, se puso en marcha en la Universidad de Alcal¨¢, ¨²nico centro en el que lo imparte ¡ªaunque ya exist¨ªan m¨¢steres previamente¡ª en 2017. ¡°Las titulaciones oficiales de Criminolog¨ªa existen en Espa?a desde principios de siglo¡±, se?ala Javier Guardiola, vicedecano de Estudios de Grado en Criminolog¨ªa y Posgrado de la Universidad de Valencia. El centro estren¨® la entonces licenciatura de segundo ciclo en 2004.
¡°La demanda ha sido enorme desde el principio. De hecho, las famosas notas de corte est¨¢n por encima de las de titulaciones hist¨®ricas y tradicionales como Derecho, Econom¨ªa o ADE¡±, se?ala Guardiola. ¡°Tambi¨¦n es verdad que de Derecho mi facultad ofrece m¨¢s de 500 plazas¡±. El m¨ªnimo para hacerse con una de las 100 plazas que ofertan es de 10,79. En el caso de las 90 para el doble grado con Derecho, 11,99.
¡°Es incre¨ªble lo que ha subido¡±, comenta Alba Quintana, de la primera promoci¨®n que se ha graduado en Criminal¨ªstica este a?o. ¡°Hay pocas plazas y hay una demanda se ve que alta. Lo que ocurre es que la demanda es bastante vocacional¡±, se?ala Garc¨ªa. Actualmente cuentan con alrededor de 60 plazas y el baremo est¨¢ en 12,61.
?lvaro Morales es alumno de segundo de Criminal¨ªstica, pero ya tiene el t¨ªtulo de crimin¨®logo bajo el brazo. Cuenta que le atra¨ªan el crimen y las conductas antisociales. Despu¨¦s, al estudiar las disciplinas dentro de la Criminolog¨ªa, se top¨® con la que ahora le ocupa. A Quintana, aunque no fue su primera opci¨®n, siempre le llam¨® la atenci¨®n el campo. Cristian Arribas, por su parte, est¨¢ en el ¨²ltimo curso y cuenta que siempre le interes¨® conectar de alguna manera las ciencias naturales con las ciencias sociales.
Impacto televisivo
¡°Algo de eso hay, obviamente. La televisi¨®n hace propaganda y hay cuestiones de moda¡±, comenta Guardiola sobre si las series tienen que ver con la demanda, ¡°pero tambi¨¦n porque se trata de una disciplina y una profesi¨®n que son apasionantes¡±. Garc¨ªa lo asocia m¨¢s al deseo de que haya una mejor justicia. ¡°S¨ª que pens¨¢bamos que ten¨ªa un efecto y en una de las preguntas incluso les pusimos distintas series, y algunos ni las conoc¨ªan¡±, relata.
¡°Tengo compa?eros que dejaron el grado un poco por ese motivo. Al final, si no te convence y est¨¢s asustado decides abandonar pronto para buscar una alternativa¡±, cuenta Quintana en referencia a las perspectivas laborales. ¡°Inicialmente se pensaba en las salidas cl¨¢sicas, que son los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad: Polic¨ªa, Guardia Civil, Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa y Ciencias Forenses¡¡±, relata la decana. Pero ahora, se?ala, se empiezan a dibujar nuevos horizontes, como empresas que ya cuentan con sus propios departamentos forenses o empresas de peritaje y laboratorios privados.
Quintana ha decidido que lo suyo son m¨¢s las nuevas tecnolog¨ªas y la investigaci¨®n que las muertes violentas y aspira a especializarse en inform¨¢tica forense a trav¨¦s de un m¨¢ster oficial. ¡°Creo que es lo que m¨¢s va a estar en auge. Los delitos inform¨¢ticos y la ciberdelincuencia no dejan de aumentar y los dispositivos siempre est¨¢n ah¨ª¡±, cuenta. Arribas, que s¨ª apunta a la Polic¨ªa Cient¨ªfica, cuenta que tambi¨¦n hay empresas, como aseguradoras, que investigan en caso de incendio o accidente. ¡°Pero he de decir que esta labor la lleva principalmente la Polic¨ªa. Por lo privado es m¨¢s complicado¡±.
Morales baraja varias opciones e intenta encaminarse a medida que se va formando. ¡°Una gran v¨ªa que se est¨¢ abriendo es el ejercicio de la criminal¨ªstica en laboratorios privados¡±, cuenta. Para ¨¦l, una de las ventajas que ofrece un centro privado propio es poder dedicarse a varias disciplinas dentro de la criminal¨ªstica.
En el caso de Criminolog¨ªa, Hern¨¢ez cuenta que muchos optan por cursar un m¨¢ster u otro grado. La profesi¨®n, dice, no est¨¢ regulada y los titulados pueden acceder a numerosos puestos de trabajo de los que no conocen sus nombres. ¡°Les dicen d¨®nde pueden trabajar, pero no de qu¨¦. Y cuando buscan ofertas con la palabra crimin¨®logo, no las van a encontrar¡±. Como una de las principales salidas menciona la seguridad corporativa y, en Catalu?a, con competencias en prisiones, la ejecuci¨®n penal.
Otras opciones, que pueden requerir formaci¨®n adicional o aprobar una oposici¨®n, pasan por el ejercicio como detective privado, la asistencia a v¨ªctimas, atenci¨®n a menores, el desarrollo como asesor¡ ¡°Todo esto es cualificaci¨®n y posibilidades. Luego est¨¢ el problema de las realidades¡±, se?ala Guardiola. ¡°Es un mapa profesional complejo¡±, asevera, ¡°pero en el que los titulados van encontrando un espacio y lo encontrar¨¢n cada vez m¨¢s¡±.
Un colegio de criminalistas
Debido a su reciente implantaci¨®n, los criminalistas no cuentan con un colegio profesional. Cristian Arribas, estudiante de ¨²ltimo curso, considera que es fundamental y ya se ha interesado por su constituci¨®n. ¡°Veo que es necesario, igual que lo tienen los abogados o los m¨¦dicos. Porque de esta manera podemos poner en valor las necesidades de este colectivo profesional y defender nuestros intereses laborales¡±, asegura.