El sol brilla para el autoconsumo
El precio de la luz y las ayudas europeas disparan la apuesta por la generaci¨®n propia. En 2021, la potencia instalada para uso propio fue de 1.200 megavatios, el doble que el a?o anterior
Soplan vientos favorables para el autoconsumo de energ¨ªa solar. El precio de la luz y las ayudas procedentes de los fondos europeos para la recuperaci¨®n se han unido a aspectos previos (como la conciencia medioambiental y el descenso de los costes de la tecnolog¨ªa) para crear la tormenta perfecta que ha impulsado la apuesta, industrial, comercial y residencial por esta modalidad. En 2021, de acuerdo con datos de la Uni¨®n Espa?ola Fotovolta...
Soplan vientos favorables para el autoconsumo de energ¨ªa solar. El precio de la luz y las ayudas procedentes de los fondos europeos para la recuperaci¨®n se han unido a aspectos previos (como la conciencia medioambiental y el descenso de los costes de la tecnolog¨ªa) para crear la tormenta perfecta que ha impulsado la apuesta, industrial, comercial y residencial por esta modalidad. En 2021, de acuerdo con datos de la Uni¨®n Espa?ola Fotovoltaica (UNEF), se instalaron en Espa?a 1.200 megavatios de potencia para uso propio, m¨¢s del doble que el a?o anterior.
¡°Nosotros trabajamos con dos divisiones de negocio: una para viviendas unifamiliares, lo que es el mercado residencial, y otra para el sector de empresas, y en ambas hemos visto un incremento sin precedentes en nuestro hist¨®rico¡±, dice por tel¨¦fono Pablo P¨¦rez-Bedmar, director de marketing y producto de Powen, una compa?¨ªa instaladora de equipos fotovoltaicos. El 41% de los 1,2 gigavatios instalados corresponde a autoconsumo industrial, y el 26%, al comercial.
Alternativas necesarias
Ante facturas el¨¦ctricas que se multiplicaron hasta por seis, cuenta Fernando Romero, consejero delegado de Eidf, centrada en este tipo de instalaciones de autoconsumo para compa?¨ªas, los empresarios buscaron alternativas. ¡°Ven¨ªa con un crecimiento muy exponencial en los ¨²ltimos a?os, pero esta coyuntura ha hecho que se multiplique la demanda por varios d¨ªgitos¡±. Adem¨¢s de la reducci¨®n de costes, el factor medioambiental gana peso en t¨¦rminos de responsabilidad e imagen corporativa.
Sin embargo, si ha habido un claro protagonista de esta explosi¨®n, ese ha sido el autoconsumo en el hogar. ¡°Durante a?os, la participaci¨®n del sector residencial ha sido muy peque?a, de en torno al 5%¡±, dice Jos¨¦ Donoso, director general de UNEF. Con la crisis sociosanitaria, cuenta, lleg¨® al 19%. ¡°Y en 2021 ha seguido creciendo¡±. Iniciativas como La Rosa Energ¨¦tica, de la urbanizaci¨®n madrile?a Rosa de Luxemburgo de Aravaca, han contribuido a que este segmento haya alcanzado el 32%.
El a?o pasado impulsaron la compra colectiva de 90 instalaciones de autoconsumo. ¡°Estamos muy convencidos de su importancia como medida de contribuci¨®n personal, particular y, si se quiere, ideol¨®gica para cuidar el mundo¡±, dice Daniel Ribao, vecino y vocal del grupo gestor de la iniciativa. ¡°Independientemente del ahorro en la factura de la luz, que no es el ¨²nico objetivo¡±, puntualiza.
El incremento se ha dejado notar, especialmente, a partir del segundo semestre del a?o pasado, coincidiendo con la publicaci¨®n de las subvenciones derivadas de los fondos europeos, de los que hasta 900 millones estar¨¢n destinados a instalaciones de autoconsumo. Estas medidas contemplan, por ejemplo, ayudas de hasta 600 euros por kilovatio instalado en el sector residencial en el caso de autoconsumo individual y de 710 en el colectivo. Para las empresas, las ayudas directas van desde el 15% para las grandes al 25% y 45% para medianas y peque?as, respectivamente. Esto se une a incentivos fiscales que ya exist¨ªan, como las bonificaciones en el IBI que ofrecen algunos municipios a particulares.
La guinda del pastel
Pero estas ayudas han sido solo la guinda del pastel. ¡°Durante los ¨²ltimos a?os ha habido un descenso del precio especialmente de los principales componentes de una instalaci¨®n fotovoltaica, que son los paneles, que la hacen m¨¢s accesible¡±, cuenta H¨¦ctor Pastor, ingeniero de autoconsumo de Ecooo, la empresa social sin ¨¢nimo de lucro elegida por los vecinos de la Urbanizaci¨®n Rosa de Luxemburgo. ¡°Tambi¨¦n ha habido un apoyo por parte de la Administraci¨®n en eliminar much¨ªsimas trabas que complicaban hacer instalaciones¡±, a?ade. Adem¨¢s, dice, estas alternativas tienen cada vez m¨¢s eco en las conversaciones.
Pero no hay mejor predicador que los n¨²meros, y las cuentas, seg¨²n el sector, salen. Sin los incentivos econ¨®micos, en Kaylon, empresa instaladora, sit¨²an la recuperaci¨®n de la inversi¨®n en seis o siete a?os; un periodo que puede rebajarse, dice su consejero delegado, Mimoun Lamsayah, hasta la mitad si se cuenta con subvenciones. El precio de una instalaci¨®n media para una vivienda tipo var¨ªa entre los 4.000 y 6.000 euros. En el caso de industriales, la horquilla es de entre 50.000 y 100.000 euros. Y, dice Romero de Aidf, pueden amortizarse en cinco o seis a?os.
¡°En la parte residencial podemos estar ahorrando en torno a un 40% de la factura de la luz sin hacer grandes cambios en el consumo¡±, dice P¨¦rez-Bedmar. Lamsayah apunta a que el ahorro mensual depende de la situaci¨®n climatol¨®gica y de los horarios en los que se hace uso: ¡°Se nota en la factura siempre y cuando seamos capaces de encuadrar nuestros h¨¢bitos de consumo dentro de esas horas de producci¨®n¡±. En el ¨¢mbito profesional, en Powen comentan que depende del sector y del tama?o, pero trabajan con ahorros medios de alrededor del 20%. En Eidf se?alan que los m¨¢rgenes atienden al consumo, habiendo clientes que ahorran un 1% o un 2%, y otros, un 60%.
Ribao tiene placas en su tejado desde hace dos a?os. ¡°En mi caso ten¨ªa un consumo medio de 130 euros al mes, ahora estoy entre 30 y 40. Hay otros que tienen ahora un consumo de 40-50 euros y tras poner las placas el ahorro puede ser porcentualmente menor¡±, cuenta. Ya preparan una segunda fase de la iniciativa, en la que esperan que se materialicen 100 instalaciones m¨¢s. ¡°Es un efecto bola de nieve¡±, cuenta Ribao, ¡°hay gente que somos m¨¢s impulsivos y hay otros que esperan m¨¢s a ver qu¨¦ hace el vecino¡±.
Las previsiones para el sector parecen halag¨¹e?as. ¡°El otro d¨ªa habl¨¢bamos con una empresa asociada y nos contaba que ya ten¨ªa toda la planificaci¨®n de 2022 vendida¡±, dice Luc¨ªa D¨®lera, directora de proyectos de la Asociaci¨®n de Empresas de Energ¨ªas Renovables (APPA). ¡°Hay muchas derivadas del autoconsumo, como las comunidades energ¨¦ticas, el veh¨ªculo el¨¦ctrico¡ El potencial es grand¨ªsimo¡±. Romero, por su parte, apunta a un mercado dopado que tender¨¢ a corregirse. ¡°Estas subvenciones, l¨®gicamente, no van a ser duraderas en el tiempo. Esto har¨¢ que el mercado en dos a?os m¨¢s o menos vuelva a su estado normal¡±.
Otro camino hacia la transici¨®n energ¨¦tica
“El desafío que tenemos más cercano es la extensión del autoconsumo residencial individual al autoconsumo colectivo”, dice José Donoso, director general de UNEF. Alrededor del 65% de la población española, de acuerdo con datos de Eurostat, vive en pisos y el Observatorio de la Sostenibilidad contabilizó en 2020 más de 352.000 hectáreas en tejados y superficies planas para la captación solar.
“En mi opinión”, dice Héctor Pastor, ingeniero de Ecooo, sobre el uso compartido de la energía, “va a ser predominante”. Este modelo no se reduce solo a las comunidades de vecinos, sino que incluye aquellos puntos de generación de los que pueda beneficiarse su entorno. “Falta todavía flexibilizar mucho los criterios y las posibilidades regulatorias del autoconsumo colectivo para que de verdad sea una realidad”, dice Pablo Pérez-Bedmar, de Powen.