Maha Vajiralongkorn, el rey que reina en Tailandia a distancia
El monarca ha hecho un viaje rel¨¢mpago a su pa¨ªs de 24 horas pero ha regresado a su mansi¨®n en Baviera. Para poder residir en el extranjero ha modificado la Constituci¨®n
Los viajes del rey de Tailandia, Maha Vajiralongkron, a su pa¨ªs cada vez son m¨¢s cortos: el ¨²ltimo no ha llegado a las 24 horas. Rama X, nombre que adopt¨® al ocupar el trono, abandon¨® el Grand Hotel Sonnenbichl del sur de Alemania, donde se ha aislado de la pandemia de coronavirus con una veintena de concubinas, para participar en una ceremonia budista en Bangkok, de modo parecido ...
Los viajes del rey de Tailandia, Maha Vajiralongkron, a su pa¨ªs cada vez son m¨¢s cortos: el ¨²ltimo no ha llegado a las 24 horas. Rama X, nombre que adopt¨® al ocupar el trono, abandon¨® el Grand Hotel Sonnenbichl del sur de Alemania, donde se ha aislado de la pandemia de coronavirus con una veintena de concubinas, para participar en una ceremonia budista en Bangkok, de modo parecido a otra visita rel¨¢mpago que hizo el pasado abril. El monarca, cuyas breves apariciones subrayan su papel de soberano distante, estuvo acompa?ado de su esposa, la reina Suthida, quien por su parte reside desde hace meses en un hotel cerca de Zurich.
Ha sido un visto y no visto. Rama X se reuni¨® con su esposa en la ciudad suiza y pusieron rumbo a Bangkok en un avi¨®n especial fletado por la aerol¨ªnea nacional, Thai Airways ¨Cque suspendi¨® sus operaciones en marzo debido a la pandemia-, seg¨²n narra en Twitter el periodista Andrew MacGregor, habitual seguidor de los movimientos del monarca. Los reyes pasaron el lunes en la capital tailandesa y retornaron esa misma madrugada a Zurich, despu¨¦s de participar en una ceremonia en el ic¨®nico templo del Buda Esmeralda, dentro del Palacio Real.
Una serie de fotograf¨ªas de la solemne ceremonia muestran al rey, ataviado con uniforme militar blanco, sentado en el trono junto a la reina, vestida con un traje verde y alt¨ªsimos tacones dorados. La hija de Rama X, la princesa Bajrakitiyabha, aparece postrada frente a los pies de su padre, quien vierte agua sagrada sobre su cabello. La postraci¨®n es un ritual centenario: los reyes tailandeses tienen, seg¨²n la tradici¨®n, condici¨®n divina y merecen completa subyugaci¨®n. Aunque el rito fue abolido en 1873 por el rey Chulalongkorn al considerarlo ¡°excesivamente humillante¡±, el padre de Rama X, el venerado rey Bhumibol ¨Cfallecido en octubre de 2016-, lo reimpuso para fortalecer su reinado en una ¨¦poca fr¨¢gil para la monarqu¨ªa.
El motivo de la ancestral ceremonia es el cambio del atav¨ªo de la estatua del Buda Esmeralda, que se hace tres veces al a?o, en este caso con motivo del paso a la estaci¨®n de lluvias. Se trata de un ritual que tiene que ser llevado a cabo por el rey, que tras ser coronado se convierte en un Devaraja ¨C¡±rey Dios¡±- y defensor del budismo. La estatua del Buda Esmeralda, de color verde y unos 66 cent¨ªmetros de alto, es cubierta con prendas elaboradas con brocado bordado en oro, y el templo donde se encuentra es el m¨¢s sagrado del reino, un s¨ªmbolo de la monarqu¨ªa y de su pueblo.
En las pocas im¨¢genes disponibles de la breve visita del rey a su pa¨ªs natal se puede apreciar tambi¨¦n, como observa MacGregor, una incipiente barriga del monarca bajo su uniforme, ¡°lo que ha sido comentado profusamente entre los tailandeses¡±, subraya el periodista en Twitter. Su perfil orondo podr¨ªa deberse a un simple aumento de peso en Alemania o a la presencia de un abultado chaleco antibalas bajo el traje como medida de seguridad contra posibles ataques a su persona, sopesa MacGregor.
Pese a la brevedad de las visitas del monarca ¨Cel pasado abril viaj¨® a Bangkok durante 24 horas para participar en el d¨ªa Chakri, en el que los ciudadanos expresan su devoci¨®n por la Casa Real-, estas no suelen dejar a nadie indiferente. Su decisi¨®n de residir en un hotel alem¨¢n junto a veinte concubinas mientras Tailandia declaraba el estado de emergencia por la pandemia de coronavirus fue criticada con dureza. Ni siquiera la draconiana ley de lesa majestad, que castiga con penas de hasta 35 a?os de c¨¢rcel los comentarios contrarios a la Corona, logr¨® frenar una cr¨ªtica campa?a online el pasado abril. Bajo la etiqueta ¡°Mi ksatriy wi thami?¡±, traducida como ¡°?Para qu¨¦ queremos un rey?¡±, se convirti¨® entonces en uno de los temas m¨¢s populares de las redes en el pa¨ªs.
Unas cr¨ªticas que no parecen importarle mucho a Rama X, quien el pasado mayo cumpli¨® un a?o de reinado sin que se conmemorara la fecha, oficialmente debido a las restricciones impuestas por la pandemia. A sus largas ausencias ¨Cmodific¨® la Constituci¨®n para poder vivir en su mansi¨®n en Baviera la mayor tiempo- y su lujosa estancia con concubinas en el hotel alem¨¢n, cercano a la frontera con Austria, se suman otros esc¨¢ndalos. Apenas tres meses de su boda con la reina Suthida, exazafata de Thai Airways, en mayo de 2019, justo antes de su coronaci¨®n, convert¨ªa a su amante, Sineenat Wongvairapakdi, en consorte real durante un pomposo ritual. Una poligamia que dur¨® poco: el pasado octubre la repudi¨® p¨²blicamente por ¡°desagradecida¡± y comportarse de modo ¡°impropio¡±.