Elon Musk ya es la cuarta persona m¨¢s rica del mundo
La fortuna del fundador de Tesla se eleva a los 71.250 millones en un a?o en el que se ha convertido en padre por sexta vez, ha lanzado un cohete al espacio y desafiado a la pandemia
Mientras que para la mayor¨ªa de los mortales 2020 va a ser un a?o de olvido debido a la pandemia por el coronavirus que ha paralizado el mundo, para Elon Musk parece que est¨¢ siendo de lo m¨¢s redondo. Despu¨¦s de convertirse en padre por sexta vez y ...
Mientras que para la mayor¨ªa de los mortales 2020 va a ser un a?o de olvido debido a la pandemia por el coronavirus que ha paralizado el mundo, para Elon Musk parece que est¨¢ siendo de lo m¨¢s redondo. Despu¨¦s de convertirse en padre por sexta vez y lanzar un cohete al espacio, el fundador de Tesla celebra ahora haber sido nombrado la cuarta persona m¨¢s rica del mundo despu¨¦s de que su patrimonio aumentase en casi 8.000 millones de d¨®lares (6.722 millones de euros) en un solo d¨ªa. Esto eleva su fortuna hasta los 84.800 millones de d¨®lares (71.250 millones de euros) y le permite adelantar al magnate franc¨¦s del lujo Bernard Arnault, presidente y consejero delegado del conglomerado LVMH, seg¨²n las cifras recogidas en el Bloomberg Billionaires Index, que colocan al empresario estadounidense por detr¨¢s solo de Jeff Bezos, Bill Gates y Mark Zuckerberg.
Entrar a formar parte de la c¨²spide de esta exclusiva lista de milmillonarios es solo el ¨²ltimo triunfo para el empresario que hace dos a?os fue demandado por la Comisi¨®n de Bolsa y Valores de Estados Unidos por unos tuits deshonestos por los que se vio obligado a renunciar a la presidencia del fabricante de autom¨®viles el¨¦ctricos. Desde entonces, Musk ocupa el lugar de consejero delegado, aunque sigue siendo el principal accionista con alrededor del 18% del capital, cuya revalorizaci¨®n estos d¨ªas le ha aupado a la cuarta posici¨®n de los m¨¢s ricos.
Aquellos tuits no fueron aislados. La cuenta de Twitter de Elon Musk se ha convertido en un show gratuito por s¨ª mismo. El pasado 1 de mayo, el cofundador de Paypal y creador de Tesla Motors y de la empresa de viajes espaciales SpaceX, decidi¨® compartir con sus seguidores en Twitter una apreciaci¨®n personal respecto al valor econ¨®mico de su empresa: ¡°El precio de las acciones de Tesla es muy alto, en mi opini¨®n¡±. Jornada muy provechosa para el magnate que public¨® otra decena de tuits a lo largo del d¨ªa, entre ellos uno anunciando que vender¨ªa todas sus posesiones y que, de ahora en adelante, no tendr¨ªa casa ¡ªtiene cinco propiedades¡ª para as¨ª ¡°ser libre¡±. Poco despu¨¦s, Musk cont¨® que el tuit hab¨ªa enfadado a su novia, la cantante Grimes, que, 72 horas despu¨¦s, dar¨ªa a luz al hijo de ambos, X ? A-12. Un nombre impronunciable que tuvieron que cambiarle debido a que las leyes de California no permiten utilizar n¨²meros. Ahora se llama X ? A-XII.
Tambi¨¦n acudi¨® a sus redes sociales para tuitear contra las autoridades por la libertad de movimiento en plena crisis sanitaria. Su oposici¨®n a las medidas del confinamiento y su creencia de que el mundo estaba exagerando con la pandemia le llev¨® a amenazar con abrir por su cuenta la f¨¢brica de Tesla en Fremont (bah¨ªa de San Francisco) y dejarse detener si era necesario. Finalmente, lleg¨® a un acuerdo con las autoridades.
Contra todo pron¨®stico y tambi¨¦n contra todo agorero, est¨¢ claro que la vida de espect¨¢culo de Elon Musk no hace m¨¢s que ampliar su faceta de empresario con la que ha cumplido el gran proyecto m¨¢s ambicioso de su vida: poner en la plataforma de lanzamiento un cohete espacial privado. La c¨¢psula Dragon Crew, impulsada por el cohete Falcon9 de SpaceX, despeg¨® el pasado 30 de mayo hacia la Estaci¨®n Espacial Internacional en colaboraci¨®n con la NASA. Musk estaba all¨ª, en el Kennedy Center de cabo Ca?averal, haciendo de maestro de ceremonias y resucitando el sue?o americano del espacio. Un hito en la carrera espacial privada que ha impulsado con la misma fuerza que la nave su propia carrera y lo ha situado en el cuarto puesto de los m¨¢s ricos del mundo. Falta por ver si, igual que sus cohetes, la fortuna de Musk seguir¨¢ subiendo.