Charlene de M¨®naco, gu¨ªa tur¨ªstica en el palacio real de Montecarlo

En este ¨²ltimo a?o, la imagen p¨²blica de Charlene de M¨®naco se ha visto interpelada por sus numerosas ausencias. Si bien es cierto que la princesa y su esposo, Alberto II, han llevado siempre vidas independientes, durante los ¨²ltimos meses esa distancia ha sido tanto figurada como real. El pasado verano la princesa sufri¨® ...

En este ¨²ltimo a?o, la imagen p¨²blica de Charlene de M¨®naco se ha visto interpelada por sus numerosas ausencias. Si bien es cierto que la princesa y su esposo, Alberto II, han llevado siempre vidas independientes, durante los ¨²ltimos meses esa distancia ha sido tanto figurada como real. El pasado verano la princesa sufri¨® una infecci¨®n y una consecuente operaci¨®n que la alejaron durante un largo periodo de tiempo del Principado y de sus labores, aunque estas sean meramente representativas. Pero ahora la sudafricana est¨¢ volviendo a dejarse ver y a mostrar esa imagen un tanto id¨ªlica que siempre trata de transmitir el peque?o pa¨ªs mediterr¨¢neo.

Por eso la tarde del lunes, y por sorpresa, la exnadadora se pase¨® por el palacio de M¨®naco ¡ªen el que vive la familia Grimaldi¡ª haciendo de gu¨ªa para los distintos turistas que por ¨¦l paseaban. Por supuesto, todo qued¨® convenientemente retratado y se expuso en los canales oficiales del principado. El perfil oficial de Facebook de palacio colg¨® cinco fotograf¨ªas en las que la princesa pasea por el patio, por los salones y por las galer¨ªas del recinto, y en las que posa con ni?os y se abraza a los turistas, que se ven evidentemente sorprendidos por su presencia.

Seg¨²n explica el palacio, la princesa les mostr¨® a los paseantes ¡°los reci¨¦n renovados Grandes Apartamentos del palacio principesco, as¨ª como los frescos renacentistas, que han sido revelados al p¨²blico despu¨¦s de varios a?os de trabajo y restauraci¨®n¡±. Adem¨¢s, Charlene tambi¨¦n acompa?¨® a los visitantes a que conocieran las salas de estar del palacio, acompa?ada de algunos expertos.

El palacio reabri¨® al p¨²blico a principios de julio, coincidiendo con el und¨¦cimo aniversario de boda de la pareja monegasca. Alberto y Charlene de M¨®naco celebraron la efem¨¦ride posando precisamente en estos jardines, que abr¨ªan al p¨²blico (y podr¨¢n visitarse hasta mediados de octubre) despu¨¦s de casi una d¨¦cada de trabajos. Su restauraci¨®n comenz¨® en el a?o 2013, ha empleado a 40 especialistas y se ha visto retrasada por la aparici¨®n de una serie de frescos del Renacimiento escondidos tras varias capas de pintura. La familia Grimaldi ha vivido en ese mismo recinto ¡ªque ha sufrido numerosas reformas, ampliaciones y actualizaciones¡ª desde finales del siglo XII.

Charlene es una de las actuales habitantes de palacio, pero se desconoce cu¨¢nto tiempo pasa en ¨¦l. Es habitual ver a la princesa en Sud¨¢frica, donde estuvo la mayor parte del a?o pasado recuper¨¢ndose de las complicaciones de una infecci¨®n de o¨ªdo. A su regreso, ingres¨® por voluntad propia en un centro de la cercana Suiza para recuperarse de un ¡°profundo agotamiento, tanto emocional como f¨ªsico¡±, seg¨²n revel¨® el propio Alberto en una entrevista con la revista estadounidense People.

En la actualidad, ya recuperada, parece haber vuelto a M¨®naco y est¨¢ retomando t¨ªmidamente su agenda p¨²blica. Sus apariciones son intermitentes pero estables. Hace un mes acompa?¨® a su marido en un viaje oficial a Oslo, en el que pusieron fin a los rumores de crisis con un beso ante los fot¨®grafos. Entonces se confirm¨® su presencia en el Baile de la Rosa, uno de los eventos sociales m¨¢s importantes de Europa. Pero finalmente no acudi¨® al evento filantr¨®pico, presidido por su marido y por la hermana de este, Carolina. Su ausencia fue muy sonada en un evento cuya direcci¨®n art¨ªstica corri¨® este a?o a cargo del dise?ador franc¨¦s Christian Louboutin. La proyecci¨®n medi¨¢tica de Charlene no parece haber perdido fuelle a pesar de haber pasado un tiempo retirada de los focos, de hecho sus ausencias suelen desencadenar la misma cascada de noticias que sus presencias, que son espor¨¢dicas, estudiadas e id¨ªlicas. Como la que ha protagonizado estos d¨ªas, sonriendo entre frescos, turistas y regios salones.