La agenda de la semana: gastronom¨ªa, pistas de baile y un homenaje a la comunidad creativa madrile?a
Este a?o el Madrid Design Festival alarga su programaci¨®n hasta marzo y a¨²n hay tiempo para visitar exposiciones de arquitectos de culto, para comer un men¨² con mucho estilo e incluso para salir a bailar
Comienza la cuarta semana del Madrid Design Festival, que este a?o alarga su programaci¨®n hasta marzo, e incluso en algunos casos, prorroga sus actividades m¨¢s all¨¢ para seguir repartiendo pedazos de dise?o. A¨²n hay tiempo para visitar exposiciones de arquitectos de culto, para comer un men¨² con mucho estilo (y muy buenos productos) e incluso para salir a bailar.
Si febrero se te ha escapado sin darte cuenta y te has dejado en el tintero alguna de las propuestas del festival que te hab¨ªan puesto ojitos cu...
Comienza la cuarta semana del Madrid Design Festival, que este a?o alarga su programaci¨®n hasta marzo, e incluso en algunos casos, prorroga sus actividades m¨¢s all¨¢ para seguir repartiendo pedazos de dise?o. A¨²n hay tiempo para visitar exposiciones de arquitectos de culto, para comer un men¨² con mucho estilo (y muy buenos productos) e incluso para salir a bailar.
Si febrero se te ha escapado sin darte cuenta y te has dejado en el tintero alguna de las propuestas del festival que te hab¨ªan puesto ojitos cuando le¨ªste la programaci¨®n, no te tortures: todav¨ªa est¨¢s a tiempo. El centro Fern¨¢n G¨®mez continuar¨¢ siendo el epicentro del mundo del dise?o en Madrid hasta el 14 de marzo con cuatro de los platos fuertes de esta edici¨®n: Valencia Pavillion, The Future is Design (la preparaci¨®n al s¨²per evento del a?o que viene, cuando Valencia se convierte en la capital mundial del dise?o), MDF portrait (ese homenaje que el festival ha querido hacer a la comunidad creativa madrile?a este a?o), Connected (el hermoso resultado de ese experimento loco en tiempos de confinamiento de creaci¨®n de mesas para nuestros nuevos hogares por videoconferencia) y Emergencia, Dise?os contra la covid-19 (el retrato m¨¢s certero de la importante labor del dise?o en la crisis del coronavirus).
CaixaForum Madrid acoge hasta el 21 de marzo la fant¨¢stica exposicio?n Objetos de deseo. Surrealismo y disen?o, 1924¨C2020, y CentroCentro, Materia gris: nuevos materiales para la era post-f¨®sil, hasta el 9 de Mayo.
Talleres y tiendas contin¨²an abiertas con actividades f¨ªsicas y virtuales, y en algunos casos tambi¨¦n con exposiciones que lanzan sus ¨²ltimas llamadas, como la sede madrile?a de Vitra, donde hasta el 28 de febrero se podr¨¢ ver Tres c¨¢maras indiscretas, una muestra de fotograf¨ªa centrada en interiores arquitect¨®nicos privados y todo aquello que no se ve a simple vista, con las im¨¢genes de Ana Amado, Miguel Guzm¨¢n y Asier Rua.
Coches de arcilla y edificios que son camaleones
Pero, adem¨¢s, el Madrid Design Festival se guardaba algunos ases en la manga para los ¨²ltimos compases de su cuarta edici¨®n. Entre ellos, la esperad¨ªsima exposici¨®n Artesan¨ªa y sostenibilidad, organizada por SACo (Sociedad Artesan¨ªa Contempor¨¢nea) y Mazda, que une dos mundos tan aparentemente antag¨®nicos bajo un espectacular y bell¨ªsimo montaje. Ambas entidades, que ya han trabajado mano a mano en otras ocasiones con el dise?o y el trabajo artesano como puntos comunes, volver¨¢n a hacerlo alrededor de otro valor compartido: la sostenibilidad, que en fondo y forma les empuja hacia la excelencia y la innovaci¨®n.
Que los artesanos utilizan sus manos para amasar, moldear o pintar lo sab¨ªamos. Que muchas veces usan materiales naturales, tambi¨¦n. Lo que nos resulta m¨¢s desconocido y la muestra nos revela es que tambi¨¦n lo hacen, en el proceso de dise?o de sus modelos en la marca de coches Mazda, los veteranos maestros Takumi, moldeando sus prototipos en arcilla. La compa?¨ªa nipona, en cuyo ADN ha estado siempre el cuidado del medioambiente, no solo est¨¢ comprometida en lo que tiene que ver con la eficiencia energ¨¦tica (recientemente ha lanzado un coche 100% el¨¦ctrico con un enfoque sostenible en 360?) sino tambi¨¦n a la hora de la elecci¨®n de sus materiales, como el corcho natural, la piel artificial y un novedoso tejido creado a partir de pl¨¢sticos PET reciclados, totalmente respetuosos. El tel¨®n se abre el 20 de marzo y estar¨¢ en Dimad (Paseo de la Chopera, 14) hasta el 28 de marzo.
Otro de las muestras que se podr¨¢n ver m¨¢s all¨¢ de febrero (concretamente hasta el 9 de mayo) es la que acoge el Museo ICO: Carme Pin¨®s. Escenarios para la vida, la primera retrospectiva de la enorme arquitecta, comisariada por Luis Fern¨¢ndez-Galiano. En ella se repasa su trayectoria a trav¨¦s de obras imperdibles como el Caixaforum de Zaragoza (2014), las Torres Cube (2005/2014), en M¨¦xico, o la Escuela Massana de Artes y Dise?o (2017) en Barcelona, desde el punto de vista de su influencia en las ciudades o en los entornos en las que nacieron.
Comer y bailar, todo es (volver a) empezar
Con Madrid obligada a vivir contra su propia naturaleza de puertas para dentro, el Madrid Design Festival recupera el gusto por dos de las actividades favoritas de los madrile?os: salir a comer y salir a bailar. A partir del 24 de febrero y hasta marzo, Diego Guerrero (con su infinita creatividad) crea toda una experiencia gastron¨®mica usando los productos de Tierra de Sabor. La cecina de Le¨®n, el jam¨®n de Guijuelo o la morcilla de Burgos sirven para homenajear al dise?o espa?ol, en su restaurante en Dspeak, en el barrio de Justicia.
Guillermo Santom¨¢ es el autor de la instalaci¨®n Ciudad Bailar ¡¤ Exagerar en la nave Intermediae Matadero, que durante los pr¨®ximos meses acoger¨¢ todo un programa de actividades relacionadas con la arquitectura, el arte, el baile y el pensamiento.
Con Pista de baile, ¡°una estructura autoportante compuesta por una gran cubierta de cemento suspendida en el aire en cuyo interior una enorme bola de luz cambiante domina el espacio y lo transforma constantemente¡±, Matadero abre una vez m¨¢s sus puertas a la experimentaci¨®n y al di¨¢logo multidisciplinar para seguirle el ritmo a la ciudad. No quemaremos la noche pero, aunque sea -como en el chotis-, para hacerlo cada uno en su baldosa y sin salirse de la raya, se agradece que alguien nos vuelva a sacar a bailar.