¡°El guapo da asco, por lo que tiene que buscar mecanismos para mostrar miserias¡±: ?pueden los c¨®micos ser sexis?
Una nueva generaci¨®n de c¨®micos surge en las redes sociales y rompen con un viejo estereotipo: que un humorista no pod¨ªa ser can¨®nicamente guapo
¡°Creo que si un c¨®mico es demasiado guapo, voy a ser incapaz de creer que vaya a ser bueno. La comedia es para nosotros; es nuestro premio de consolaci¨®n¡±, dijo Conan O¡¯Brien en el podcast WTF de Marc Maron. Conan O¡¯Brien es carism¨¢tico, talentoso, encantador. ?Can¨®nicamente bello? No. El debate acerca de si la belleza y la comedia son enemigas no es nuevo, pero gracias a las redes sociales asistimos a una oleada de nuevas figuras que intentan demostrar que rostros arm¨®nicos, miradas profundas y unos buenos...
¡°Creo que si un c¨®mico es demasiado guapo, voy a ser incapaz de creer que vaya a ser bueno. La comedia es para nosotros; es nuestro premio de consolaci¨®n¡±, dijo Conan O¡¯Brien en el podcast WTF de Marc Maron. Conan O¡¯Brien es carism¨¢tico, talentoso, encantador. ?Can¨®nicamente bello? No. El debate acerca de si la belleza y la comedia son enemigas no es nuevo, pero gracias a las redes sociales asistimos a una oleada de nuevas figuras que intentan demostrar que rostros arm¨®nicos, miradas profundas y unos buenos tr¨ªceps no son necesariamente incompatibles con los chistes. Sin embargo, los c¨®micos m¨¢s agraciados son conscientes de que su f¨ªsico, aunque sea un gran aliado para lograr seguidores y likes, no ayuda necesariamente a despertar risas.
¡°Cuando empec¨¦ a hacer comedia, la gente me convirti¨® en un villano. Hace 20 a?os era diferente, era muy guapo, y la audiencia me odi¨® de forma inmediata. As¨ª que pens¨¦ que era interesante interpretar en su lugar a un villano, porque en las pel¨ªculas es quien interpreta¡±, explica Anthony Jeselnik en una entrevista. Alto y esbelto, con los rasgos esculpidos de un modelo, Jeselnik parece demasiado guapo para ser un c¨®mico. En cierto modo, su buena apariencia marc¨® el rumbo de su carrera. Asegura que cuando empez¨® r¨¢pidamente se dio cuenta de que no pod¨ªa hacer, por ejemplo, chistes autoflagelantes sobre no poder conseguir una novia. Si la comedia se basa en gran parte en resaltar los defectos propios, re¨ªrse de ellos, se?alar nuestra peor parte y celebrar el rid¨ªculo de uno mismo frente al mundo, ?es cre¨ªble que esto lo haga alguien de belleza arrebatadora? ?Es veros¨ªmil que una miss haga de Lina Morgan o un gal¨¢n de Chiquito?
Parece que, en 2023, s¨ª. Al haberse convertido las redes sociales en la nueva plataforma del humor, asistimos al nacimiento de una generaci¨®n de c¨®micos cuya belleza es precisamente el chiste. Es el caso de Matt Rife, que tiene m¨¢s de seis millones de seguidores (es posible que muchos ni siquiera vean sus v¨ªdeos con sonido) y que se jacta en sus shows de que la mayor¨ªa de sus fans son mujeres. Mientras que lo habitual es que los reyes de la comedia suban a sus perfiles sus mon¨®logos, ¨¦l los alterna con v¨ªdeos en los que entrena sin camiseta e im¨¢genes dignas de editorial de moda en las que presume de unos b¨ªceps que merecer¨ªan emprender carrera en solitario. Aunque ¨¦l no ha querido que su espectacular f¨ªsico funcione como una traba, muchos creen que su apariencia es la se?al inequ¨ªvoca de que ahora es necesario ser guapo para ocupar cualquier posici¨®n de ¨¦xito. Algunos, como Conan O¡¯Brien, consideran casi ofensivo que cada vez m¨¢s humoristas tengan unos p¨®mulos tan afilados como su humor.
Hay quien piensa que ser un c¨®mico guapo es un ox¨ªmoron, aunque hemos de reconocer que al consultar al respecto con diversos humoristas, todos han se?alado que el f¨ªsico, en principio, no tendr¨ªa que importar en absoluto. ¡°No debe importar si el contenido es bueno, a no ser que se juegue con elementos del f¨ªsico de manera intencionada. Hay un cap¨ªtulo maravilloso de 30 Rock [en Espa?a se llam¨® Rockefeller Plaza, pero nadie lo recuerda] que habla de la burbuja en la que vive la gente guapa [el protagonista es Jon Hamm] y c¨®mo todo el mundo a su alrededor es m¨¢s indulgente y comprensivo con sus defectos gracias al deslumbramiento que provoca su belleza. Pervive la idea de que las personas bellas son idiotas, cuando en realidad, todas las personas somos idiotas¡±, explica Pepe Colubi, humorista, escritor, periodista y guionista, antes de mencionar a Jeselnik como ejemplo de c¨®mico herc¨²leo, a sabiendas de que se trata de una notable excepci¨®n.
¡°?Es Jim Carrey guapo?¡±, contin¨²a. ¡°?Lo sigue siendo cuando exagera, retuerce y contorsiona sus gestos para lograr imitaciones delirantes? Creo que en comedia tambi¨¦n se juega el fascinante rol de ser tan feo que es guapo, signifique lo que signifique eso¡±, dice. En un texto publicado en la web literaria Lit Hub, la c¨®mica Jena Friedman hace a diversos compa?eros de la profesi¨®n algunas de las preguntas a las que las mujeres que se dedican a la comedia se enfrentan de forma recurrente, y entre ellas, c¨®mo no, est¨¢ la de si los c¨®micos pueden ser sexis. Bob Odenkirk es tajante. ¡°No. Supongo que puede haber algunos que lo sean, s¨®lo para fan¨¢ticos del fetiche. Creo que parte de ser comediante es ser un desvalido, por lo que no puedes ser ni genial, ni sexy... Siempre he pensado que no puedes tener ambas cosas, porque para ser divertido, tienes que burlarte de las convenciones, y la belleza y la sensualidad, muchas veces, se ajustan a un ideal¡±, responde.
Por su parte, el presentador y actor Arturo Valls, curtido en la comedia y cuyo estilo de showman se apoya en la mirada p¨ªcara, asegura que lo que tendr¨ªa que importar es la calidad y la actitud del c¨®mico, pero reconoce a la vez que el papel del triunfador impone una barrera con el p¨²blico y resulta m¨¢s gracioso el perdedor, con quien es m¨¢s f¨¢cil empatizar. ¡°Quiz¨¢s el guapo no ha tenido que desarrollar en su vida el arma de la simpat¨ªa, ni ha tenido que ser gracioso, porque tiene un terreno ganado a nivel social. En el mundo actoral y del entretenimiento, habr¨¢ gente guapa que habr¨¢ aprovechado su belleza para ser el gal¨¢n o el protagonista de comedias rom¨¢nticas, no para ir a los bares a hacer mon¨®logos¡ Lo que est¨¢ claro es que el guapo da asco, por lo que tiene que buscar mecanismos para mostrar miserias y que la gente conecte. Creo que lo tiene quiz¨¢s m¨¢s f¨¢cil el feo en este sentido, porque el guapo tiene que buscar maneras para que ese f¨ªsico arrebatador no est¨¦ en primer plano ni sea lo m¨¢s importante¡±.
¡°Aunque en principio para hacer humor el f¨ªsico no tendr¨ªa que importar, creo que si eres un ni?o guapo, todo te viene dado, por lo que no tienes que hacer ning¨²n esfuerzo¡±, opina Juan Flahn, director de comedias como Chuecatown y guionista de series como La casa de los l¨ªos. ¡°Si eres guapo, las chicas y los chicos te vienen solos, mientras que los feos, o los que as¨ª nos sentimos, desarrollamos desde peque?os la capacidad de llamar la atenci¨®n, hacernos querer y de que la gente lo pase bien con nosotros, porque de otro modo, no tendr¨ªamos las mismas atenciones que los guapos, cuya cara es suficiente reclamo. Por eso creo que es raro que los c¨®micos sean realmente atractivos, pero las cosas est¨¢n cambiando. Adem¨¢s de la belleza natural, han desarrollado una inteligencia y una facilidad de palabra tal que pueden ser c¨®micos guapos y divertidos¡±.
¡°Creo que ahora la autoparodia ha llegado a tal punto de sofisticaci¨®n e inteligencia que incluso los guapos la practican¡±, contin¨²a Flahn. ¡°Intentan demostrar que todos, tambi¨¦n los guapos, cometen errores similares y tienen complejos e inseguridades. Re¨ªrnos de eso m¨¢s all¨¢ del aspecto f¨ªsico es un don del humor¡±. ¡°La autolesi¨®n humor¨ªstica es incontestable e imbatible, pero el material de un c¨®mico no deber¨ªa reducirse a esa din¨¢mica¡±, sentencia Colubi para finalizar. ¡°Saberse deforme, mostrenco y repulsivo ayuda mucho a la risa, pero hay otros intangibles que compensan tanta miseria: el ingenio, el carisma y la empat¨ªa. Todas son criaturas en el jard¨ªn de la comedia¡±.
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