La patronal acusa de comunista al Gobierno; tambi¨¦n lo hizo con Felipe Gonz¨¢lez
Las ganas de los sindicatos de empresarios de influir cuando no les gusta quienes gobiernan son continuas desde la Transici¨®n
No es ¨¦sta la primera vez en que una patronal califica de comunista a un Gobierno. Ya se lo llamaron a Felipe Gonz¨¢lez en 1982: que llegaba con un programa ¡°que ten¨ªa un aut¨¦ntico objetivo de cambio, pero de cambio en aspectos esenciales de nuestro modelo de sociedad que lo aproxima en gran medida a los modelos marxistas de Europa del Este¡±. Ver para creer. Hay numerosos ejemplos m¨¢s del desbarre patrona...
No es ¨¦sta la primera vez en que una patronal califica de comunista a un Gobierno. Ya se lo llamaron a Felipe Gonz¨¢lez en 1982: que llegaba con un programa ¡°que ten¨ªa un aut¨¦ntico objetivo de cambio, pero de cambio en aspectos esenciales de nuestro modelo de sociedad que lo aproxima en gran medida a los modelos marxistas de Europa del Este¡±. Ver para creer. Hay numerosos ejemplos m¨¢s del desbarre patronal a lo largo del tiempo. Quiz¨¢ la pen¨²ltima ocasi¨®n fue un duro informe de la CEOE del a?o 2021 contra la reforma laboral de Pedro S¨¢nchez y Yolanda D¨ªaz: se trataba de una reforma que, dec¨ªan, tiene una ¡°profunda raigambre ideol¨®gica¡±, promueve ¡°un abordaje marxista del mercado laboral¡± y resulta ¡°intervencionista, regresiva y desalineada con las necesidades del tejido empresarial¡±. Ya se puede hacer un balance.
Las ganas de influir de las patronales, cuando no les gusta quienes gobiernan, son continuas desde el inicio mismo de la Transici¨®n. No hay que olvidar que las patronales son sindicatos de empresarios, que defienden los intereses de estos ¨²ltimos.
La pasada semana, la patronal de las peque?as y medianas empresas (CEPYME) celebr¨® su asamblea anual. All¨ª se present¨® un manifiesto por la libertad empresarial. Sus contenidos, las palabras de su presidente, Gerardo Cuerva, y las de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso (perejil en todas las salsas), fueron bastante coincidentes: contra el intervencionismo gubernamental y contra la estigmatizaci¨®n de la figura del empresario, llamando a hacer una ¡°defensa activa¡± de ¨¦ste. Cuerva explic¨® que est¨¢ demostr¨¢ndose que hay poco espacio para la empresa privada ante un Gobierno ¡°que adopta tesis comunistas¡±. Y enardeci¨® a los suyos recordando una frase de Jos¨¦ Mar¨ªa Cuevas, un mito del asociacionismo empresarial en Espa?a: ¡°No nos escuchan, quiz¨¢ es hora de tocar los tambores¡±.
Desde el principio de la Transici¨®n (la fundaci¨®n de CEOE fue en junio de 1977), sus principales dirigentes se enfrentaron con Adolfo Su¨¢rez y su vicepresidente econ¨®mico, Enrique Fuentes Quintana (al que quer¨ªan ¡°achatarrar¡±), en apoyo de la franquista Alianza Popular. La profesora de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona Carme Molinero lo cuenta muy bien en su trabajo Empresarios a la b¨²squeda de partido: las conflictivas relaciones entre la CEOE y el Gobierno de Su¨¢rez: la patronal no ten¨ªa a¨²n la fuerza organizativa imprescindible para convertirse en un grupo de presi¨®n pol¨ªtica, por lo que decidi¨® pasar a la ofensiva utilizando las herramientas propias del movimiento obrero, como la presencia en el espacio p¨²blico para agrupar a los empresarios y obtener interlocuci¨®n con el Gobierno. Desde el mes de noviembre y hasta febrero de 1978, la CEOE organiz¨® grandes concentraciones de ¡°Afirmaci¨®n empresarial¡± (bajo el lema de ¡°?Reaccionemos!¡±); en la de Madrid se lleg¨® a calificar el proyecto de reforma fiscal de ¡°terrorismo de Estado¡±.
La patronal fue disponiendo de notables recursos econ¨®micos; pudo contratar a la empresa Sofemasa para realizar encuestas previas a las elecciones y adaptarse al terreno de juego (por ah¨ª aparece el gur¨² Pedro Arriola). Por ejemplo, los empresarios gallegos hicieron una intensa campa?a en las elecciones auton¨®micas de la comunidad bajo el eslogan de ¡°?Queremos que se sepa que no somos neutrales!¡±. Pero la intervenci¨®n m¨¢s agresiva fue la de los empresarios andaluces en la que de una manzana surg¨ªa un gusano con una hoz y un martillo, representativo del marxismo del PSOE.
Con la diluci¨®n de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico desapareci¨® la acci¨®n directa que la CEOE hab¨ªa desarrollado desde la instauraci¨®n de la democracia. La mayor¨ªa absoluta socialista de 1982, con una Alianza Popular todav¨ªa incapaz de presentarse como alternativa, llev¨® a las patronales ¡ªcon los poderes econ¨®micos al frente¡ª a considerar que le conven¨ªa ¡°amansar y civilizar a la grey socialista m¨¢s que enfrentarse con ella¡±, en palabras de Fabi¨¢n M¨¢rquez, uno de los asesores laborales m¨¢s significativos de la c¨²pula patronal.
El manifiesto de CEPYME recuerda m¨¢s a aquellos tiempos que a estos.
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