Obama resiste las presiones para entregar armas a Ucrania
Crecen las voces que piden conceder ayuda militar letal a Kiev
La escalada b¨¦lica en el este de Ucrania coloca a Barack Obama ante un dilema. El presidente de Estados Unidos y su equipo debaten si mantener la estrategia de sanciones econ¨®micas contra Rusia por su papel desestabilizador en Ucrania o abrir un nuevo frente con la entrega de armamento al Ej¨¦rcito ucranio para su lucha contra los separatistas prorusos.
Los partidarios de la segunda v¨ªa esgrimen que las penalizaciones han hecho mella en la econom¨ªa rusa, pero no han disuadido al Gobierno de Vlad¨ªmir Putin de respaldar militarmente a los separatistas ni han frenado sus ansias expansionistas. Los defensores de la primera opci¨®n -hasta ahora mayoritarios en la Administraci¨®n- alegan que un apoyo militar directo disparar¨ªa la tensi¨®n y evocar¨ªa el clima de confrontaci¨®n de la Guerra Fr¨ªa.
No creemos que la respuesta a la crisis en Ucrania sea simplemente entregar m¨¢s armas" Ben Rhodes, viceasesor de seguridad de la Casa Blanca
Hasta ahora, el dem¨®crata Obama ha sido partidario de una respuesta cauta y coordinada con la Uni¨®n Europea. A finales de diciembre, firm¨® una ley del Congreso que le permite ampliar las represalias a Rusia y conceder ayuda militar letal a Ucrania, pero declin¨® hacerlo por las ¡°circunstancias¡± del momento.
Fuentes oficiales, citadas por medios estadounidenses, dijeron este lunes que la Administraci¨®n analiza la posibilidad de proporcionar armas a Ucrania dentro del abanico de opciones en su estrategia contra Rusia. Pero uno de los asesores m¨¢s pr¨®ximos a Obama subray¨® que esa posibilidad tiene por ahora poco recorrido. ¡°Seguimos creyendo que la mejor forma de influenciar los c¨¢lculos de Rusia es a trav¨¦s de sanciones econ¨®micas¡±, dijo el viceasesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Ben Rhodes, en declaraciones a la cadena televisiva CNN. ¡°No creemos que la respuesta a la crisis en Ucrania sea simplemente entregar m¨¢s armas¡±.
Sin embargo, el hecho de que haya deliberaciones evidencia la frustraci¨®n en el Gobierno por la evoluci¨®n del conflicto. El tiempo incomoda: se acerca el primer aniversario de la invasi¨®n rusa de la pen¨ªnsula de Crimea, y la calma no se ha restablecido tras siete rondas de sanciones de EE UU y la UE y varios acercamientos diplom¨¢ticos con Mosc¨². Es una frustraci¨®n extendida en Washington: crecen las voces en el Congreso, y de destacados exaltos cargos dem¨®cratas y republicanos que presionan a Obama para que autorice la entrega de armas a Kiev, que lo solicita desde hace meses.
Un grupo de destacados exaltos cargos pol¨ªticos y militares pide que EE UU entregue armas al Ej¨¦rcito ucranio para disuadir a Rusia en su apoyo a los separatistas
Una de esas voces es la John Herbst, que fue embajador de EE UU en Ucrania entre 2003 y 2006, durante la presidencia de George W. Bush y las protestas prodemocr¨¢ticas de la llamada Revoluci¨®n Naranja. ¡°Mientras sus agresiones [de Putin] le den victorias f¨¢ciles, no tiene ning¨²n motivo para parar. Le tenemos que dar una raz¨®n para parar y por eso tenemos que dar armas a Ucrania¡±, esgrime en una entrevista con EL PA?S en la sede de Atlantic Council, un laboratorio de ideas en Washington del que es analista desde el pasado abril.
Herbst -que en 2010 puso fin a 31 a?os de servicio diplom¨¢tico en el Departamento de Estado, que incluyeron etapas en Rusia y Asia Central- es uno de los ocho autores de un informe, presentado este lunes, que aboga porque la Administraci¨®n Obama conceda armamento y equipaci¨®n militar a Ucrania por valor de 1.000 millones de d¨®lares anuales hasta 2017.
Algunos de los autores presentar¨¢n el documento al vicepresidente de EE UU, Joe Biden, en una se?al de que la Administraci¨®n est¨¢ abierta a cambios
El paquete incluir¨ªa lanzamisiles con fines defensivos, drones de vigilancia, veh¨ªculos armados y radares que detectan fuego enemigo. Un 70% de las bajas de las fuerzas ucranias son causadas por el impacto de misiles y balas, seg¨²n el documento. Hasta ahora, EE UU ha proporcionado alrededor de 300 millones de d¨®lares en ayuda militar no letal a Ucrania, incluyendo cascos, chalecos antibalas, mantas, veh¨ªculos y radares.
El informe pide que los artefactos que proporcionar¨ªa EE UU puedan ser operados plenamente por el Ej¨¦rcito de Kiev. El objetivo es evitar que haya tropas estadounidenses o de la OTAN en territorio ucranio, lo que disparar¨ªa la tensi¨®n al asemejarse a un conflicto directo entre Occidente y Rusia. Los autores creen que si EE UU toma la iniciativa, Canad¨¢, Reino Unido, Polonia y los pa¨ªses b¨¢lticos podr¨ªan entregar tambi¨¦n armas a Ucrania.
Algunos de los autores presentar¨¢n esta semana el documento al vicepresidente de EE UU, Joe Biden, seg¨²n revela Herbst. Es otra se?al de que la Administraci¨®n est¨¢ abierta a analizar cambios en su estrategia. Biden visit¨® Ucrania en abril y noviembre, y es el principal interlocutor de la Casa Blanca con el Gobierno ucranio. El secretario de Estado, John Kerry, viaja el jueves a Kiev. Ese mismo d¨ªa se re¨²nen en Bruselas los ministros de defensa de la OTAN. Y el lunes, Obama se ver¨¢ en Washington con la canciller alemana, Angela Merkel, su interlocutora en esta crisis.
Mientras sus agresiones [de Putin] le den victorias f¨¢ciles, no tiene ning¨²n motivo para parar. Le tenemos que dar una raz¨®n para parar y por eso tenemos que dar armas a Ucrania" John Herbst, exembajador de EE UU en Ucrania
El documento est¨¢ promovido por Atlantic Council y otros dos think tanks, Brookings Institution y Chicago Council on Global Affairs. Entre los firmantes est¨¢ Michele Flournoy, una exalta cargo del Pent¨¢gono en las ¨²ltimas d¨¦cadas y que son¨® para ser la nueva secretaria de Defensa de Obama; James Stavridis, comandante supremo de la OTAN entre 2009 y 2013; e Ivo Daalder, embajador de EE UU en la Alianza Atl¨¢ntica durante el mismo per¨ªodo. Completan el elenco Strobe Talbott, n¨²mero dos del Departamento de Estado en los a?os 90; Charles Wald, comandante adjunto del Comando Europeo del Ej¨¦rcito entre 2002 y 2006; Jan Lodal, exalto cargo en la Casa Blanca y el Pent¨¢gono en los a?os 60 y 70; y Steven Pifer, embajador en Kiev entre 1998 y 2000.
El informe argumenta que solo si el Kremlin percibe un alto coste en sus acciones en Ucrania buscar¨¢ una soluci¨®n pac¨ªfica. Mosc¨² niega las acusaciones europeas y estadounidenses de que proporciona armas y entrenamiento a los rebeldes prorusos. ¡°Putin tiene mucho miedo a las bajas. Si proporcionas un apoyo militar serio a Ucrania el riesgo de bajas [rusas] crece y eso es muy peligroso para su posici¨®n pol¨ªtica. Es disuasivo¡±, aduce Herbst. ¡°La gente rusa no quiere que sus soldados luchen y mueran en Ucrania. As¨ª que si hay m¨¢s bajas ser¨¢ dif¨ªcil de esconder para Putin¡±.
El exembajador no cree que la entrega de armas dispare la tensi¨®n, sino que es el mejor modo de rebajarla. ¡°El Kremlin ya ha escalado su agresi¨®n en Ucrania cuatro o cinco veces. Y eso sin recibir Ucrania ning¨²n gran apoyo militar¡±, afirma. ¡°Pero, aunque se escalara [la tensi¨®n], no ser¨ªa malo para nosotros porque sus ambiciones [de Putin] van m¨¢s all¨¢ de Ucrania. Si logra con un bajo coste sus objetivos en Ucrania, eso le alentar¨¢ a hacer algo provocativo en otros pa¨ªses, como en Moldavia, Georgia, Kazajst¨¢n o incluso los estados b¨¢lticos¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.