¡°Los partidos se han olvidado de los j¨®venes, los han abandonado¡±

Carteles electorales que huelen a rancio, lenguaje de otra ¨¦poca, promesas vac¨ªas. As¨ª perciben la mayor¨ªa de j¨®venes mexicanos la pol¨ªtica de su pa¨ªs. Oyen hablar de las elecciones intermedias del 7 de junio y, como si se tratara de un reflejo involuntario, ponen los ojos en blanco. Existe entre ellos la convicci¨®n de que las cosas tienen que cambiar, el remordimiento de no hacer lo suficiente, de estar perdidos. Una palabra se repite: desconexi¨®n.

Mar¨ªa Valdez, arquitecta de 25 a?os, lamenta que los partidos pol¨ªticos y los j¨®venes sean dos ideas excluyentes: "Si en alg¨²n punto se unen es por la existencia de un conflicto". "Somos una parte inc¨®moda de la sociedad, cuando levantamos un poco la voz tratan de ignorar que estamos ah¨ª. No nos tienen en sus planes, ni siquiera discursivos, mucho menos legislativos", apunta segura Melisa Sandoval, licenciada en comunicaci¨®n y de la misma edad que Valdez.

Pese al descontento generalizado, el 80% de los j¨®venes mexicanos cree que que es conveniente participar en unas elecciones

El coordinador del seminario de Investigaci¨®n en Juventud de la Universidad Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM), Jos¨¦ Antonio P¨¦rez Islas explica que los partidos se han quedado anticuados y observan a los j¨®venes solo desde un punto de vista utilitario, como mano de obra "barata". Y va m¨¢s all¨¢: "Los han abandonado, ninguno tiene una propuesta juvenil real, solo hablan de educaci¨®n, deporte y drogas. No se han planteado qu¨¦ necesitan realmente".

Pese al descontento generalizado, el 80% de los j¨®venes mexicanos cree que que es conveniente participar en unas elecciones, seg¨²n las cifras de la ¨²ltima Encuesta Nacional de Juventud (2010). Sin embargo, P¨¦rez Islas, que ha coordinado tambi¨¦n estudios de este tipo, explica que la abstenci¨®n es muy alta entre la poblaci¨®n de entre 25 y 29 a?os (alrededor de un 70%). No ocurre lo mismo con todos los rangos de edad. Los que tienen la opci¨®n de votar por primera vez, o de las primeras veces, lo hacen en su mayor¨ªa. El problema, seg¨²n se?ala P¨¦rez, es que a partir de los 20 a?os la participaci¨®n cae en picado.

En un pa¨ªs en el que hay m¨¢s de 36 millones de personas entre 12 y 29 a?os, un 30% ¡ªuna cifra muy superior a la mayor¨ªa de pa¨ªses de la OCDE¡ª sorprende que las propuestas juveniles escaseen en los programas electorales. Seg¨²n la mayor¨ªa de los entrevistados (15 j¨®venes), los partidos pol¨ªticos no han sabido c¨®mo gestionar sus preocupaciones diarias.

Una de ellas es la vivienda, en M¨¦xico un 40% de los que tienen entre 20 y 29 a?os todav¨ªa vive con sus padres. Otra m¨¢s importante es el empleo. En 2012, Corea y M¨¦xico presentaron tasas de desempleo m¨¢s altas entre los adultos con educaci¨®n superior de todos los pa¨ªses de la OCDE y con una diferencia todav¨ªa m¨¢s marcada entre los adultos j¨®venes (de 25 a 34 a?os): el 6,7% de los graduados de educaci¨®n superior y el 4,5% de los j¨®venes adultos con educaci¨®n por debajo de la ense?anza media superior est¨¢n desempleados.

Adriana Ortega, de 26 a?os y licenciada en Relaciones Internacionales, no pudo soportar ver el cartel electoral de un candidato del PRI-Partido Verde en su delegaci¨®n (Benito Ju¨¢rez, Distrito Federal). "Xiuh Tenorio tuvo la idea de hacer un eslogan pidiendo que envi¨¢ramos el curr¨ªculum. Y s¨ª, vale. Tenemos un problema de desempleo, pero que no nos tomen por tontos". Otro de ellos, Luis Pacheco, periodista de 25 a?os, les echa un capote a los pol¨ªticos: "Pese a todo, vemos que las campa?as se acercan a la calle y se esfuerzan por convencer a los ciudadanos. Las cosas han cambiado mucho desde el a?o 2000, ahora saben que el voto del ciudadano pesa".

No nos tienen en sus planes, ni siquiera discursivos, mucho menos legislativos Melisa Sandoval, de 25 a?os, licenciada en comunicaci¨®n

Jos¨¦ Antonio P¨¦rez Islas reconoce que la reforma de la educaci¨®n, llevada a cabo por el Gobierno de Pe?a Nieto en 2012 ¡ªque, entre otras cosas ofrece acceso universal y gratuito hasta bachiller o preparatoria a nivel nacional¡ª fue un paso importante. Aunque matiza: "El problema es que a nadie se le ha ocurrido plantearse qu¨¦ tipo de escuela necesitan, si se deber¨ªa mantener el mismo sistema educativo, los contenidos, unos salones de clases que parecen del siglo XIX, profesores que piensan que poseen el conocimiento total". Y, resume: "El tema de la educaci¨®n se trata desde una perspectiva antigua".

En la televisi¨®n, en las calles, se ven candidatos j¨®venes. Pero tampoco convencen. "Hasta ellos hablan y act¨²an con cabeza de adulto. Cuando toman el poder dejan de lado el tema juvenil, se vuelven unos bur¨®cratas", asegura P¨¦rez Islas. Luis Pacheco explica que el problema ha sido la comunicaci¨®n: "No han sabido explicarnos c¨®mo nos pueden beneficiar sus medidas". Hasta los partidos que acaban de nacer, los han dejado de lado, seg¨²n el pofesor, y pone el ejemplo de Morena.

Las encuestas que publica el diario El Financiero, y realizadas por la agencia Parametr¨ªa, se?alan que los universitarios se decantan m¨¢s por el conservador Partido Acci¨®n Nacional, mientras que los de menos escolaridad prefieren al Partido Revolucionario Institucional (el que actualmente gobierna el pa¨ªs). "Una parte importante de universitarios han apoyado siempre a la derecha porque al final son una ¨¦lite los que tienen acceso a la educaci¨®n superior", asegura P¨¦rez Islas.

La mayor¨ªa ve las elecciones como un espect¨¢culo que ocurre ajeno a ellos. Con otros espectadores. Pero se sienten responsables. "Hay inquietudes desorganizadas, nos hace falta canalizar la voluntad de arreglar las cosas en algo que de verdad genere cambio", sentencia Valdez.

Casi todos aseguran que ir¨¢n a votar. Pero a dos semanas de la fecha electoral, confiesan no saber a qui¨¦n. Desilusionados, arrojar¨¢n su papeleta dentro de la urna, con la esperanza de que alg¨²n d¨ªa se les devuelva el favor.