La lucha sagrada entre ¡®beb¨¦s sumo¡¯ que hace las delicias de los padres japoneses
Los progenitores acuden a un ritual de cuatro siglos de antig¨¹edad para que "sus reto?os crezcan fuertes y sanos" a golpe de llanto
Dos beb¨¦s llorando enfrentados el uno al otro y sostenidos por una pareja de sumos forzudos. Esta ceremonia, que se celebra por todo Jap¨®n desde hace cuatro siglos, es una pr¨¢ctica extendida entre la poblaci¨®n del pa¨ªs asi¨¢tico. El pasado domingo 14 de mayo, m¨¢s de cien reto?os se dieron cita en el recinto de sagrado Kamegaike Hachimangu en la localidad de Sagamihara, al oeste de Tokio. "Mi peque?o ha llorado desde el principio y me he sentido un poco mal", relat¨® a AFP Tomoyo Watanabe, madre de Zentaro. "Pero en cuanto vi que lloraba supliqu¨¦ por ¨¦l para que pueda crecer sano y fuerte", a?adi¨®.?
El deseo de los padres contrasta con las l¨¢grimas de sus hijos que no paran de gimotear y berrear mientras son zarandeados con delicadeza en los brazos de varios sumos adultos. A los beb¨¦s se les viste para la ocasi¨®n con un diminuto cintur¨®n que rodea sus cinturas y sirve de sost¨¦n de un peque?o delantal que les llega hasta los pies. "La creencia sostiene que el llanto de los beb¨¦s expulsa los demonios y les protege de futuros problemas", explic¨® Hiroyki Negishi, uno de los sacerdotes que dirigi¨® el ritual.
La ceremonia de Sagamihara comenz¨® en 2011. En ella, los beb¨¦s son acompa?ados, en primer lugar, por sus padres y abuelos al altar Shinto donde se les purifica antes de ser expuestos a padres y curiosos. La pr¨¢ctica del beb¨¦ sumo llor¨®n var¨ªa seg¨²n la regi¨®n del pa¨ªs, pero solo puede celebrarse en espacios y templos sagrados.
En algunos sitios los padres prefieren que sus hijos lloren nada m¨¢s empezar el oficio ancestral. En otros, sin embargo, el primer ni?o en soltar las primeras l¨¢grimas se convierte en el perdedor del combate. El sumo, tambi¨¦n entre los m¨¢s peque?os, sigue siendo el deporte nacional por excelencia de Jap¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.