El Papa dice que la difusi¨®n de noticias falsas es diab¨®lica

La obsesi¨®n por la comunicaci¨®n del papa Francisco, que ha transformado completamente la manera de difundir el mensaje de la Iglesia y de la Santa Sede, no pod¨ªa dejar de lado la ¨²ltima gran plaga del periodismo: las fake newsy la manipulaci¨®n informativa. De este modo, el d¨ªa de San Francisco de Sales, patr¨®n de la profesi¨®n, el papa Francisco se refiri¨® al fen¨®meno de las noticias falsas y lo relacion¨® con ¡°la codicia¡± y la ¡°sed de poder¡± del ser humano. Fue en un mensaje difundido por la Santa Sede con ocasi¨®n de la celebraci¨®n, el 13 de mayo, de la jornada mundial de las comunicaciones sociales.

Francisco cuenta con asesores y un experto en el ramo que dirige la Prefectura de la Comunicaci¨®n. Pero sigue siendo sorprendente escuchar a un Papa de 81 a?os, que ni siquiera ve la televisi¨®n, hablando de viralidad y dem¨¢s conceptos t¨¦cnicos que explican la construcci¨®n y difusi¨®n de informaci¨®n en redes. Pero, en el fondo, dio a entender, estas cosas han sucedido siempre y llev¨® el discurso a su terreno comparando su uso con la historia b¨ªblica del diablo que, en forma de serpiente, ofrece a Eva comer el fruto del ¨¢rbol prohibido a trav¨¦s de enga?os e informaci¨®n falsa.

Mensaje a los periodistas

¡°Las fake news se convierten a menudo en virales, es decir, se difunden de modo veloz y dif¨ªcilmente manejable, no a causa de la l¨®gica de compartir que caracteriza a las redes sociales, sino m¨¢s bien por la codicia insaciable que se enciende f¨¢cilmente en el ser humano¡±. El Papa, que es v¨ªctima cada semana de informaciones falsas relacionadas con sus luchas con parte de la curia ¡ªalgunas de esas son ciertas¡ª, su estado de salud o ex¨®ticas actitudes pol¨ªticas aludi¨® claramente a las ¨²ltimas campa?as electorales en Europa y EE UU y asegur¨® que ¡°las mismas motivaciones econ¨®micas y oportunistas de la desinformaci¨®n tienen su ra¨ªz en la sed de poder¡±.

Pero tambi¨¦n hubo un mensaje para los periodistas y los nuevos m¨¦todos de producci¨®n de la informaci¨®n, tantas veces basados en las audiencias, la velocidad y la falta de rigor. A los medios de comunicaci¨®n les otorg¨® ¡°un compromiso especial¡± para evitar la expansi¨®n de la desinformaci¨®n y record¨® que ¡°en el centro de la noticia no est¨¢ la velocidad en darla y el impacto sobre las cifras de audiencia, sino las personas¡±.

La soluci¨®n no est¨¢ clara ni desde la infalibilidad papal. Pero Francisco hizo una referencia velada a la admisi¨®n de culpa de multinacionales como Facebook y a las medidas que ¡°han puesto en marcha las compa?¨ªas tecnol¨®gicas y medios de comunicaci¨®n, dirigidas a definir nuevos criterios para la verificaci¨®n de las identidades personales que se esconden detr¨¢s de millones de perfiles digitales¡±. Para los que relativizan la trascendencia de la manipulaci¨®n informativa, el Pont¨ªfice advirti¨® que ¡°ninguna desinformaci¨®n es inocua¡± y que ¡°incluso una distorsi¨®n de la verdad aparentemente leve puede tener efectos peligrosos¡±.

Seg¨²n opin¨®, ¡°el drama de la desinformaci¨®n es el desacreditar al otro, presentarlo como enemigo, hasta llegar a la demonizaci¨®n que favorece los conflictos¡±. Y en esta l¨ªnea consider¨® que las noticias falsas revelan ¡°la presencia de actitudes intolerantes e hipersensibles al mismo tiempo, con el ¨²nico resultado de extender el peligro de la arrogancia y el odio¡±. ¡°La verdad os har¨¢ libres¡±, concluy¨®, recordando el t¨ªtulo del documento y a?adiendo que es responsabilidad de los periodistas ser ¡°protectores de las noticias¡±.