El ¡®meme¡¯ de Bernie Sanders, un negocio millonario
El senador recauda 1,8 millones de d¨®lares por la venta de mercader¨ªa con la fotograf¨ªa viralizada que le tomaron en la investidura de Biden
A los oportunos que alcanzaron a comprar la sudadera con la imagen de Bernie Sanders abrigado hasta las orejas en la investidura de Joe Biden les aparece una advertencia al finalizar el pedido online: el despacho puede tardar entre seis y ocho semanas debido al exceso de demanda. Cuando las pusieron a la venta el mi¨¦rcoles pasado se agotaron en menos de media hora. El fin de semana el equipo del senador socialista volvi¨® a ofrecer la sudadera por 45 d¨®lares (37 euros) en la p¨¢gina oficial y agre...
A los oportunos que alcanzaron a comprar la sudadera con la imagen de Bernie Sanders abrigado hasta las orejas en la investidura de Joe Biden les aparece una advertencia al finalizar el pedido online: el despacho puede tardar entre seis y ocho semanas debido al exceso de demanda. Cuando las pusieron a la venta el mi¨¦rcoles pasado se agotaron en menos de media hora. El fin de semana el equipo del senador socialista volvi¨® a ofrecer la sudadera por 45 d¨®lares (37 euros) en la p¨¢gina oficial y agreg¨® camisetas por 27 d¨®lares (22 euros). El lunes ya no quedaba rastro de la mercanc¨ªa, pero s¨ª de las cuantiosas ganancias. El equipo de Sanders inform¨® este mi¨¦rcoles que recaudaron 1,8 millones de d¨®lares, un monto que ser¨¢ destinado a organizaciones ben¨¦ficas de su natal Vermont.
La fotograf¨ªa tomada en la jura de Biden activ¨® r¨¢pidamente un ej¨¦rcito de creativos de internet que la convirtieron en cientos de memes que volvieron viral. El senador, que aparece sentado de brazos cruzados con una gruesa chaqueta, unos guantes tejidos y su tapabocas, se convirti¨® desde un personaje en el sof¨¢ de la serie Friends hasta parte del grupo de cient¨ªficos de la Conferencia Solvay de 1927. ¡°Jane [la esposa] y yo quedamos asombrados con toda la creatividad de tanta gente durante la ¨²ltima semana, y estamos contentos de poder usar mi fama en Internet para ayudar a los habitantes de Vermont que lo necesitan¡±, afirm¨® Sanders en un comunicado.
Una parte del dinero recaudado ir¨¢ a Meals on Wheels, un programa que ofrece comidas nutritivas a ancianos y personas con capacidades diferentes en hogares sociales. Otra ir¨¢ a Feeding Chittenden, el banco de alimentos m¨¢s grande de Vermont y una ¨²ltima a Chill Foundation, una organizaci¨®n que intenta reintegrar a los j¨®venes en la sociedad a trav¨¦s del deporte en nieve. Sanders ha advertido que si bien celebra la cantidad de dinero recaudado en su p¨¢gina, esta ¡°no sustituye¡± al trabajo que pueda hacer en el Congreso. ¡°Har¨¦ todo lo que pueda en Washington para asegurarme de que los trabajadores de Vermont y de todo el pa¨ªs obtengan las ayudas que necesitan en medio de la peor crisis que hemos enfrentado desde la Gran Depresi¨®n¡±, apunt¨®.
No solo la p¨¢gina web del veterano senador ha generado ganancias con fines ben¨¦ficos a ra¨ªz de su imagen. Tobey King, una mujer de 46 a?os residente de Texas, teji¨® un mini Bernie a crochet, con su mini chaqueta verde militar, unas mini manoplas y una mini mascarilla. Cuando la imagen de Sanders se viraliz¨®, decidi¨® poner a la venta el mu?eco en eBay. El objeto se ir¨ªa al mejor postor. El precio final fue de 20.300 d¨®lares, un monto que eBay duplic¨® con el fin de aportar a la causa, y el precio total ascendi¨® a 40.600. El esposo de King perdi¨® su trabajo debido a la pandemia, y desde entonces ella ha estado vendiendo mu?ecos de lana e hilo para ayudar a su familia.
En 2016, cuando Sanders perdi¨® las elecciones primarias contra Hillary Clinton, una profesora de escuela primaria de Vermont le regal¨® al senador unos guantes tejidos por ella. Cuatro a?os despu¨¦s, le lleg¨® una avalancha de solicitudes para que replicara esos guantes. Eran miles de seguidores del excandidato presidencial que quer¨ªan cubrirse las manos con las mismas manoplas que todo el mundo vio en las redes sociales tras la investidura. Pero la maestra Jen Ellis ya no tej¨ªa guantes y tampoco se mostr¨® dispuesta a renunciar a su trabajo para responder a los pedidos. ¡°Soy profesora y soy mam¨¢, y todo eso me mantiene muy ocupada. No hay forma posible de que pueda hacer 6.000 pares de manoplas, y cada vez que entro en mi correo electr¨®nico, tengo pedidos de varios cientos de personas¡±, narr¨® a Jewish Insider.
Las marcas de la ropa que llevaba Sanders aquel d¨ªa festejaron la publicidad gratuita. La explicaci¨®n del senador, sin embargo, puede no haber sido la mejor rese?a. ¡°En Vermont nos vestimos para no pasar fr¨ªo, no nos preocupa la moda¡±.