H&M y Nike afrontan la ira de China por criticar la situaci¨®n de los uigures en Xinjiang

El gigantesco establecimiento de la cadena de ropa H&M en Sanlitun, una de las zonas m¨¢s acomodadas en el centro de Pek¨ªn, suele tener un flujo ininterrumpido de compradores y curiosos, pero este jueves estaba vac¨ªo. Una circunstancia similar se daba en Nike, su vecina en el mismo centro comercial. Las mismas escenas se repet¨ªan en las tiendas de ambas marcas en las principales ciudades de China. En el caso de la firma sueca, tampoco era posible encontrar sus prendas en Taobao ni JD.com, las principales plataformas de comercio electr¨®nico en el gi...

El gigantesco establecimiento de la cadena de ropa H&M en Sanlitun, una de las zonas m¨¢s acomodadas en el centro de Pek¨ªn, suele tener un flujo ininterrumpido de compradores y curiosos, pero este jueves estaba vac¨ªo. Una circunstancia similar se daba en Nike, su vecina en el mismo centro comercial. Las mismas escenas se repet¨ªan en las tiendas de ambas marcas en las principales ciudades de China. En el caso de la firma sueca, tampoco era posible encontrar sus prendas en Taobao ni JD.com, las principales plataformas de comercio electr¨®nico en el gigante asi¨¢tico.

?La raz¨®n a esta s¨²bita alergia de los consumidores chinos a esos productos, que amenaza con extenderse a otras firmas de moda, incluidas Inditex y Adidas? Que H&M y Nike declaran no utilizar en sus prendas algod¨®n de Xinjiang. La regi¨®n, hogar de la minor¨ªa uigur, produce el 87% de ese material en China y un informe del centro de estudios australiano Aspi Institute denuncia que para cosecharlo se emplea mano de obra forzada de centenares de miles de uigures y otras minor¨ªas.

La decisi¨®n de ambas multinacionales no es nueva. La sueca lo anunci¨® en un comunicado el a?o pasado, en el que expresaba su ¡°preocupaci¨®n¡± por las denuncias de trabajos forzados en Xinjiang. Los medios chinos se hicieron eco, en su momento, de aquellas declaraciones. Nike, por su parte, hab¨ªa publicado una declaraci¨®n ¡ªsin fecha clara¡ª en la que tambi¨¦n se declaraba ¡°preocupada por los informes de trabajos forzosos en la regi¨®n aut¨®noma uigur de Xinjiang y en conexi¨®n con ella¡±. La firma de ropa de deporte estadounidense era tajante: ¡°No utilizamos productos procedentes de esa regi¨®n, hemos confirmado con nuestros suministradores que no utilizan textiles ni madejas procedentes de esa regi¨®n¡±.

Pero una cuenta de la Liga de J¨®venes Comunistas en las redes sociales chinas rescat¨® la declaraci¨®n de H&M el mi¨¦rcoles, dos d¨ªas despu¨¦s de que la Uni¨®n Europea anunciara sus primeras sanciones contra China desde la matanza de Tiananmen, como represalia por las violaciones a los derechos humanos de los uigures en Xinjiang: cuatro altos funcionarios y dos instituciones ver¨¢n congelados los activos que tengan en la UE y no podr¨¢n viajar al bloque. Pek¨ªn respondi¨® de inmediato e impuso a su vez represalias similares sobre diez ciudadanos europeos y cuatro instituciones. China asegura que no se cometen abusos contra los uigures y no se utiliza mano de obra forzada en las plantaciones de algod¨®n en Xinjiang.

En su cuenta de Weibo, el Twitter chino, la Liga escrib¨ªa el mi¨¦rcoles por la ma?ana: ¡°?Difundir rumores para boicotear el algod¨®n de Xinjiang, y al mismo tiempo querer ganar dinero en China? ?Ni en sue?os!¡±, un texto que acompa?aba de pantallazos del comunicado de H&M.

Desde entonces, se produjo una r¨¢pida reacci¨®n en cadena. Los medios estatales chinos ped¨ªan a los consumidores que boicotearan los productos de la multinacional sueca y defend¨ªan el algod¨®n de Xinjiang. Sus prendas desaparecieron de las plataformas de comercio electr¨®nico. Actores famosos, como Wang Yibo ¡ªcon 38 millones de seguidores en Weibo¡ª, romp¨ªan sus contratos de representaci¨®n con Nike. Aplicaciones de b¨²squeda de servicios, como Dianping ¡ªequivalente a la red social de Yelp¡ª, borraban los resultados en los que aparecieran comercios de las firmas bajo sospecha.

La cadena de televisi¨®n CGTN, el brazo internacional de la estatal CCTV, ha mostrado un v¨ªdeo en Weibo en el que muestra lo que asegura que es la realidad de la cosecha del algod¨®n en Xinjiang, automatizada, y en la que un campesino uigur afirma que la gente se disputa trabajar en ese sector debido a los altos sueldos. La etiqueta ¡°Yo apoyo el algod¨®n de Xinjiang¡± es la tendencia n¨²mero uno en Weibo, donde ya ha recibido m¨¢s de 1.800 millones de visitas.

Por su parte, H&M ha respondido tambi¨¦n en Weibo con un comunicado en el que asegura que ¡°no representa ninguna postura pol¨ªtica¡± y ¡°siempre respeta a los consumidores chinos¡±.

No es la primera vez que los consumidores chinos arremeten contra una marca extranjera en protesta por lo que consideran un insulto. La firma de moda Dolce & Gabbana tuvo que pedir disculpas y cancelar un gran desfile en Shangh¨¢i en 2018 despu¨¦s de lanzar un anuncio visto como sexista y tras los comentarios despectivos de uno de sus fundadores, Stefano Gabbana, hacia China.

Pek¨ªn tambi¨¦n ha sabido jugar la carta nacionalista para que sus consumidores boicoteen los productos de otros pa¨ªses en momentos de tensi¨®n geopol¨ªtica. En 2017, fueron los bienes y comercios surcoreanos los afectados durante un enfrentamiento entre Pek¨ªn y Se¨²l por el despliegue de un escudo antimisiles estadounidense en suelo de Corea del Sur. En lo peor de los enfrentamientos entre el gigante asi¨¢tico y Manila por su disputa de soberan¨ªa en el mar del Sur de China, las frutas filipinas resultaron perjudicadas.

Ante el boicoteo, o la posibilidad de boicoteo, la cotizaci¨®n de algunas de las principales multinacionales occidentales de la moda registraba ca¨ªdas significativas este jueves. H&M retroced¨ªa un 2,2%, Adidas un 4,5% en el principal ¨ªndice alem¨¢n, el DAX; e Inditex un 1,6%. Por contra, firmas chinas del sector obten¨ªan importantes avances: la compa?¨ªa Anta elevaba su cotizaci¨®n en la Bolsa de Hong Kong un 6% y su rival Li Ning, un 9%.