La investigaci¨®n sobre la gesti¨®n de la pandemia en el Senado brasile?o estrecha el cerco sobre Bolsonaro

El testimonio del presidente de Pfizer en Am¨¦rica Latina, Carlos Murillo, en la comisi¨®n que investiga la pandemia en Brasil ha expuesto a¨²n m¨¢s la inacci¨®n del Gobierno de Jair Bolsonaro para hacer frente a la crisis del coronavirus. En su declaraci¨®n del jueves, afirm¨® que el presidente y su Ministerio de Sanidad ignoraron al menos cinco ofertas de vacunas ¡ªlo que supondr¨ªa millones de dosis¡ª y registr¨® la peor semana para el Gobierno en ...

El testimonio del presidente de Pfizer en Am¨¦rica Latina, Carlos Murillo, en la comisi¨®n que investiga la pandemia en Brasil ha expuesto a¨²n m¨¢s la inacci¨®n del Gobierno de Jair Bolsonaro para hacer frente a la crisis del coronavirus. En su declaraci¨®n del jueves, afirm¨® que el presidente y su Ministerio de Sanidad ignoraron al menos cinco ofertas de vacunas ¡ªlo que supondr¨ªa millones de dosis¡ª y registr¨® la peor semana para el Gobierno en la comisi¨®n de investigaci¨®n. El d¨ªa anterior, el exsecretario de Comunicaci¨®n, F¨¢bio Wajngarten, declar¨® que el propio presidente hab¨ªa sido advertido formalmente sobre la falta de acci¨®n del Gobierno para comprar vacunas al gigante farmac¨¦utico estadounidense. Los testimonios son argumentos contundentes en manos de los acusadores de la comisi¨®n, en un momento en que m¨¢s de 430.000 brasile?os han muerto de la covid-19 y la campa?a de vacunaci¨®n sigue lenta y err¨¢tica al faltar los ingredientes activos para fabricar las vacunas, que China deber¨ªa suministrar.

Este jueves ha quedado claro que Brasil pudo haber recibido 1,5 millones de dosis de la vacuna contra la covid-19 de Pfizer en diciembre del a?o pasado. La farmac¨¦utica estadounidense present¨® cinco propuestas al Gobierno federal entre agosto y noviembre. Las tres primeras preve¨ªan la entrega de esta cantidad de vacunas todav¨ªa en 2020. Las dos ¨²ltimas, solo en el primer trimestre de este a?o. El Ministerio de Sanidad, entonces dirigido por el general Eduardo Pazuello, no respondi¨® a ninguna.

¡°Nuestra oferta del 26 de agosto ten¨ªa una validez de 15 d¨ªas. Transcurridos esos 15 d¨ªas, el Gobierno de Brasil no hab¨ªa rechazado la oferta, pero tampoco la hab¨ªa aceptado¡±, dijo Murillo. La principal objeci¨®n eran las cl¨¢usulas del contrato, que Brasil consider¨® abusivas, pero que otros 66 pa¨ªses aceptaron sin poner objeciones.

El Gobierno brasile?o firm¨® el contrato con la empresa farmac¨¦utica hasta el 19 de marzo de 2021, 234 d¨ªas despu¨¦s de la primera oferta de Pfizer. De haberse firmado en agosto pasado, cuando se hicieron las primeras propuestas, el pa¨ªs hubiera recibido 18,5 millones de dosis hasta junio de este a?o. El contrato actual prev¨¦ la entrega de 13,5 millones de vacunas en el primer semestre y otros 86,5 millones hasta finales de a?o. Esta semana se espera un nuevo contrato para 100 millones de vacunas m¨¢s de este laboratorio.

Con la presentaci¨®n del cronograma de negociaci¨®n con la farmac¨¦utica, las dos ¨²ltimas sesiones de la comisi¨®n de investigaci¨®n han dado m¨¢s munici¨®n a la oposici¨®n, liderada por el senador Renan Calheiros, del partido Movimiento Democr¨¢tico Brasile?o (MDB), que intenta sustentar dos tesis: que el Gobierno prefiri¨® deliberadamente invertir en la inmunidad de grupo en lugar de comprar vacunas y que hubo un asesoramiento paralelo de Bolsonaro sobre c¨®mo enfrentar la enfermedad. La segunda cuesti¨®n tambi¨¦n qued¨® clara durante el testimonio de Murillo, que revel¨® que el pasado 7 de diciembre dos directoras de Pfizer se reunieron en el Palacio del Planalto con Wajngarten y el concejal Carlos Bolsonaro, hijo del presidente y que no ocupa ning¨²n cargo en la estructura federal.

¡°?Cu¨¢ntas vidas de brasile?os se podr¨ªan haber salvado si hubi¨¦ramos tenido estas vacunas desde el a?o pasado? Creo que es patente la omisi¨®n que hubo¡±, dijo el opositor Randolfe Rodrigues, del partido Red de Sostenibilidad (REDE), esbozando la estrategia de la oposici¨®n. Los bolsonaristas, sin embargo, afirmaban que el Gobierno estaba negociando los t¨¦rminos del contrato, considerado draconiano, y a la espera de que la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) aprobara la vacuna. ¡°En diciembre no se podr¨ªa haber empezado la vacunaci¨®n, porque Anvisa todav¨ªa no la hab¨ªa aprobado¡±, subray¨® Marcos Rog¨¦rio, del partido Dem¨®cratas (DEM). El senador intent¨® crear la narrativa de que casi ning¨²n pa¨ªs pod¨ªa vacunar a su poblaci¨®n tan r¨¢pido, ya que la agencia reguladora estadounidense no aprob¨® la vacuna de Pfizer hasta principios de diciembre. Sin embargo, ese mes al menos seis pa¨ªses que hab¨ªan firmado contratos previos ya hab¨ªan empezado a vacunar: Chile, Costa Rica, M¨¦xico, Estados Unidos, Canad¨¢ y el Reino Unido.

Hay varias solicitudes de impeachment e investigaci¨®n penal basadas en la conducta del Gobierno de Bolsonaro en la crisis sanitaria. Ninguna ha prosperado, ya sea por el veto pol¨ªtico en la C¨¢mara de los Diputados o por el desinter¨¦s del actual fiscal general, Augusto Aras, alineado a Bolsonaro. Por este motivo, la oposici¨®n refuerza la artiller¨ªa en la comisi¨®n de investigaci¨®n, mientras que los partidarios del Gobierno reaccionan generando crispaci¨®n y desviando la atenci¨®n. Por ejemplo, los senadores Jorginho Mello, del Partido Liberal (PL), y Fernando Bezerra Coelho (MDB) intentaron que Murillo explicara por qu¨¦ Pfizer estaba retrasando la entrega de vacunas en Italia, cuando las actividades del ejecutivo se centran en Am¨¦rica Latina. Durante su carrera en la farmac¨¦utica, ocup¨® puestos de direcci¨®n en Bolivia, Chile y Brasil, antes de asumir su actual cargo.

El miedo del exministro de Sanidad

En la pr¨¢ctica, hasta ahora, la comisi¨®n ya ha conseguido uno de sus objetivos: exponer en televisi¨®n, tres veces por semana ¡ªlas sesiones tienen lugar de martes a jueves¡ª, los errores cometidos por el presidente y su equipo. Desde que empez¨®, no ha dado tregua al Gobierno. La sensaci¨®n de que el Ejecutivo no tiene defensa en la comisi¨®n se ha hecho a¨²n m¨¢s evidente con los dos recursos de h¨¢beas corpus presentados a favor de Eduardo Pazuello, general del Ej¨¦rcito en activo y exministro de Sanidad.

Se han presentado dos solicitudes al Supremo Tribunal Federal: una para que pueda guardar silencio y otra para vetar su posible arresto durante su declaraci¨®n, prevista para el pr¨®ximo d¨ªa 19. El temor a que lo detengan creci¨® despu¨¦s de que el ponente de la comisi¨®n, el senador Renan Calheiros, pidiera la detenci¨®n de Wajngarten en la sesi¨®n del mi¨¦rcoles por falso testimonio. El presidente de la comisi¨®n, el senador Omar Aziz, del Partido Social Democr¨¢tico (PSD), no atendi¨® la petici¨®n, pero remiti¨® una carta a la Fiscal¨ªa para que evaluara si era necesario investigar al exsecretario de Comunicaci¨®n.

En la medida cautelar presentada al Supremo, un abogado que no tiene poderes para representar a Pazuello afirma que la comisi¨®n de investigaci¨®n se ha convertido en un ¡°tribunal de excepci¨®n¡±, que hay una clara intenci¨®n de arrestar al general y que este no puede convertirse en el ¡°objetivo de las apetencias pol¨ªticas de parlamentarios que no tienen moral ni siquiera para ocupar el cargo que ocupan y, adem¨¢s, exigir un comportamiento diferente del que tuvo alguien que verdaderamente trabaj¨® y honr¨® los colores de esta naci¨®n para actuar con las armas que ten¨ªa contra un enemigo invisible y desconocido¡±.

La otra solicitud la firm¨® el Abogado General del Estado, Andr¨¦ Mendon?a, quien cita el riesgo de detenci¨®n y pide que ¡°se garantice a Pazuello la prerrogativa constitucional de no presentar pruebas contra s¨ª mismo¡±. Se pide al Supremo que defienda al general, porque declarar¨¢ sobre hechos relacionados con el per¨ªodo en que fue ministro de Estado.

Otro ejemplo del tono de desesperaci¨®n, o al menos de incomodidad, del Gobierno. El mi¨¦rcoles, el senador Fl¨¢vio Bolsonaro, primog¨¦nito del presidente, estuvo en la comisi¨®n de investigaci¨®n solo para crispar los ¨¢nimos e insultar al ponente.

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