¡°Las bombas no dejaban un minuto de silencio en Gaza¡±
Los civiles de la Franja, indefensos entre el fuego cruzado de Israel y Ham¨¢s, sufren la mayor escalada desde 2014
¡°Aterrados¡±, sin saber d¨®nde guarecerse, los cinco hijos de Riad Ali el Alia, un espa?ol de origen palestino de 68 a?os, no hallaron otro refugio que el hueco de la escalera de su casa cuando las bombas de la ¨²ltima ofensiva a¨¦rea y de artiller¨ªa de Israel en Gaza empezaron a caer en la madrugada del viernes. Los edificios del campo de refugiados de Jabalia, en el norte de la Franja, ¡°temblaban por las explosiones¡±, afirma este catedr¨¢tico de Cienci...
¡°Aterrados¡±, sin saber d¨®nde guarecerse, los cinco hijos de Riad Ali el Alia, un espa?ol de origen palestino de 68 a?os, no hallaron otro refugio que el hueco de la escalera de su casa cuando las bombas de la ¨²ltima ofensiva a¨¦rea y de artiller¨ªa de Israel en Gaza empezaron a caer en la madrugada del viernes. Los edificios del campo de refugiados de Jabalia, en el norte de la Franja, ¡°temblaban por las explosiones¡±, afirma este catedr¨¢tico de Ciencias Pol¨ªticas de la Universidad gazat¨ª de Al Azhar. ¡°Las bombas ca¨ªan una tras otra sin tregua. El silencio no duraba ni un minuto¡±, rememora.
Omar y Ammar, los dos hijos peque?os del profesor El Alia, mellizos de 14 a?os, enmudecieron. ¡°No hablaban, solo se estremec¨ªan¡±, relata su padre. En medio de una oscuridad total, acurrucados bajo los escalones mientras la casa se tambaleaba por los proyectiles que ca¨ªan ¡°desde el cielo, la tierra y el mar¡±, los siete miembros de esta familia hispano-palestina se preguntaban si ser¨ªan ¡°los pr¨®ximos en morir sepultados¡±, recuerda El Alia. ¡°?D¨®nde est¨¢ la justicia para nuestra gente?¡±, se pregunta luego. ¡°?C¨®mo piensa la comunidad internacional que podemos vivir de esta manera? ?D¨®nde est¨¢ el derecho a la vida para la gente de Gaza?¡±.
Peor suerte corrieron los ocho ni?os, alumnos de las escuelas de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Gaza, que perecieron bajo las bombas. Matthias Schmale, director de la organizaci¨®n en la Franja, eleva adem¨¢s a 20.000 los palestinos que han tratado de buscar refugio en 30 de las escuelas de la UNRWA en el territorio. En ocasiones, en vano, pues debido a la pandemia de la covid-19, ya en su segunda ola en el territorio, muchas de ellas estaban cerradas, explica el funcionario de Naciones Unidas.
¡°Estamos tratando de proporcionar un m¨ªnimo de asistencia a las personas que se han refugiado en nuestras escuelas y esperamos poder ofrecerles refugio. La gente de Gaza est¨¢ aterrorizada. No ha sido solo el bombardeo del viernes. Llevamos tres d¨ªas y tres noches bajo el fuego de los proyectiles que parten de Gaza y la respuesta israel¨ª est¨¢ siendo igualmente terrible. Y estamos hablando de una poblaci¨®n ya muy traumatizada. De hecho, asistimos a una crisis de salud mental. Hay familias cuya principal preocupaci¨®n es que sus ni?os no pierdan la raz¨®n¡±, deplora el director de UNRWA. De los 1.700 cohetes disparados desde la Franja desde el pasado lunes por Ham¨¢s y la Yihad isl¨¢mica, la mayor¨ªa impactaron en territorio israel¨ª, pero 300 cayeron en Gaza.
¡°Los ¨²ltimos cuatro d¨ªas hemos vivido lo que nunca hab¨ªamos vivido. Ha sido peor que la guerra de 2014¡±, afirma contrito el tambi¨¦n espa?ol de origen palestino Salah el Sousi. Se refiere a la operaci¨®n bautizada por Israel como Margen Protector, que dej¨® 2.205 muertos palestinos, seg¨²n datos de Naciones Unidas, en el verano de 2014.
Como entonces, este viernes un cortejo de gazat¨ªes a quienes las bombas han dejado sin hogar ¡°buscaba entre los escombros de lo que fueron sus casas para salvar sus documentos o alguna de sus pertenencias¡±, relata el Sousi, uno de los cerca de 100 espa?oles que viven en esta estrecha franja de unos 360 kil¨®metros cuadrados donde se hacinan dos millones de personas.
Helen Ottens-Patterson es la coordinadora general de la organizaci¨®n M¨¦dicos sin Fronteras (MSF) en Gaza, que gestiona proyectos de cirug¨ªa reconstructiva en la Franja. Tras intentar reanudar su trabajo en los hospitales gazat¨ªes tras el bombardeo, un peque?o equipo de MSF consigui¨® en la ma?ana de este viernes ¡°dar apoyo¡± en la atenci¨®n a los heridos en uno de los centros sanitarios de la Franja. Sin embargo, la coordinadora de MSF advierte de que aunque su personal est¨¢ ¡°acostumbrado a proporcionar asistencia m¨¦dica en situaciones terribles y en el contexto de un bloqueo que dura 14 a?os, si no se logra un alto el fuego en un plazo breve de tiempo la situaci¨®n ya muy precaria del sistema sanitario pasar¨¢ a ser tr¨¢gica¡±.
El bloqueo, las tres guerras sucesivas en 12 a?os, sumados al impacto de la covid-19 en Gaza, hacen temer a las organizaciones humanitarias que esta nueva ofensiva israel¨ª sea tambi¨¦n el golpe de gracia de una econom¨ªa ya de rodillas. Laila Barhoum, responsable de pol¨ªticas de la ONG Oxfam, advierte del riesgo de que esta ofensiva ¡°tenga un impacto profundo en la pobreza y en la p¨¦rdida de empleos¡±. En Gaza, el 80% de la poblaci¨®n depende de la ayuda humanitaria para sobrevivir, seg¨²n la ONU. La trabajadora humanitaria, originaria de Gaza, formula por ello un deseo: ¡°Que esta locura cese¡±.