Annalena Baerbock, la candidata de Los Verdes que se derrot¨® a s¨ª misma

Cuando el reloj marc¨® las 11 de la ma?ana del lunes 19 de abril de 2021, Los Verdes, el partido ecologista alem¨¢n que naci¨® hace 41 a?os en medio de un gran caos en la ciudad de Karlsruhe, levantaron el tel¨®n de un escenario montado para anunciar una decisi¨®n hist¨®rica. Por primera vez en su agitada trayectoria,...

Cuando el reloj marc¨® las 11 de la ma?ana del lunes 19 de abril de 2021, Los Verdes, el partido ecologista alem¨¢n que naci¨® hace 41 a?os en medio de un gran caos en la ciudad de Karlsruhe, levantaron el tel¨®n de un escenario montado para anunciar una decisi¨®n hist¨®rica. Por primera vez en su agitada trayectoria, el partido hab¨ªa decidido designar a una mujer para luchar por el cargo gubernamental m¨¢s importante de Alemania, la canciller¨ªa. Se trata de Annalena Baerbock, copresidenta de la formaci¨®n, de 40 a?os y madre de dos hijos de corta edad.

Tras ser nombrada por la ejecutiva de Los Verdes en Berl¨ªn, Baerbock anunci¨® que quer¨ªa cambiar radicalmente Alemania. ¡°Estoy profundamente convencida de que este pa¨ªs necesita un nuevo comienzo¡±, dijo, y con la mirada fija en las elecciones de este domingo, formul¨® una clara pretensi¨®n de poder: ¡°Cambio en lugar de promesa: Ahora es el momento de liderar un buen Gobierno en este sentido. Yo defiendo la renovaci¨®n. Otros defienden el statu quo¡±. La elecci¨®n de la dirigente catapult¨® a Los Verdes a la cabeza de las encuestas durante unas semanas, por delante incluso de los conservadores de la CDU, pero el partido ha ido perdiendo terreno, en parte por errores de la propia candidata. No obstante, los ecologistas ser¨¢n claves para la formaci¨®n de un Gobierno de coalici¨®n cuando se cierren las urnas el domingo por la tarde.

La designaci¨®n de Baerbock fue el punto culminante de una carrera espectacular que se inici¨® casi de casualidad. Cuando termin¨® sus estudios de Ciencias Pol¨ªticas en la Universidad de Hamburgo quer¨ªa convertirse en corresponsal de guerra, pero al mismo tiempo entender mejor la pol¨ªtica, no solo la teor¨ªa, por lo que se postul¨® para unas pr¨¢cticas profesionales en las oficinas de los socialdem¨®cratas (SPD) y Los Verdes en Bruselas. La eurodiputada verde Elisabeth Schroedter la contrat¨®.

Despu¨¦s de un obtener un m¨¢ster en la London School of Economics, Baerbock trabaj¨® tres a?os para la eurodiputada antes de convertirse en la presidenta regional de Los Verdes en Brandeburgo en 2009. Cuatro a?os despu¨¦s, fue elegida diputada en el Parlamento federal. Gracias a un fren¨¦tico trabajo de equipo y alianzas, sobre todo con mujeres, la joven pol¨ªtica fue elegida, en 2018, copresidenta del partido, junto al carism¨¢tico Robert Habeck. Tres a?os despu¨¦s, se convirti¨® en la segunda candidata a la canciller¨ªa, la m¨¢s joven en la historia de la Rep¨²blica Federal.

¡°Es una mujer combativa, centrada y de fuerte voluntad que sabe exactamente lo que quiere y que representar¨¢ el programa de Los Verdes con pasi¨®n en esta campa?a electoral¡±, dijo Habeck, el col¨ªder de Los Verdes que tambi¨¦n aspiraba a ser el candidato. ¡°Tiene ideas para un buen futuro y conoce las preocupaciones cotidianas de la gente. Sabe escuchar, inspirar a la gente, es combativa y decisiva¡±, a?adi¨® Anton Hofreiter, copresidente del grupo parlamentario del Bundestag.

Es cierto. Cuando fue designada candidata a la dif¨ªcil misi¨®n de reemplazar a Angela Merkel, Baerbock ya era considerada en las filas de su partido, y tambi¨¦n en los pasillos pol¨ªticos de Berl¨ªn, una pol¨ªtica exitosa, ambiciosa y sobre todo bien preparada para hacer frente a todo tipo de tormentas pol¨ªticas, en especial, las relacionadas con el cambio clim¨¢tico.

Su candidatura tambi¨¦n provoc¨® un raro fen¨®meno en la prensa germana, que declar¨® su entusiasmo por la aspirante. ¡°Endlich anders¡± (por fin algo diferente), escribi¨® el semanario Stern en letras verdes bajo una foto de portada de Baerbock, para describir con admiraci¨®n su ascenso de ¡°don nadie pol¨ªtico a candidata a la canciller¨ªa¡±.

El influyente semanario Der Spiegel tambi¨¦n le dedic¨® la portada, donde imprimi¨® una provocativa foto de la candidata con mirada desafiante sobre un t¨ªtulo sugerente: ¡°La mujer para todos los casos¡±. ¡°Annalena Baerbock no tiene experiencia de gobierno, pero encarna mucho m¨¢s los cambios que sus competidores¡±, escribi¨® la revista en otra rara declaraci¨®n de admiraci¨®n por la candidata.

Giro en los sondeos

Pero las cosas han cambiado desde abril. El s¨¢bado pasado, la revista anunci¨® en otra portada que Los Verdes, y en especial su candidata, hab¨ªan desaprovechado una oportunidad hist¨®rica. ¡°En primavera, las encuestas vieron a Annalena Baerbock ya de camino a la canciller¨ªa; hoy el partido se ha quedado atr¨¢s en el tercer lugar. Los Verdes han cometido demasiados errores y se han jugado mucho m¨¢s que su propio triunfo¡±, sentenci¨® la revista, en un largo reportaje que titul¨® La oportunidad perdida.

?De qui¨¦n es la culpa? Los medios alemanes coinciden en se?alar que la campa?a de la candidata ha fracasado en buena parte por errores propios. Baerbock ha pasado de ser vista como posible canciller a aspirante a formar parte de un Gobierno de coalici¨®n liderado por Olaf Scholz (SPD) o Armin Laschet (CDU).

Los ¨²ltimos cinco meses de Baerbock, la m¨¢s joven de un triunvirato en el que los otros dos candidatos tienen m¨¢s de 60 a?os, se pueden resumir con una curva y tres errores destacados. La curva comenz¨® a subir en abril, cuando su partido luc¨ªa una espl¨¦ndida intenci¨®n de voto de hasta el 30%. Las ¨²ltimas encuestas calculan ahora entre el 15% y el 16%, un buen resultado si se compara con el de las elecciones de 2017 (8,7%), pero insuficiente para suceder a Angela Merkel.

Los tres errores cometidos por Baerbock arruinaron en buena medida la credibilidad de la candidata. Poco despu¨¦s de su designaci¨®n, tuvo que reconocer que hab¨ªa registrado demasiado tarde en el Bundestag la declaraci¨®n de ingresos adicionales como diputada federal. Despu¨¦s, la prensa destap¨® que hab¨ªa maquillado su curr¨ªculum y, peor a¨²n, que hab¨ªa plagiado m¨¢s de 100 pasajes en su libro Ahora: c¨®mo renovamos nuestro pa¨ªs, donde no se citaban las fuentes. La impresi¨®n que dej¨® en la opini¨®n p¨²blica fue devastadora, la de una candidata que no jugaba limpio.

¡°Los errores tuvieron un papel muy importante, porque provocaron la necesidad de aclaraciones, algo que no se hizo. Se intentaron corregir con detalles y perdi¨® una enorme cuota de credibilidad. No es aventurado decir que puede convertirse en la primera candidata a canciller que se derrot¨® a s¨ª misma¡±, dice el polit¨®logo Wolfgang Schr?der, profesor en la Universidad de Kassel. ¡°Pero el partido tambi¨¦n es responsable por haberla designado como candidata. Ella no tiene experiencia, carece de una cualidad especial y tampoco tiene un carisma que sobrepase las filas de su propio partido. Siempre ha querido mostrar una imagen que supera lo que realmente es¡±.

?Se equivoc¨® el partido? Las mort¨ªferas inundaciones en los Estados de Renania del Norte-Westfalia y Renania-Palatinado este pasado verano situaron el cambio clim¨¢tico en el centro de la campa?a electoral, pero la candidata, en lugar de llamar la atenci¨®n sobre lo importante que podr¨ªan ser Los Verdes en la lucha contra el cambio clim¨¢tico, opt¨® por un perfil bajo para evitar ser acusada de instrumentalizar el desastre. Baerbock acab¨® visitando las zonas inundadas mucho m¨¢s tarde que sus competidores y sin prensa.

¡°S¨¦ que he perdido la confianza por los errores cometidos y estoy molesta conmigo misma, pero s¨¦ hacia d¨®nde quiero ir¡±, dijo la candidata cuando le preguntaron si era la responsable de la brusca ca¨ªda de su partido en las encuestas. El precio que deber¨¢ pagar por ello se medir¨¢ este domingo en votos y el resultado probablemente le obligar¨¢ a cambiar la ruta que pretend¨ªa seguir.

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