El ej¨¦rcito en la sombra de Rusia mira al Sahel

El Gobierno de transici¨®n maliense, controlado por los militares que dieron dos golpes de estado en el ¨²ltimo a?o, y la compa?¨ªa privada de seguridad rusa Wagner han mantenido conversaciones este verano para el despliegue de cientos de mercenarios en Mal¨ª con el fin de combatir el yihadismo. Esos contactos con la empresa a quien se considera un ej¨¦rcito en la sombra del Kremlin han sido confirmados por las autoridades malienses. Sin embargo, este acuerdo en ciernes ha desatado una tormenta diplom¨¢tica que ha resquebrajado a¨²n m¨¢s las dif¨ªciles relaciones entre el pa¨ªs africano y Francia, que m...

El Gobierno de transici¨®n maliense, controlado por los militares que dieron dos golpes de estado en el ¨²ltimo a?o, y la compa?¨ªa privada de seguridad rusa Wagner han mantenido conversaciones este verano para el despliegue de cientos de mercenarios en Mal¨ª con el fin de combatir el yihadismo. Esos contactos con la empresa a quien se considera un ej¨¦rcito en la sombra del Kremlin han sido confirmados por las autoridades malienses. Sin embargo, este acuerdo en ciernes ha desatado una tormenta diplom¨¢tica que ha resquebrajado a¨²n m¨¢s las dif¨ªciles relaciones entre el pa¨ªs africano y Francia, que mantiene miles de soldados en el Sahel en el marco de la Operaci¨®n Barkhane. Las negociaciones han suscitado tambi¨¦n la alarma de la Uni¨®n Europea, que asiste con preocupaci¨®n al auge de los flujos migratorios irregulares que transitan por ese pa¨ªs y del terrorismo yihadista, que podr¨ªa amenazar directamente a Europa.

La crisis alcanz¨® su cenit esta semana despu¨¦s de que primer ministro maliense, Choguel Kokalla Ma?ga, denunciara el 25 de septiembre en la Asamblea General de Naciones Unidas que Francia les hab¨ªa abandonado, en referencia a la reducci¨®n de un 40% de las tropas galas en el Sahel, anunciada para finales de a?o. ¡°La nueva situaci¨®n nacida del final de Barkhane, que coloca a Mal¨ª frente a un hecho consumado y lo expone a una especie de abandono en pleno vuelo, nos lleva a explorar otras f¨®rmulas para garantizar nuestra seguridad de manera aut¨®noma con otros socios¡±, dijo Ma?ga para justificar su acuerdo con Wagner.

Estas palabras generaron una rotunda reacci¨®n gala. El presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, las describi¨® como ¡°una verg¨¹enza¡± y acus¨® al Gobierno maliense de carecer de legitimidad democr¨¢tica. En una entrevista a France Inter el martes, fue m¨¢s all¨¢. ¡°Sin Francia en el Sahel, ya no habr¨ªa gobierno en Mal¨ª, los terroristas se hubieran hecho con el control de Bamako y de todo el pa¨ªs¡±, manifest¨®, ¡°no es el papel del Ej¨¦rcito franc¨¦s reemplazar la falta de trabajo del Estado en Mal¨ª¡±. El ministro de Exteriores, Abdoulaye Diop, convoc¨® poco despu¨¦s al embajador franc¨¦s, Joel Meyer, para expresarle la ¡°indignaci¨®n¡± de su Gobierno.

Mientras el sentimiento antifranc¨¦s coge nuevo impulso en Mal¨ª y en toda la regi¨®n, las relaciones con Rusia se estrechan tambi¨¦n por canales oficiales. El Gobierno maliense recibi¨® el 30 de septiembre cuatro helic¨®pteros comprados a ese pa¨ªs as¨ª como armas y municiones regaladas por Mosc¨². El ministro de Defensa, el coronel Sadio C¨¢mara, valor¨® la ¡°fiabilidad¡± de Rusia tras el contrato firmado entre ambos Ejecutivos en 2020. El jefe de la diplomacia rusa, Sergu¨¦i Lavrov, ha reconocido, por su parte, que Mal¨ª ha recurrido a una compa?¨ªa militar rusa aunque sin mencionar a Wagner.

La matriz de esta empresa de mercenarios es una unidad encubierta del ej¨¦rcito ruso que, en 2014, con la guerra de Ucrania, inici¨® su metamorfosis a compa?¨ªa paramilitar privada. Financiada por Yevgeni Prigozhin -un empresario cercano al presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin ¨C ha desplegado a sus mercenarios en Ucrania, Siria, Libia, Venezuela, Sud¨¢n y Rep¨²blica Centroafricana. La compa?¨ªa cristaliz¨® en Siria, durante la intervenci¨®n rusa en apoyo de Bachar el Asad y desde entonces -apunta un veterano oficial de inteligencia occidental-es un brazo paramilitar con el que Kremlin libra guerras y apoya a reg¨ªmenes amigos.

El C¨®digo Penal ruso proh¨ªbe la participaci¨®n de mercenarios en conflictos armados y Wagner ni siquiera est¨¢ registrada en Rusia. El Kremlin neg¨® durante a?os su existencia antes de admitir la realidad de las compa?¨ªas militares privadas, a cuyos miembros define como ¡°asesores¡±, mientras recalca que no tienen ninguna vinculaci¨®n con el Gobierno. Sin embargo, los indicios de los lazos entre esta empresa y las autoridades rusas son s¨®lidos. ¡°Detr¨¢s de Wagner, est¨¢ Rusia. El modelo inicial que ahora se quiere exportar a Mal¨ª es el de Siria: un acuerdo de protecci¨®n a un r¨¦gimen a cambio de la posibilidad de explotar recursos naturales¡±, explica por tel¨¦fono Thierry Vircoulon, coordinador del Observatorio de ?frica Central y Meridional del Instituto Franc¨¦s de Relaciones Internacionales (IFRI).

Un ejemplo de libro de las intervenciones de esta empresa en ?frica es la Rep¨²blica Centroafricana: un Estado fallido y en guerra, con un r¨¦gimen que carece de legitimidad y de control del territorio ¨Cun 80% est¨¢ bajo la f¨¦rula de diversos grupos armados- pero que atesora valiosos recursos naturales. Los paramilitares de Wagner llegaron a Centro¨¢frica en 2017 en virtud de un acuerdo con su Gobierno. Su presidente, Faustin-Archange Touad¨¦ra, firm¨® entonces de su pu?o y letra un permiso de explotaci¨®n de oro y diamantes a una empresa local, Lobaye Invest, controlada por un testaferro del financiador de Wagner, Prigozhin, seg¨²n un informe del Instituto de Investigaci¨®n de la Escuela Militar de Francia (IRSEM en sus siglas francesas).

El documento da cuenta de c¨®mo, de forma paralela al despliegue de unos 2.000 mercenarios por parte de Wagner, Lobaye Invest ha comprado art¨ªculos en medios centroafricanos, financiado la creaci¨®n de una radio e incluso rodado una pel¨ªcula en la que se pinta a los paramilitares rusos con los colores del h¨¦roe. El mensaje no solo ha sido ensalzar la presencia rusa, sino tambi¨¦n denigrar a los pa¨ªses occidentales. Para ello, el entramado de sociedades del oligarca ruso est¨¢ detr¨¢s a su vez de diversas ¡°granjas de trolls¡±, centros de difusi¨®n de noticias falsas en redes sociales, en Rep¨²blica Centroafricana y otros Estados del continente.

En una carta de otra sociedad pantalla de Prigozhin, en esta ocasi¨®n, en Sud¨¢n ¨Ccuyo contenido, citado por el IRSEM, fue difundido por un centro de investigaci¨®n del disidente ruso Mija¨ªl Jodorkovski- se detallan actividades de esa empresa para perjudicar la imagen de Estados Unidos en ?frica. El ¡°probable destinatario¡± de la misiva es el jefe de Operaciones del Estado Mayor ruso, Serguei Roudskoi, asegura el instituto militar franc¨¦s.

En Estados como la Rep¨²blica Centroafricana, la actuaci¨®n de los paramilitares rusos escapa adem¨¢s a todo control. Un informe del Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre los Mercenarios denunciaba el 31 de marzo que esos soldados a sueldo estaban detr¨¢s de ejecuciones sumarias, torturas, desaparici¨®n forzada y violencia sexual en ese pa¨ªs. Frente a esas acusaciones, precisa Vircoulon, ¡°Mosc¨² puede negar cualquier relaci¨®n con el grupo Wagner¡±.

Tanto Par¨ªs como Bruselas han puesto a Bamako ante un ultim¨¢tum. La diplomacia europea ha advertido a Mal¨ª de que la presencia de mercenarios rusos es incompatible con el despliegue de la fuerza europea Takuba e incluso puede serlo con la continuidad de la misi¨®n europea de formaci¨®n militar, EUTM, en marcha desde 2013. El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, ha amenazado con ¡°consecuencias inmediatas¡± en la cooperaci¨®n con Mal¨ª. ¡°Cuando Borrell habla de cooperaci¨®n, se refiere tambi¨¦n a la ayuda y al dinero¡±, recalca el experto Vircoulon, que apunta a que esa es una baza europea frente a Rusia.

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