El Ej¨¦rcito frustra la transici¨®n en Sud¨¢n con un golpe de Estado
El primer ministro, Abdallah Hamdok, est¨¢ detenido y en paradero desconocido. Decenas de miles de personas se movilizan en todo el pa¨ªs para defender una transici¨®n democr¨¢tica y las protestas dejan al menos tres manifestantes muertos
El Ej¨¦rcito de Sud¨¢n anunci¨® al mediod¨ªa de este lunes la toma del poder y la disoluci¨®n de los principales ¨®rganos de la transici¨®n en el pa¨ªs despu¨¦s de haber arrestado al amanecer a varios altos cargos civiles del Ejecutivo, incluido el primer ministro, Abdallah Hamdok, y a l¨ªderes de partidos y organizaciones progubernamentales. Los principales grupos revolucionarios sudaneses han respondido al golpe de Estado con llamadas a la desobediencia civil y a la huelga general, y decenas de miles de personas se han movilizado en ciudades de todo el pa¨ªs para defender una transici¨®n civil y democr¨¢tica. Las fuerzas de seguridad han matado a disparos a, al menos, tres manifestantes y han herido a m¨¢s de 80, seg¨²n hab¨ªa registrado el Sindicato de Doctores de Sud¨¢n hasta media tarde del lunes.
El ¨¦xito del golpe supondr¨ªa un duro rev¨¦s para las aspiraciones populares en Sud¨¢n de continuar desmantelando el r¨¦gimen del exdictador Omar Al Bashir, depuesto en 2019 despu¨¦s de meses de masivas manifestaciones, sentar las bases de un Gobierno civil y democr¨¢tico y de un Estado de derecho, y consolidar el retorno del pa¨ªs a la comunidad internacional tras d¨¦cadas de ostracismo. Estados Unidos, la Uni¨®n Africana, Naciones Unidas, la Uni¨®n Europea y la Liga ?rabe han instado a regresar a la fase de transici¨®n.
En un discurso retransmitido por televisi¨®n, el comandante del Ej¨¦rcito sudan¨¦s y hasta ahora tambi¨¦n presidente del Consejo Soberano que act¨²a como jefatura de Estado, Abdel Fattah Al Burhan, ha anunciado la liquidaci¨®n del Gobierno y de ese mismo Consejo Soberano. Atribuye su decisi¨®n a supuestas disputas de poder e incitaci¨®n al caos por parte de los civiles. Al Burhan tambi¨¦n ha declarado el estado de emergencia en todo el pa¨ªs y la suspensi¨®n de una serie de art¨ªculos del documento que serv¨ªa de Constituci¨®n durante la transici¨®n sobre la composici¨®n y las competencias de los dos ¨®rganos anteriores y la participaci¨®n de los civiles. El general ha anticipado que nombrar¨¢n un Gobierno tecnocr¨¢tico para pilotar el pa¨ªs hasta unas elecciones previstas para 2023.
Al Burhan tambi¨¦n ha confirmado el arresto de varios miembros civiles del Consejo Soberano, ministros y dirigentes pol¨ªticos. Entre ellos se encuentra Hamdok, que ha sido trasladado a un destino desconocido por fuerzas militares despu¨¦s de ser inicialmente retenido en su domicilio y haberse negado a hacer una declaraci¨®n a favor del golpe, seg¨²n un comunicado del Ministerio de Informaci¨®n. La oficina del primer ministro, por su parte, ha afirmado que lo sucedido representa ¡°una ruptura del documento constitucional y un golpe contra las conquistas de la revoluci¨®n¡±, en un comunicado.
Derrocamiento del exdictador Al Bashir
El golpe de Estado devuelve a Sud¨¢n a una etapa similar a la inmediatamente posterior al derrocamiento del exdictador Omar Al Bashir en abril de 2019, cuando el Consejo Militar de Transici¨®n asumi¨® las riendas del poder hasta que la presi¨®n de los civiles les forz¨® a aceptar una alianza de conveniencia para pilotar la transici¨®n. Ahora, sin embargo, el movimiento de los militares amenaza con enterrar los avances democr¨¢ticos del pa¨ªs en los dos ¨²ltimos a?os, y particularmente los intentos de deshacerse y ajustar cuentas con la herencia que dej¨® Al Bashir, que hoy permanece en una c¨¢rcel de Jartum.
L¨ªderes civiles del pa¨ªs se hab¨ªan mostrado cada vez m¨¢s impacientes ante la reticencia de los generales a una reforma profunda de las instituciones de seguridad y militares, incluido su imperio econ¨®mico, que dejara atr¨¢s su papel en tiempos de Al Bashir, su antiguo aliado. Tambi¨¦n les hab¨ªan reprochado su pol¨ªtica de obstrucci¨®n en cuestiones como investigar cr¨ªmenes de las fuerzas de seguridad perpetrados tras el derrocamiento del exdictador o cooperar con el Tribunal Penal Internacional en su investigaci¨®n sobre el genocidio de Darfur, que podr¨ªa salpicar directamente a algunos de sus l¨ªderes.
En un mensaje temprano difundido en las redes, la Asociaci¨®n de Profesionales de Sud¨¢n, que lider¨® las movilizaciones que llevaron a la ca¨ªda de Al Bashir, ha llamado ¡°a las masas¡± a que ¡°salgan a la calle y las ocupen por completo y se preparen para resistir¡±. La oficina de Hamdok tambi¨¦n ha llamado al pueblo a manifestarse y a usar todos los medios pac¨ªficos ¡°para restaurar su revoluci¨®n¡±.
En respuesta, decenas de miles de personas se ha movilizado desde primera hora de la ma?ana en varias ciudades del pa¨ªs, incluida la capital, Jartum, a pesar de que la se?al de internet y tel¨¦fono ha sufrido severas interrupciones, seg¨²n ha constatado la organizaci¨®n de monitoreo de NetBlocks. Uniformados han asaltado tambi¨¦n la sede de la televisi¨®n y la radio estatales y han detenido a varios empleados, seg¨²n el Ministerio de Informaci¨®n.
Disparos contra manifestantes
El mismo ministerio ha denunciado el uso de munici¨®n real contra manifestantes al menos en Jartum, donde el Ej¨¦rcito y las Fuerzas de Apoyo R¨¢pido, un temido grupo paramilitar, se encuentran desplegados en las calles. Los manifestantes han levantado barricadas para defenderse en algunos barrios, donde est¨¢n bien organizados, seg¨²n muestran im¨¢genes en las redes sociales. El Sindicato de Doctores de Sud¨¢n ha afirmado que los uniformados est¨¢n impidiendo su acceso al banco central de sangre del pa¨ªs para atender a los heridos.
Las Fuerzas de la Libertad y el Cambio, que encabezaron las protestas contra Al Bashir, han declarado un estado de desobediencia civil nacional hasta que todos los detenidos del Consejo Soberano y del Gobierno sean liberados, los miembros del Consejo Militar dimitan y entreguen el poder a los civiles, y se reabra una negociaci¨®n con el pueblo.
La Administraci¨®n estadounidense de Joe Biden, por su parte, ha amenazado con cortar su ayuda al pa¨ªs si no se revierten los hechos. El enviado especial del pa¨ªs para el Cuerno de ?frica, Jeffrey Feltman, que este fin de semana se reuni¨® con los l¨ªderes militares y civiles del pa¨ªs, ha se?alado en un comunicado que el golpe es ¡°totalmente inaceptable¡± y que cualquier cambio en el Gobierno ¡°pone en riesgo la ayuda de Estados Unidos¡±.
Special Envoy Feltman: The US is deeply alarmed at reports of a military take-over of the transitional government. This would contravene the Constitutional Declaration and the democratic aspirations of the Sudanese people and is utterly unacceptable. (1/2)
— Bureau of African Affairs (@AsstSecStateAF) October 25, 2021
El golpe de Estado se produce en medio de la tensi¨®n entre los l¨ªderes civiles y militares encargados de dirigir Sud¨¢n, disparada en las ¨²ltimas semanas a ra¨ªz de una intentona golpista abortada a finales de septiembre que degener¨® en la peor crisis pol¨ªtica en el pa¨ªs desde el inicio de la transici¨®n en verano de 2019. Miembros civiles del Ejecutivo hab¨ªan alertado desde entonces que el Ej¨¦rcito estaba fomentando la inestabilidad en el pa¨ªs y sembrando la discordia entre sus filas con el fin de crear las condiciones oportunas para asaltar el poder. En este sentido, una facci¨®n pr¨®xima a los militares, pero nominalmente integrada en las Fuerzas de la Libertad y el Cambio, se escindi¨® recientemente y form¨® una alianza propia que podr¨ªa ofrecer una suerte de cobertura civil al Ej¨¦rcito.
Asimismo, desde el s¨¢bado cientos de personas se mantuvieron concentradas en Jartum para pedir a los militares que asumieran el poder, en una protesta que muchos consideran como m¨ªnimo alentada por los militares. El 11 de octubre, Facebook anunci¨® el cierre de una red de p¨¢ginas no aut¨¦nticas vinculadas a las Fuerzas de Apoyo R¨¢pido que intentaba manipular la opini¨®n p¨²blica y pedir al ej¨¦rcito que tomara el poder.
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