Un grupo yihadista asesina a 132 civiles en una nueva matanza en el centro de Mal¨ª
El Gobierno atribuye el ataque terrorista a miembros de la Katiba Macina, vinculada a Al Qaeda
Presuntos miembros de la Katiba Macina, grupo yihadista vinculado a Al Qaeda, asesinaron a al menos 132 civiles este fin de semana en una nueva masacre en el centro de Mal¨ª, ha informado este lunes el Gobierno del pa¨ªs en un comunicado. Los ataques se produjeron entre la tarde del s¨¢bado y el domingo, cuando hombres armados y a bordo de motocicletas entraron en tres aldeas cercanas de la zona de Bandiagara. All¨ª ejecutaron sobre todo a los hombres y prendieron fuego a casas, graneros y veh¨ªculos, provocando la huida del resto de la poblaci¨®n hacia Bankass, a unos 40 kil¨®metros.
Fuentes ...
Presuntos miembros de la Katiba Macina, grupo yihadista vinculado a Al Qaeda, asesinaron a al menos 132 civiles este fin de semana en una nueva masacre en el centro de Mal¨ª, ha informado este lunes el Gobierno del pa¨ªs en un comunicado. Los ataques se produjeron entre la tarde del s¨¢bado y el domingo, cuando hombres armados y a bordo de motocicletas entraron en tres aldeas cercanas de la zona de Bandiagara. All¨ª ejecutaron sobre todo a los hombres y prendieron fuego a casas, graneros y veh¨ªculos, provocando la huida del resto de la poblaci¨®n hacia Bankass, a unos 40 kil¨®metros.
Fuentes locales aseguran que estos ataques son una venganza debido a que algunos habitantes de estas aldeas (Diallassagou, Diamweli y Deguessagou) hab¨ªan colaborado con efectivos del Ej¨¦rcito maliense y mercenarios rusos en las operaciones de lucha contra el terrorismo que se llevan a cabo en la zona. Las mismas fuentes confirmaron que las localidades de S¨¦gu¨¦ y Djiguibombo tambi¨¦n fueron atacadas por yihadistas, pero que en ambas urbes fueron rechazados por cazadores tradicionales dozos o milicianos armados de la etnia dogon.
La zona de Bandiagara, pr¨®xima a la frontera con Burkina Faso, es escenario habitual de la violencia yihadista, particularmente a partir de 2015, cuando el foco de la insurrecci¨®n que sufre Mal¨ª desde 2012 se traslad¨® al centro del pa¨ªs. Fue entonces cuando surgi¨® el grupo Frente de Liberaci¨®n de Macina, liderado por el predicador radical Amadou Koufa, a quien el Gobierno maliense dio por muerto en 2018, pero que numerosas fuentes conocedoras del conflicto afirman que sigue vivo en la zona centro del pa¨ªs.
Este grupo armado, que cambi¨® posteriormente el nombre a Katiba Macina, se integr¨® bajo el paraguas del Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM) liderado por el yihadista tuareg Iyad Ag Ghali, a su vez vinculado a Al Qaeda. Formada fundamentalmente por miembros de la etnia peul, la Katiba Macina ha llevado a cabo numerosos atentados y ataques en las regiones de Mopti y S¨¦gou. Por ello, miembros de la etnia dogon, mayoritaria en la zona de Bandiagara, han acusado a los peul de complicidad con el yihadismo, lo que ha derivado en masacres de unos y otros en los ¨²ltimos a?os. En un contexto de un Estado pr¨¢cticamente ausente o muy debilitado, el grupo de Koufa ha alcanzado acuerdos con comunidades locales para otorgarles protecci¨®n a cambio de dinero.
La Misi¨®n de Naciones Unidas para la Estabilizaci¨®n de Mal¨ª (Minusma) ha mostrado su preocupaci¨®n a trav¨¦s de su perfil de Twitter por las informaciones sobre ¡°ataques llevados a cabo por grupos extremistas contra civiles en la regi¨®n de Bandiagara, ataques que han provocado v¨ªctimas y desplazamiento de poblaci¨®n¡±. Minusma se ha ofrecido a las autoridades locales, tanto civiles como militares, para enviar una misi¨®n de protecci¨®n de los ciudadanos y de estabilizaci¨®n a esta zona. El Gobierno de Mal¨ª, a trav¨¦s de un comunicado, ha condenado con ¡°el m¨¢ximo rigor¡± esta violencia y ha asegurado que proseguir¨¢ en su tarea de ¡°b¨²squeda y destrucci¨®n de santuarios terroristas¡± a trav¨¦s de las operaciones Maliko y Keletigui.
La insurrecci¨®n yihadista, que comenz¨® en el norte de Mal¨ª en 2012 ¨Dy luego se contagi¨® al centro del pa¨ªs y a los vecinos N¨ªger y Burkina Faso¨D, ha provocado m¨¢s de 25.000 muertos y unos cuatro millones de desplazados y refugiados. La incapacidad para frenar el avance de los radicales es uno de los principales motivos que explican los golpes de Estado en Mal¨ª y Burkina Faso de los ¨²ltimos a?os, pero las juntas militares no est¨¢n logrando acabar con la violencia. La operaci¨®n francesa Barkhane, que lleg¨® a tener 5.500 efectivos desplegados en el Sahel, se est¨¢ retirando de Mal¨ª a causa de desacuerdos entre los dirigentes de este pa¨ªs y el El¨ªseo. Adem¨¢s, las autoridades malienses recurren desde el a?o pasado a instructores y mercenarios rusos de la compa?¨ªa Wagner para que les apoyen en su combate contra el yihadismo.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.