Citibank recuperar¨¢ los 500 millones de d¨®lares que pag¨® por un error humano a varios fondos

Citibank tiene la llamada regla de los seis ojos para ciertas operaciones. Hacen falta tres personas: una la prepara, otro la comprueba y otro la aprueba. Ni siquiera esa norma impidi¨® un error humano por el que el banco pag¨® equivocadamente 894 millones de d¨®lares a acreedores de la firma Revlon. Pese a advertirles del error, una decena de fondos de inversi¨®n se negaron a devolver 500 millones al banco. Citibank les demand¨® y perdi¨® en primera instancia. Ahora, un tribunal de apelaci¨®n le ha dado la raz¨®n...

Citibank tiene la llamada regla de los seis ojos para ciertas operaciones. Hacen falta tres personas: una la prepara, otro la comprueba y otro la aprueba. Ni siquiera esa norma impidi¨® un error humano por el que el banco pag¨® equivocadamente 894 millones de d¨®lares a acreedores de la firma Revlon. Pese a advertirles del error, una decena de fondos de inversi¨®n se negaron a devolver 500 millones al banco. Citibank les demand¨® y perdi¨® en primera instancia. Ahora, un tribunal de apelaci¨®n le ha dado la raz¨®n.

¡°Los demandados ten¨ªan conocimiento del error y los acreedores no ten¨ªan derecho al reembolso en ese momento¡±, dice la sentencia de 131 p¨¢ginas, incluido un voto particular, que se ha publicado este jueves. Mientras, Revlon se ha declarado en bancarrota para renegociar su deuda. La suspensi¨®n de pagos ya se ve¨ªa venir y en el verano de 2020, la deuda de la compa?¨ªa se pagaba al 20% o 30% de su valor nominal.

Con la ayuda de Citibank, Revlon refinanci¨® una parte del cr¨¦dito de 1.800 millones de d¨®lares a siete a?os en el que el banco actuaba como entidad agente. Fue al ejecutar esa operaci¨®n cuando se produjo el pago accidental de toda la deuda pendiente. Algunos fondos de inversi¨®n de alto riesgo, de deuda y de inversi¨®n alternativa vieron la opci¨®n de recuperar ¨ªntegra la deuda y se negaron a devolver el dinero.

Un error humano

¡°Parece que el dinero ha salido¡±. Arokia Raj, empleado de Wipro, una subcontrata de Citibank en la India, no daba cr¨¦dito la ma?ana del 12 de agosto de 2020. Las cuentas no cuadraban. Faltaban nada menos que 894 millones de d¨®lares. Enseguida pens¨® en la operaci¨®n que hab¨ªa hecho la tarde anterior con la deuda de la firma de cosm¨¦tica Revlon.

Arokia Raj hab¨ªa preparado la operaci¨®n para que se pagasen 7,8 millones en intereses y se canjeasen los 894 millones de principal porque parte de la deuda se daba de baja del cr¨¦dito original y pasaba a un nuevo pr¨¦stamo, una operaci¨®n sin movimiento de caja. Para hacer una operaci¨®n as¨ª, Citibank usa una cuenta interna, donde va ese principal mientras se ajustan las posiciones.

Por defecto, sin embargo, los programas de Wipro y Citibank est¨¢n hechos para efectuar la transferencia de dinero. Al procesar la operaci¨®n en el ordenador, hay que cambiar tres campos para que los fondos vayan a la cuenta interna y no se transfiera al exterior, explican los jueces. Raj solo ajust¨® uno. Santhosh Kuppusamy Ravi, otro empleado de Wipro, supervis¨® y verific¨® la operaci¨®n sin darse cuenta del error.

Pidieron la aprobaci¨®n a Vincent Fratta, un ejecutivo de Citibank en Delaware. Fratta, creyendo tambi¨¦n err¨®neamente que se estaba procesando correctamente, respondi¨® a Raj por correo electr¨®nico: ¡°Parece que est¨¢ bien, por favor proceda. El principal va a la cuenta interna¡±. Cuando Raj fue a ejecutar la operaci¨®n le salt¨® un aviso: ¡°Atenci¨®n, est¨¢ enviando fondos fuera del banco. ?Desea continuar?¡±. Raj pens¨® que el ordenador se estaba refiriendo a los intereses y no le dio importancia. Se fue a casa tan tranquilo ese 11 de agosto de 2020.

La ma?ana siguiente fue fren¨¦tica. Cuando Raj descubri¨® que el dinero no estaba, se lo comunic¨® a Fratta. Este habl¨® con su jefe: ¡°Malas noticias¡±, le dijo, seg¨²n la sentencia. Al principio pensaron que hab¨ªa habido un error inform¨¢tico. Al cabo de unas horas eran conscientes del fallo humano. A las 14.25, Citigroup empez¨® a enviar solicitudes de devoluci¨®n de los fondos err¨®neamente transferidos. A las 18.00 volvi¨® a reclamarlos. Al d¨ªa siguiente los pidi¨® de nuevo.

Como gran parte del dinero no llegaba, mand¨® otra notificaci¨®n al cabo de unos d¨ªas: ¡°Los fondos de Citibank le fueron remitidos por error. Para que quede claro, esos fondos pertenecen ¨²nicamente a Citibank; no son fondos del prestatario ni de la l¨ªnea de Pr¨¦stamo Revlon 2016. En vista de esta transferencia err¨®nea, usted est¨¢ legalmente obligado a devolver esos fondos y, como es pr¨¢ctica habitual en el sector cuando se producen transferencias de fondos por error, esperamos que devuelva esos fondos a Citibank inmediatamente¡±, advert¨ªa.

Un juicio por Zoom

Al final, unos 200 tenedores de deuda de Revlon que hab¨ªan recibido la transferencia err¨®nea, devolvieron el dinero: unos 385 millones de d¨®lares. Sin embargo, 10 firmas que representaban a otros 126 acreedores se negaron a reintegrar los restantes 500 millones de d¨®lares. Citibank no tard¨® ni una semana en acudir a los tribunales.

El primer juicio se celebr¨® por Zoom en diciembre de 2020 por la pandemia de covid. El juez concluy¨® que ese era el dinero que deb¨ªa Revlon a los acreedores, que estos no hab¨ªan hecho nada malo, que no pod¨ªan ni imaginar que Citi cometiera un error as¨ª y que simplemente la deuda se hab¨ªa saldado. No ten¨ªan que devolver el dinero.

Citibank recurri¨® y ahora los jueces le dan la raz¨®n: ¡°Los demandados no est¨¢n protegidos de las reclamaciones de Citibank para la restituci¨®n (...) ya que estaban sobre aviso de que el inesperado y sorprendente reembolso aparente de la totalidad del importe principal de sus pr¨¦stamos era atribuible a un error¡±, dice la sentencia.

Los jueces subrayan las ¡°se?ales de alarma¡± evidentes que hac¨ªan pensar que los pagos se trataban de un error. Una de ellas es la ausencia de la notificaci¨®n de reembolso anticipado, que habr¨ªa sido obligatoria. M¨¢s importante, ¡°un hipot¨¦tico inversor prudente, que recibiera repentinamente un prepago no anunciado del principal del pr¨¦stamo se habr¨ªa asombrado, a la luz de la aparente insolvencia profunda de Revlon, de que pudiera encontrar los recursos para realizar un pago de casi 1.000 millones de d¨®lares¡±, dicen. Tambi¨¦n resaltan el hecho de que la deuda cotizase a 20-30 centavos por d¨®lar. Los jueces concluyen que ¡°una investigaci¨®n razonable [por parte de quienes recibieron el dinero] habr¨ªa revelado el error¡±.

Con todo ello, anulan la sentencia del juez de distrito y le remiten el caso para que sentencie de acuerdo con su criterio. El dinero, mientras, sigue congelado a la espera de que haya una sentencia firme.

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