Arrecian las protestas en el sur de Per¨² tras la gran movilizaci¨®n de Lima

Las protestas y los cortes de carreteras de los manifestantes que exigen la renuncia de la presidenta de Per¨², Dina Boluarte, se mantienen este viernes en la mayor¨ªa de los departamentos del pa¨ªs, sobre todo en el sur, donde qued¨® bloqueado tambi¨¦n el acceso por tren al Machu Picchu. El estallido social que se inici¨® el pasado 7 de diciembre tras el autogolpe fallido de Pedro Castillo y su posterior detenci¨®n ha elevado la presi¨®n contra el Gobierno, pero la mandataria y su gabinete han opt...

Las protestas y los cortes de carreteras de los manifestantes que exigen la renuncia de la presidenta de Per¨², Dina Boluarte, se mantienen este viernes en la mayor¨ªa de los departamentos del pa¨ªs, sobre todo en el sur, donde qued¨® bloqueado tambi¨¦n el acceso por tren al Machu Picchu. El estallido social que se inici¨® el pasado 7 de diciembre tras el autogolpe fallido de Pedro Castillo y su posterior detenci¨®n ha elevado la presi¨®n contra el Gobierno, pero la mandataria y su gabinete han optado por atrincherarse. La hip¨®tesis de explorar un di¨¢logo entre las autoridades y los manifestantes a¨²n no est¨¢ sobre la mesa. Boluarte acus¨® el jueves a los que participaron en la primera marcha que buscaba llegar hasta el centro de Lima de intentar ¡°generar caos para tomar el poder¡±.

Los violentos enfrentamientos que se registraron en algunos barrios en la capital contin¨²an este viernes en varias provincias del interior, de Arequipa a Puno. All¨ª es donde se ha producido la mayor represi¨®n policial y donde muri¨® otro joven, el n¨²mero 55 desde que empez¨® la crisis. El despliegue policial de casi 12.000 efectivos impidi¨® que las organizaciones civiles de la sierra que vertebran la protesta alcanzaran el Congreso y el Palacio de Gobierno, pero no detuvo la ola de indignaci¨®n que recorre el pa¨ªs andino.

Las fuerzas de seguridad ten¨ªan la misi¨®n de aminorar el impacto de la denominada Gran Marcha de los Cuatro Suyos, as¨ª bautizada en referencia a la movilizaci¨®n que acab¨® con el r¨¦gimen de Alberto Fujimori. La gran inc¨®gnita era si los lime?os se sumar¨ªan en masa, lo que sucedi¨® hasta cierto punto el d¨ªa anterior a la marcha. Los estudiantes de las principales universidades p¨²blicas de la capital, como la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y la Universidad Nacional de Ingenier¨ªa (UNI), les hab¨ªan tendido la mano a los manifestantes, ofreci¨¦ndoles refugio y donaciones.

Miles de personas empezaron a desfilar a as cuatro de la tarde en diversos puntos de la capital. El cerco policial y la falta de organizaci¨®n de los manifestantes hicieron que la convocatoria quedara lejos de su objetivo de acercarse al coraz¨®n del poder pol¨ªtico lime?o. Hubo cargas policiales en Abancay, una avenida estrat¨¦gica que conduce hasta la sede del poder legislativo. No hubo muertos, aunque s¨ª se registraron algunos heridos. A diferencia de las regiones de la sierra sur, en la capital la polic¨ªa no emple¨® armas de fuego y la estrategia para controlar las movilizaciones no fue la misma que en anteriores ocasiones.

Al atardecer, la plaza San Mart¨ªn del centro de Lima parec¨ªa un marco favorable para la protesta. Fue en ese preciso instante cuando una vieja casona de una de las esquinas de la plaza comenz¨® a arder. En medio de la confusi¨®n, la polic¨ªa recuper¨® terreno, cercando otra vez la plaza. A medida que el fuego consum¨ªa el inmueble, se consumi¨® la marcha. Y los manifestantes acabaron por dispersarse. Se necesitaron m¨¢s de cinco autobombas y tres cisternas de agua para controlar el incendio. Un grupo de vecinas, que no se identificaron, se?alaron que el siniestro fue provocado por una bomba lacrim¨®gena que cay¨® en la azotea, aunque el Gobierno lo niega.

Mientras las llamas del edificio te?¨ªan de rojo el cielo de la capital peruana, la presidenta Dina Boluarte dio un mensaje a la naci¨®n, en el que lejos de empatizar con un gran grupo de la ciudadan¨ªa que march¨® en las calles, repudi¨® la protesta al tildar a los manifestantes de ¡°malos ciudadanos que buscan quebrar el Estado de derecho¡±. Asegur¨® que ¡°el Gobierno est¨¢ firme¡± y su gabinete ¡°m¨¢s unido que nunca¡±. Mientras tanto, en el sur fallec¨ªa un ciudadano que hab¨ªa quedado gravemente herido el d¨ªa anterior por el impacto de un arma de fuego. Se trataba de la segunda v¨ªctima de Macusani, provincia de Carabaya, donde un grupo de pobladores incendi¨® una comisar¨ªa y la sede del Poder Judicial en la noche del mi¨¦rcoles. Pero no fue el ¨²nico incidente en la regi¨®n que colinda con Bolivia. Nuevamente, los habitantes intentaron tomar el aeropuerto Inca Manco C¨¢pac y se enfrentaron a la polic¨ªa. El resultado: siete civiles y dos agentes heridos.

En Arequipa, la convulsi¨®n sum¨® la v¨ªctima n¨²mero 55 del conflicto. Jhancarlo Condori Arcana, un hombre de 30 a?os que recibi¨® una herida letal en el abdomen. En la Ciudad Blanca los manifestantes tambi¨¦n trataron de ingresar por la fuerza al aeropuerto Alfredo Rodr¨ªguez Ball¨®n, pero no lo consiguieron. El Ejecutivo declar¨® a las regiones de Amazonas, La Libertad y Tacna en estado de emergencia durante 30 d¨ªas. Despu¨¦s de esta primera gran marcha en la capital, los manifestantes se mantendr¨¢n en las calles.

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