La exvicepresidenta de la Euroc¨¢mara Eva Kaili sale de prisi¨®n mientras el juez busca nuevos implicados en el ¡®Qatargate¡¯
La eurodiputada griega, que se declara inocente, ha pasado cuatro meses encerrada y comienza ahora un arresto domiciliario en Bruselas
Por una vez, la agitaci¨®n no ten¨ªa lugar este viernes en el Parlamento Europeo, sino a un centenar de metros, en el bloque de apartamentos adonde lleg¨® a media ma?ana la griega Eva Kaili tras pasar cuatro meses en prisi¨®n preventiva como una de las principales inculpadas por el Qatargate. La exvicepresidenta de la Euroc¨¢mara ha sido la ¨²ltima de los acusados en abandonar la c¨¢rcel po...
Por una vez, la agitaci¨®n no ten¨ªa lugar este viernes en el Parlamento Europeo, sino a un centenar de metros, en el bloque de apartamentos adonde lleg¨® a media ma?ana la griega Eva Kaili tras pasar cuatro meses en prisi¨®n preventiva como una de las principales inculpadas por el Qatargate. La exvicepresidenta de la Euroc¨¢mara ha sido la ¨²ltima de los acusados en abandonar la c¨¢rcel por la trama de presuntos sobornos de pa¨ªses como Qatar y Marruecos que ha convulsionado a las instituciones europeas. Con su paso a r¨¦gimen de arresto domiciliario, el caso entra en una nueva fase, cuyo final judicial nadie se atreve a¨²n a precisar.
Mientras, sus todav¨ªa compa?eros de hemiciclo ¡ªtanto Kaili como otro de los inculpados arrestados, el belga Marc Tarabella, conservan el acta de eurodiputados y cobran su salario como tales¡ª buscan acelerar unas reformas para evitar que un nuevo Qatargate vuelva a poner en duda el prestigio y los valores del entramado europeo.
La Eva Kaili que lleg¨® este 14 de abril a su apartamento de Bruselas, en un coche negro cuyas ventanillas tintadas baj¨® para saludar fugazmente a la prensa antes de desaparecer en el garaje, era una mujer sonriente pese a los estragos de haber pasado 126 d¨ªas recluida en una celda. Una Eva Kaili muy distinta a la que, desde esa misma casa, otro viernes, un fr¨ªo y gris 9 de diciembre, vio c¨®mo su vida y carrera se derrumbaban s¨²bitamente cuando la polic¨ªa arrestaba a la salida del domicilio a su pareja, el asistente parlamentario Francesco Giorgi. Poco despu¨¦s ca¨ªa su padre, detenido con una maleta llena de dinero y, finalmente, lo hac¨ªa la propia Kaili, cuya inmunidad parlamentaria qued¨® anulada al ser sorprendida en lo que la justicia consider¨® un intento flagrante de ocultar pruebas.
¡°Mi hija me est¨¢ esperando y estoy muy contenta de volver a estar con ella¡±, afirm¨® Kaili a su llegada, en referencia a la ni?a de dos a?os que tiene con Giorgi. El italiano, que al contrario que Kaili s¨ª ha confesado su implicaci¨®n en el Qatargate, se encuentra en arresto domiciliario desde finales de febrero. En v¨ªsperas de la salida de Kaili de prisi¨®n, con un brazalete electr¨®nico para vigilar en todo momento que no abandona su vivienda, sus abogados hab¨ªan dado a entender que la griega no quiere saber nada de su compa?ero; le reprocha haberla implicado en una trama de la que ella siempre se ha declarado inocente pese a que en su casa se hallaron bolsas y maletas de dinero.
¡°La lucha contin¨²a con la determinaci¨®n de mis abogados. Hablaremos pronto¡±, se limit¨® a decir Kaili. ¡°Sale de prisi¨®n con dignidad y sin haber admitido delitos que no ha cometido¡±, hab¨ªa insistido la v¨ªspera su defensor, el abogado griego Michalis Dimitrakopoulos. ¡°El camino que le queda sigue siendo dif¨ªcil, pero va a pelear para probar su inocencia. Sue?a con ser absuelta y volver a Grecia a abrazar a los compatriotas que confiaron en ella¡±.
El camino es largo. El caso sigue en proceso de instrucci¨®n y fuentes conocedoras del expediente dudan de que esta concluya antes de diciembre. Luego queda fijar fecha para el juicio, algo que podr¨ªa tardar a?os.
Otra duda es si habr¨¢ nuevas detenciones: m¨¢s all¨¢ de los inculpados hasta ahora por corrupci¨®n y blanqueo de dinero ¡ªKaili, Giorgi, Tarabella, el sindicalista Luca Visentini y el presunto cabecilla de la trama, el exeurodiputado italiano Pier Antonio Panzeri¡ª, el juez investiga otros nombres ligados a la causa, entre ellos varios eurodiputados m¨¢s.
Desde que Panzeri firm¨® en enero un acuerdo de ¡°arrepentido¡± con la justicia belga a cambio de una condena menor, tambi¨¦n se han filtrado m¨¢s nombres: los de la belga Marie Arena y las eurodiputadas italianas Alessandra Moretti y Lara Comi. Todas niegan cualquier implicaci¨®n. Por el momento, el ¨²nico al que la justicia belga busca es el tambi¨¦n italiano Andrea Cozzolino. Este se halla bajo arresto domiciliario en N¨¢poles a la espera de que la justicia italiana acepte su deportaci¨®n, despu¨¦s de que el Parlamento Europeo aprobara en febrero el levantamiento de su inmunidad, igual que la de Tarabella. La justicia belga no ha vuelto a emitir nuevos suplicatorios.
Salvo Comi, que pertenece al Partido Popular Europeo (PPE), los sospechosos formaban parte del grupo Socialistas y Dem¨®cratas (S&D) presidido por la espa?ola Iratxe Garc¨ªa. La formaci¨®n europea forz¨® a los se?alados a abandonar sus funciones en el seno del grupo nada m¨¢s desatarse el esc¨¢ndalo. Kaili fue destituida como vicepresidenta de la Euroc¨¢mara.
Pese a ello, tanto Kaili como Tarabella y Cozzolino continuar¨¢n percibiendo buena parte de su salario mientras mantengan su acta, algo que es una decisi¨®n nacional y no de la Euroc¨¢mara. As¨ª, salvo las dietas por asistir a votaciones en plenos, tienen derecho a su paga, que supera los 7.000 euros mensuales. La griega no ha revelado por el momento sus planes profesionales, pero Tarabella s¨ª ha manifestado, desde su salida de prisi¨®n esta semana, su intenci¨®n de continuar, en la medida de lo posible, como alcalde de la localidad belga de Anthisnes y como eurodiputado.
¡°Va a trabajar como si estuviera confinado, como durante la covid. No puede votar, pero puede enmendar textos o seguir debates en comisi¨®n. Es una actividad casi normal¡±, explic¨® a EL PA?S un portavoz del eurodiputado belga. Desde su casa, pues, seguir¨¢ el nuevo pleno que se celebra en Estrasburgo este lunes. Una fecha en la que la presidenta de la Euroc¨¢mara, Roberta Metsola, quiere empezar a implementar algunas de las principales reformas que ha impulsado para evitar un nuevo Qatargate. A apenas un a?o de las nuevas elecciones europeas, los tiempos aprietan.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.