Alemania registra un r¨¦cord de delitos con motivaci¨®n pol¨ªtica y alerta de que la ultraderecha es la principal amenaza

Estudiantes que pintan esv¨¢sticas en los pupitres y hacen el saludo hitleriano en los pasillos de la escuela; insultos racistas a ni?os de origen turco en un campamento en Brandeburgo; ataques de ultraderechistas a alumnos LGTBI de la universidad de Potsdam¡­ En las ¨²ltimas semanas la prensa alemana ha denunciado varios incidentes relacionados con la extrema derecha en Estados federados del este. Casos aislados, pero que van en au...

Estudiantes que pintan esv¨¢sticas en los pupitres y hacen el saludo hitleriano en los pasillos de la escuela; insultos racistas a ni?os de origen turco en un campamento en Brandeburgo; ataques de ultraderechistas a alumnos LGTBI de la universidad de Potsdam¡­ En las ¨²ltimas semanas la prensa alemana ha denunciado varios incidentes relacionados con la extrema derecha en Estados federados del este. Casos aislados, pero que van en aumento y preocupan cada vez m¨¢s a las fuerzas de seguridad. Alemania registr¨® en 2022 una cifra r¨¦cord de delitos con motivaci¨®n pol¨ªtica, seg¨²n los datos presentados este martes por el Ministerio del Interior.

Nunca desde que empez¨® a elaborarse esta estad¨ªstica, en 2001, se hab¨ªan contabilizado tantos delitos de este tipo: casi 59.000, un 7% m¨¢s que el a?o anterior. Desde hace unos a?os, Alemania considera a la ultraderecha la principal amenaza para la seguridad del pa¨ªs, por delante del terrorismo islamista. Casi 23.500 de esos delitos de car¨¢cter pol¨ªtico o ideol¨®gico est¨¢n vinculados a ideolog¨ªas de derechas, un incremento tambi¨¦n del 7% respecto a 2021, recoge el informe anual. Las fuerzas de seguridad est¨¢n detectando una ¡°mayor tendencia a la radicalizaci¨®n en partes de la poblaci¨®n¡±, ha alertado este martes el presidente de Oficina Federal de Polic¨ªa Criminal (BKA), Holger M¨¹nch.

La polic¨ªa y los servicios de inteligencia monitorizan al detalle la actividad de los Reichsb¨¹rger (ciudadanos del Imperio), un grupo extremista de derechas que no reconoce la legitimidad de la Rep¨²blica Federal que sali¨® de la II Guerra Mundial. Especialmente desde que a finales del a?o pasado detuvieran en una de las mayores redadas antiterroristas de los ¨²ltimos a?os a 25 personas que planeaban la toma por la fuerza del Parlamento. Los conspiradores ten¨ªan armas y munici¨®n y contaban entre sus filas con antiguos militares. La ministra del Interior, Nancy Faeser, se ha referido espec¨ªficamente a la ¡°irracionalidad y peligrosidad¡± de estos grupos, cuya actividad se ha disparado a juzgar por los delitos que se les atribuyen: 1.860 casos, un 40% m¨¢s que el a?o anterior.

Sin embargo, los delitos que m¨¢s han aumentado seg¨²n el informe anual de la BKA no son ni los de extrema derecha ni de extrema izquierda ¡ªestos ¨²ltimos descendieron un 31% hasta alrededor de 7.000¡ª sino los casos que no se pueden asignar claramente debido a su ¡°difusa motivaci¨®n ideol¨®gica¡±. En esta categor¨ªa se incluyen por ejemplo los relacionados con las protestas contra las restricciones por la pandemia de coronavirus.

La Oficina para la protecci¨®n de la Constituci¨®n (BfV), los servicios secretos internos de Alemania, decidieron en 2021 someter a vigilancia al movimiento conocido como Querdenker (pensadores laterales o alternativos) que lider¨® las manifestaciones contra las medidas del Gobierno. Algunos reunieron a varias decenas de miles de personas, sobre todo en Berl¨ªn. Entre los participantes en estas protestas hab¨ªa negacionistas de la covid-19, antivacunas, creyentes en teor¨ªas de la conspiraci¨®n, esot¨¦ricos pero tambi¨¦n muchos partidarios de la ultraderecha. Seg¨²n un informe de la BfV, la extrema derecha aprovech¨® el malestar de una parte de la ciudadan¨ªa por las restricciones a las libertades individuales para lanzar sus consignas y tratar de capitalizar la protesta.

¡°El extremismo de derechas sigue siendo la mayor amenaza¡±, ha subrayado este martes M¨¹nch en rueda de prensa en Berl¨ªn. Faeser, por su parte, ha se?alado que los datos reflejan los cambios y la incertidumbre que viven los ciudadanos por los conflictos surgidos estos ¨²ltimos a?os, como la pandemia y la invasi¨®n rusa de Ucrania. La BKA ha registrado un aumento (del 9%) de los delitos contra los refugiados. Tambi¨¦n se han contabilizado m¨¢s casos que se clasifican como de ¡°ideolog¨ªa extranjera¡±, relacionados tanto con la guerra en Ucrania ¨Dprincipalmente insultos o amenazas en manifestaciones de car¨¢cter antirruso o antiucranio¨D como con el conflicto entre Turqu¨ªa y el Partido de los Trabajadores de Kurdist¨¢n (PKK) o la situaci¨®n en Ir¨¢n.

Los servicios secretos alemanes clasificaron hace unos d¨ªas a las juventudes del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) como un grupo extremista que amenaza a la democracia. ¡°Ya no cabe duda de que persiguen aspiraciones anticonstitucionales¡±, asegur¨® Thomas Haldenwang, el jefe de la Oficina para la Protecci¨®n de la Constituci¨®n (BfV), que acus¨® a la organizaci¨®n Joven Alternativa para Alemania (JA) de ¡°agitar¡± contra los refugiados y los migrantes. El partido AfD est¨¢ considerado sospechoso de extremismo, un escal¨®n por debajo en la clasificaci¨®n.

Los centros de asesoramiento para las v¨ªctimas de violencia ultraderechista, racista y antisemita han presentado tambi¨¦n este martes sus propias estad¨ªsticas, que confirman que los ataques de la extrema derecha ¡°van en aumento¡±, ha se?alado Robert Kusche, director de las Oficinas Regionales de Educaci¨®n, Integraci¨®n y Democracia de Sajonia. El informe se?ala un hecho especialmente alarmante: que el n¨²mero de v¨ªctimas menores de edad se ha doblado en un a?o, al pasar de 288 en 2021 a 520 en 2022.

Las protestas que tienen que ver con la emergencia clim¨¢tica dejaron tambi¨¦n m¨¢s delitos en las estad¨ªsticas policiales, 1.600 el a?o pasado. La ministra ha asegurado ¡°no entender¡± acciones como las que protagoniza el grupo ecologista Letzte Generation (¨²ltima generaci¨®n), que peri¨®dicamente organiza cortes de carreteras en los que los activistas se pegan al asfalto o a los coches. ¡°La crisis clim¨¢tica se combate desde la democracia¡±, ha se?alado. ¡°La protesta leg¨ªtima¡±, ha a?adido, ¡°termina donde empieza el delito¡±.

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