El chavismo y la oposici¨®n acercan posiciones para liberar los fondos congelados en el exterior

El Gobierno chavista y la oposici¨®n venezolana est¨¢n cerca de lograr un acuerdo para ejecutar una parte de los fondos que tiene el pa¨ªs en algunos bancos internacionales, congelados desde la crisis pol¨ªtica de 2019 y la imposici¨®n de las sanciones internacionales en contra el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro. Ese dinero, seg¨²n acordaron las partes en noviembre en la mesa de di¨¢logo en M¨¦xico, se destinar¨ªa a atender la crisis social del pa¨ªs....

El Gobierno chavista y la oposici¨®n venezolana est¨¢n cerca de lograr un acuerdo para ejecutar una parte de los fondos que tiene el pa¨ªs en algunos bancos internacionales, congelados desde la crisis pol¨ªtica de 2019 y la imposici¨®n de las sanciones internacionales en contra el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro. Ese dinero, seg¨²n acordaron las partes en noviembre en la mesa de di¨¢logo en M¨¦xico, se destinar¨ªa a atender la crisis social del pa¨ªs.

El monto total es de 3.000 millones de d¨®lares en bancos de Reino Unido, Estados Unidos, Portugal y Francia. Aunque los acuerdos planteados se afiancen, el monto total no estar¨ªa disponible inmediatamente. Podr¨ªan ser liberados, en principio, unos 500 o 600 millones de d¨®lares. El dinero, comenta una fuente que ha preferido no identificarse, ¡°no va a resolver todo el problema, pero ayudar¨ªa much¨ªsimo en los casos m¨¢s urgentes¡±. ¡°Ya tenemos un grupo de hospitales priorizados para la inversi¨®n¡±, asegura.

Las negociaciones se desarrollan en el marco del denominado Acuerdo Social, una de las ramas que se discuten en M¨¦xico, en unos di¨¢logos que buscan conjurar la crisis pol¨ªtica para celebrar unas elecciones justas en 2024 y que est¨¢n paralizados desde noviembre. La lentitud de los procedimientos de la pol¨ªtica y la desconfianza entre ambas partes exaspera a los activistas civiles que participan en estas conversaciones, para quienes lo fundamental es que el dinero sea invertido de una vez en la emergencia social del pa¨ªs.

Para que el acuerdo se concrete, afirman fuentes cercanas, hace falta el visto bueno definitivo de Nicol¨¢s Maduro. Tanto la oposici¨®n venezolana como Estados Unidos, por su parte, parecen listos. En los ¨²ltimos encuentros, el chavismo plante¨® la necesidad de que ese dinero sea nacionalizado e ingrese al Banco Central de Venezuela, por ser estos, finalmente, activos de la rep¨²blica. La oposici¨®n venezolana se opone radicalmente a esta demanda, argumentando que la corrupci¨®n generalizada evaporar¨ªa muy r¨¢pidamente esos recursos sin que nadie d¨¦ explicaciones.

Los fundamentos del acuerdo actual, que se firm¨® el pasado noviembre en M¨¦xico, prev¨¦n que el dinero lo administre Naciones Unidas, apoy¨¢ndose en instancias como el Programa Mundial de Alimentos, la Organizaci¨®n Panamericana de la Salud y Unicef. Seg¨²n fuentes cercanas al proceso, Estados Unidos se ha comprometido a intermediar y tomar las medidas necesarias para proteger estos activos de las acciones legales que puedan emprender algunos acreedores.

En el mapa de prioridades de inversi¨®n que se estuvo discutiendo entre las facciones pol¨ªticas venezolanas y todo el entorno de activistas y voluntarios que atienden la crisis en el pa¨ªs est¨¢ la inversi¨®n en salud, el refuerzo de los planes de vacunaci¨®n ¨Centre los m¨¢s rezagados de Sudam¨¦rica- y el pago de deudas al fondo rotatorio de a Organizaci¨®n Panamericana de la Salud. Tambi¨¦n dinero para la educaci¨®n y la nutrici¨®n infantil y recursos para atender los problemas del servicio el¨¦ctrico.

En las ¨²ltimas semanas, Maduro hab¨ªa colocado entre sus exigencias la liberaci¨®n de estos recursos para darle continuidad al resto de las negociaciones en M¨¦xico. Tanto Maduro como Jorge Rodr¨ªguez, uno de los voceros fundamentales del chavismo, se hab¨ªan quejado agriamente por los retrasos en la liberaci¨®n del dinero, acusando a la oposici¨®n de ¡°no tener palabra y no ser gente confiable¡±.

Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.