Nueva York acusa de terrorismo al detenido por asesinar al consejero delegado de UnitedHealthcare
Un gran jurado imputa formalmente a Luigi Mangione por sendos delitos de asesinato en primer y segundo grado, y otros nueve cargos. El primero conlleva la consideraci¨®n de acto terrorista
Un gran jurado de Manhattan ha acusado este martes de terrorismo al joven de 26 a?os que presuntamente dispar¨® y mat¨® el pasado 4 de diciembre a Brian Thompson, consejero delegado de la compa?¨ªa de seguros UnitedHealthcare, a las puertas de un hotel del centro de Nueva York, ha informado este martes el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg. Mangione fue detenido el lunes de la semana pasada en un McDonald¡¯s de Altoona (Pensilvania) e imputado en el tribunal local por varios delitos, como tenencia ilegal de armas y falsificaci¨®n de documentos. El juez decret¨® prisi¨®n incondicional y el acusado est¨¢ recluido desde entonces en el penal estatal de Huntingdon.
A la espera de su extradici¨®n desde Pensilvania, quedaban pendientes de formular los cargos por el asesinato perpetrado en Nueva York. Horas despu¨¦s de ser detenido, la oficina del fiscal del distrito de Manhattan present¨® documentos acusando a Mangione de asesinato y otros delitos, once en total. La imputaci¨®n formal de este martes, que se basa en esa documentaci¨®n, atribuye al joven, entre otros, sendos cargos de asesinato en primero y segundo grado, posesi¨®n ilegal de un arma y falsificaci¨®n de documentos, como el carn¨¦ de conducir de Nueva Jersey que us¨® para registrarse en un hostal de Manhattan. La novedad es la consideraci¨®n del delito de asesinato en primer grado como un acto de terrorismo, gracias a una ley de Nueva York derivada del 11-S que a?ade esa agravante en casos de gran impacto. El terrorismo era tambi¨¦n una de las hip¨®tesis que apuntaban investigadores y expertos en terrorismo dom¨¦stico al analizar un crimen que ha sacudido el billonario negocio de los seguros de salud en EE UU. El delito de asesinato en primer grado puede deparar a Mangione una cadena perpetua si es declarado culpable, ha subrayado Bragg.
El fiscal de distrito ha se?alado que la muerte de Thompson en una calle del centro de Manhattan ¡°fue un asesinato que pretend¨ªa provocar terror. Y esa fue la reacci¨®n (¡) Fue un asesinato aterrador, bien planeado y deliberado que pretend¨ªa causar conmoci¨®n e intimidaci¨®n¡±, ha dicho este martes en una conferencia de prensa. ¡°Ocurri¨® en una de las zonas m¨¢s bulliciosas de nuestra ciudad, amenaz¨® la seguridad de los residentes locales y de los turistas por igual, de los viajeros y de los empresarios que acaban de empezar su d¨ªa¡±, ha a?adido Bragg.
Thompson, de 50 a?os y padre de dos hijos adolescentes, fue tiroteado por la espalda, a corta distancia, cuando a primera hora de la ma?ana se dirig¨ªa a un hotel donde UnitedHealthcare ¡ªla mayor aseguradora m¨¦dica de Estados Unidos, con 50 millones de clientes¡ª, celebraba la conferencia anual de inversores. El asesinato aflor¨® un hondo malestar de los asegurados contra las compa?¨ªas privadas que dan cobertura sanitaria de EE UU, y las redes sociales se llenaron de relatos de terror sobre los abusos y el maltrato de las aseguradoras, como denegar coberturas, el limbo en que muchos pacientes se quedaban por desacuerdos entre m¨¦dicos y aseguradoras a la hora de asignar el cargo y las cuantiosas facturas que muchos ciudadanos se ven obligados a afrontar pese a pagar religiosamente sus p¨®lizas mensuales. En EE UU, salvo los dos planes federales de cobertura sanitaria para mayores de 65 a?os (Medicare) y para rentas bajas (Medicaid), no existe un sistema de sanidad universal.
El miedo provocado por el asesinato de Thompson hizo que muchas compa?¨ªas del ramo, con UnitedHealthcare a la cabeza, retiraran pr¨¢cticamente en el acto de sus p¨¢ginas webs los organigramas que mostraban a sus directivos con sus correspondientes fotos, y que empresas cuyos ejecutivos carec¨ªan de seguridad privada o escoltas, como el propio Thompson, se plantearan contratar guardaespaldas. Tras el asesinato, en las calles de Nueva York aparecieron numerosos carteles de wanted (se busca) con los nombres y retratos de otros directivos del sector. La avalancha de furia en Internet llev¨® a la polic¨ªa a considerar que exist¨ªa una ¡°amenaza elevada¡± para los responsables de las firmas.
Una ley de terrorismo debida al 11-S
Una ley neoyorquina aprobada tras los atentados del 11 de septiembre permite a los fiscales imputar delitos como actos de terrorismo cuando ¡°pretendan intimidar o coaccionar a la poblaci¨®n civil, influir en las pol¨ªticas de una unidad de gobierno mediante intimidaci¨®n o coacci¨®n y afectar a la conducta de una unidad de gobierno mediante asesinato, atentado o secuestro¡±. Los fiscales han utilizado la ley en diversos contextos.
Tras la detenci¨®n de Mangione en Altoona, detectives del Departamento de Polic¨ªa de Nueva York viajaron a Pensilvania para encargarse de la investigaci¨®n, en paralelo al proceso instruido en Pensilvania. Su abogado en ese Estado ¡ªtiene otra letrada en Nueva York¡ª ha cuestionado las pruebas de falsificaci¨®n y el fundamento jur¨ªdico de la acusaci¨®n de posesi¨®n de armas, una pistola y un silenciador, algunas de cuyas partes fueron impresas en 3D a partir de modelos muy f¨¢ciles de encontrar en Internet. El abogado tambi¨¦n ha se?alado que Mangione se opone en principio a la extradici¨®n a Nueva York, aunque la habitual demora en casos parecidos, como por ejemplo la extradici¨®n a Nueva York del acusado de apu?alar a dos personas en el MoMa en 2022, podr¨ªa retenerle en Pensilvania durante un m¨ªnimo de seis semanas. Mangione tiene dos audiencias judiciales programadas para este jueves en Pensilvania, incluida una de extradici¨®n, se?al¨® Bragg. Seg¨²n su abogado, el joven tiene previsto declararse inocente en Pensilvania y en Nueva York.
La teor¨ªa que manejan los investigadores es que Mangione, licenciado en inform¨¢tica por una universidad de la prestigiosa la Ivy League y perteneciente a una importante familia de Maryland, actu¨® movido por su ira contra el sistema sanitario estadounidense. Entre los documentos que fueron hallados en su mochila tras ser detenido, figuraba una carta manuscrita en la que, a modo de manifiesto o declaraci¨®n de intenciones, llamaba ¡°par¨¢sitas¡± a las compa?¨ªas de seguros de salud y se quejaba de la codicia de este tipo de empresas. En tres casquillos de las balas de nueve mil¨ªmetros que us¨® para matar a Thompson, pod¨ªan leerse las palabras ¡°defender¡±, ¡°negar¡± y ¡°deponer¡± (o, en el contexto judicial, declarar), un claro eco del lema que esgrimen las compa?¨ªas de seguros para rechazar reclamaciones de los clientes.