¡°Estamos rompiendo el pacto de silencio alrededor del caso Ayotzinapa¡±
El investigador anunci¨® esta semana la primera identificaci¨®n de uno de los 43 en cinco a?os. ¡°El hallazgo de Christian Rodr¨ªguez controvierte la hip¨®tesis del basurero¡±, defiende G¨®mez
El caso Ayotzinapa ilustra todas las capas de horror del M¨¦xico contempor¨¢neo. Grupos de criminales organizados, coludidos con polic¨ªas municipales de varios pueblos, solapados por la desidia de autoridades estatales y federales. Investigadores incapaces de trabajar con la ley en la mano. V¨ªctimas abandonadas... Han pasado casi seis a?os del ataque contra los estudiantes de Ayotzinapa en el municipio de Iguala y las preguntas dominan todav¨ªa el relato: ?por qu¨¦ atacaron a los estudiantes? ?Qu¨¦ hicieron con los 43 desaparecidos? ?Por qu¨¦ ocurri¨® algo as¨ª y por qu¨¦ no se ha logrado alcanz...
El caso Ayotzinapa ilustra todas las capas de horror del M¨¦xico contempor¨¢neo. Grupos de criminales organizados, coludidos con polic¨ªas municipales de varios pueblos, solapados por la desidia de autoridades estatales y federales. Investigadores incapaces de trabajar con la ley en la mano. V¨ªctimas abandonadas... Han pasado casi seis a?os del ataque contra los estudiantes de Ayotzinapa en el municipio de Iguala y las preguntas dominan todav¨ªa el relato: ?por qu¨¦ atacaron a los estudiantes? ?Qu¨¦ hicieron con los 43 desaparecidos? ?Por qu¨¦ ocurri¨® algo as¨ª y por qu¨¦ no se ha logrado alcanzar la verdad en tanto tiempo?
Anestesiados contra toda promesa que llegara desde el poder, los familiares de los 43 vieron en la elecci¨®n de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador algo parecido a una esperanza. Para entonces, julio de 2018, la investigaci¨®n se hab¨ªa estancado. La vieja fiscal¨ªa no se hab¨ªa movido de las conclusiones a las que hab¨ªa llegado en 2014: un grupo criminal, Guerreros Unidos, coordinado con polic¨ªas de Iguala y otros pueblos atac¨® a los estudiantes. Desaparecieron a 43, que luego asesinaron y quemaron en un basurero cercano. Las familias y grupos de peritos independientes negaron esta hip¨®tesis.
L¨®pez Obrador prometi¨® justicia y orden¨® diligencia a la fiscal¨ªa nada m¨¢s llegar a la presidencia. En junio del a?o pasado, el nuevo fiscal, Alejandro Gertz, nombr¨® a Omar G¨®mez al frente de las pesquisas del caso. Delante ten¨ªa una tarea descomunal. No era solo investigar, deb¨ªa convencer. Un a?o m¨¢s tarde, las cosas marchan, aunque sea despacio. ¡°Estamos rompiendo el pacto de silencio alrededor del caso Ayotzinapa¡±, dice el fiscal.
Hace unos d¨ªas, G¨®mez anunci¨® que un trozo de hueso hallado en noviembre en Cocula, a 800 metros del basurero, perteneci¨® en vida a uno de los 43, Christian Rodr¨ªguez. En el momento en que desapareci¨®, Christian contaba 19 a?os. La entrevista empieza por el hallazgo de ese trozo de hueso que alguna vez fue parte de su cuerpo.
Pregunta: En la barranca de la carnicer¨ªa ¡ªdonde encontraron en noviembre el hueso de Christian¡ª se hicieron dos b¨²squedas durante la anterior administraci¨®n, una incluso con tecnolog¨ªa LIDAR, un tipo de l¨¢ser muy poderoso ?c¨®mo es que los anteriores investigadores no encontraron estos restos?
Respuesta: Bueno, se piensa que el ¨¢rea donde nosotros buscamos es el mismo lugar donde buscaron ellos, pero nosotros rescatamos los huesos en otro lugar, a 200 metros de donde buscaron ellos, en la parte de abajo de la barranca, donde se abre una ca?ada. Por la mec¨¢nica que nos comentaron de c¨®mo pasaron las cosas all¨ª, ten¨ªa una l¨®gica que encontr¨¢ramos algo en esa parte. Encontramos 132 fragmentos ¨®seos en total.
P. ?C¨®mo llegaron ustedes a ese lugar entonces?
R. Nos los dijo una fuente nueva, diferente.
P. ?Qu¨¦ nos puedes decir de esa fuente nueva?
R. Es una fuente que en su momento no se hab¨ªa acercado a la Fiscal¨ªa. As¨ª empezamos a recibir informaci¨®n, de fuentes que antes no se acercaron. Tan es as¨ª que hemos hecho m¨¢s de 20 b¨²squedas.
P. ?Y esta fuente es civil, fue servidor p¨²blico?
R. Ah¨ª quiero ser cuidadoso, es informaci¨®n reservada. Hemos querido ser muy cuidadosos, tener un di¨¢logo continuo con las familias y sus representantes. Yo creo que parte del da?o que sufrieron los familiares de los 43 pasa por una falta de cuidado. Cuando entr¨¦ al cargo, ellos me dijeron, ¡®Omar, h¨¢blanos con la verdad y a nosotros primero, no necesitamos enterarnos por los medios de algo que nos corresponde a nosotros¡¯.
P. En los hallazgos en la barranca de la carnicer¨ªa en 2014, los investigadores encontraron huesos sobre una cama de cenizas, como si hubiera habido fuego. En este caso, ?c¨®mo fue?
R. Sobre la superficie. No era una fosa. No hab¨ªa cenizas, nada. Eso lo daremos a conocer pr¨®ximamente. Es muy distinto al de 2014 y no puedo decir nada porque est¨¢ pendiente de judicializar. Al final, se trata del paradero de Christian, que es importante para construir la narrativa: ?por qu¨¦ llega ah¨ª?
P. Es la gran pregunta de estos d¨ªas.
R. El hallazgo de Christian nos abre la posibilidad de echar para atr¨¢s una investigaci¨®n de acuerdo a un marco l¨®gico, metodol¨®gico. Yo le¨ªa estos d¨ªas en la prensa que 800 metros ¡®no importan¡¯. No, ?800 metros son clave! Te cambia la perspectiva de la hip¨®tesis inicial. El hallazgo de Christian controvierte la hip¨®tesis de la incineraci¨®n de los estudiantes en el basurero.
P. Los anteriores administradores sostienen que ellos nunca dijeron que all¨ª quemaron a todos los estudiantes.
R. La prueba sobre la que soportaron su hip¨®tesis es que iban 43, 44 estudiantes.
P. La respuesta a la pregunta de c¨®mo lleg¨® ese trocito de hueso de Christian a esa barranca forma parte de una narrativa que no existe. O sea, nos hemos quedado sin narrativa¡
R. Lo que tengo ahora mismo es una prueba, fuerte y objetiva. Y a partir de eso empezamos a construir. Obviamente, la persona que nos llev¨® ah¨ª ha dicho cosas que forman parte de la reconstrucci¨®n de ese evento. Pero vamos a judicializar y no puedo decir nada: a¨²n tenemos que corroborar esa informaci¨®n. Hay que cuidar mucho la informaci¨®n, corroborar cada dato. Si judicializo cosas, quiero que sean fuertes. Les pido paciencia.
P. Estos d¨ªas se ha publicado en algunos medios que, superada la hip¨®tesis del basurero, hubo diferentes puntos donde los criminales llevaron a los estudiantes y all¨ª los mataron, ?esta narrativa se parece a lo que cree usted que podr¨ªa haber ocurrido?
R. No, no se parece.
P. Respecto a la participaci¨®n de la Polic¨ªa Federal en los hechos, la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos [CNDH] ha documentado que dos agentes que atestiguaron parte de los hechos no evitan la desaparici¨®n de los muchachos. ?Ustedes han analizado el papel de la Polic¨ªa Federal a nivel operativo esa noche?
R. S¨ª.
P. ?Y a nivel coordinaci¨®n? Porque el jefe de la Polic¨ªa Federal entonces en Guerrero era Omar Garc¨ªa Harfuch [actual jefe de la polic¨ªa de Ciudad de M¨¦xico, que sufri¨® un ataque a balazos en la capital hace dos semanas]
R. S¨ª, o sea, todos los actores que aparecen en los dos escenarios de la privaci¨®n de la libertad [de los estudiantes] son los cimientos desde donde hemos empezado a construir. Hemos puesto una lupa sobre la responsabilidad y el papel que jugaron los actores all¨ª. Y ese es uno de los principales puntos, porque el papel de la autoridad es proteger a la sociedad.
P. Hace dos semanas, el fiscal Gertz dijo que hab¨ªa ¨®rdenes de aprehensi¨®n pendientes, ?hay alguna que tiene que ver con los polic¨ªas federales?
R. Bueno, son parte de las autoridades que estamos investigando. Obviamente la participaci¨®n de todos pasa por qui¨¦nes eran, si estaban de servicio esa noche, qu¨¦ tipo de veh¨ªculos ten¨ªan, qu¨¦ armas usaban, qui¨¦nes hab¨ªa dado las instrucciones, por qu¨¦ hab¨ªan dado esas instrucciones, las comunicaciones que mantuvieron durante esas horas¡ Muchas de esas cosas no se hab¨ªan analizado.
P. Garc¨ªa Harfuch siempre se ha disculpado diciendo que aunque sobre el papel aparec¨ªa todav¨ªa como coordinador de la federal en Guerrero, en realidad le hab¨ªan mandado ya a Michoac¨¢n. Pero ha habido controversia sobre la documentaci¨®n que ¨¦l ha aportado para probar este cambio. Igual que ha habido controversia por la aparici¨®n de su nombre en la libreta de Sidronio Casarrubias [l¨ªder de Guerreros Unidos]¡
R. Lo estamos investigando. El papel de Omar Garc¨ªa empieza por una controversia respecto a esos documentos que mencionas¡ Lo estamos investigando.
P. Insisto en el tema de la Polic¨ªa Federal, porque en otros temas, caso de Tom¨¢s Zer¨®n por ejemplo, parece que ha habido cierta prisa en judicializar. Y ese no parece ser el caso de la Federal.
R. En el caso de Tom¨¢s Zer¨®n hab¨ªa una carga de prueba bastante importante, entonces su judicializaci¨®n fue r¨¢pida. De la Polic¨ªa Federal tendremos noticias pr¨®ximamente si judicializamos o no.
P. Sobre el Ej¨¦rcito, ?se ha alcanzado el nivel de profundidad deseado sobre lo que hicieron o dejaron de hacer los mandos del batall¨®n de Iguala?
R. Los estamos investigando tambi¨¦n. Los militares no aparecen pr¨¢cticamente en los principales escenarios, m¨¢s que los OBIS ¡ªmilitares que patrullan de paisano para informar a sus superiores¡ª, que van reportando desde las 17.00 del 26 de septiembre, cuando los muchachos llegan a Iguala. Pero, ?qu¨¦ reportaban y a qui¨¦n? ?Y en d¨®nde terminaba esa informaci¨®n? Es una cadena que hemos estado reconstruyendo.
P. Los anteriores investigadores de la PGR y un equipo de investigadores independiente [el Equipo Argentino de Antropolog¨ªa Forense, EAAF] encontraron miles de restos ¨®seos en el basurero de Cocula. La CNDH dijo que se propuso el env¨ªo de m¨¢s de 100 fragmentos a Innsbruck, ?qu¨¦ ha pasado con esos restos?
R. EAAF y PGR trabajaron durante un a?o sobre este material. La CNDH lleg¨® y en dos semanas dijo que hab¨ªa que mandar esas piezas... Las conclusiones de la EAAF es que no son piezas propensas para la identificaci¨®n gen¨¦tica. Yo no tengo inconveniente en que sean enviados a Innsbruck, pero lo que vamos a hacer es una mesa de peritos con EAAF, PGR y CNDH para conciliar. Me parece lo m¨¢s sano.
P. Mucha gente se pregunta, ?esto llegar¨¢ a Jes¨²s Murillo Karam [titular de la PGR cuando estall¨® el caso Ayotzinapa]?
R. Pues¡ Esperemos que las pruebas nos den el conocimiento suficiente.