Detenido el m¨¦dico que presuntamente abus¨® de Mariana S¨¢nchez
La Fiscal¨ªa no vincula al posible agresor por la muerte de la doctora ahorcada en un centro de salud de Chiapas y mantiene un expediente en el que el suicidio es la principal hip¨®tesis
El hombre que presuntamente abus¨® sexualmente de Mariana S¨¢nchez, la m¨¦dica de 25 a?os que fue hallada muerta en las instalaciones de un centro de salud de Chiapas, ha sido detenido este jueves, seg¨²n la Fiscal¨ªa General del Estado. El Ministerio P¨²blico ha informado de que el compa?ero de la joven asesinada ha sido aprehendido en el municipio de Ocosingo (en mitad de la selva chiapaneca) por un supuesto delito de hostigamiento sexual, pero no se le ha vinculado con la muerte de S¨¢nchez. La m¨¦dica estaba en pr¨¢cticas desde agosto en esa cl¨ªnica y hab¨ªa denunciado a su compa?ero por abuso sexua...
El hombre que presuntamente abus¨® sexualmente de Mariana S¨¢nchez, la m¨¦dica de 25 a?os que fue hallada muerta en las instalaciones de un centro de salud de Chiapas, ha sido detenido este jueves, seg¨²n la Fiscal¨ªa General del Estado. El Ministerio P¨²blico ha informado de que el compa?ero de la joven asesinada ha sido aprehendido en el municipio de Ocosingo (en mitad de la selva chiapaneca) por un supuesto delito de hostigamiento sexual, pero no se le ha vinculado con la muerte de S¨¢nchez. La m¨¦dica estaba en pr¨¢cticas desde agosto en esa cl¨ªnica y hab¨ªa denunciado a su compa?ero por abuso sexual dos meses antes de su muerte a trav¨¦s de una carta oficial a la directora del centro. El presunto agresor es el segundo detenido del caso despu¨¦s de que el 6 de febrero fuera capturada la directora de la instituci¨®n por abuso de autoridad: tuvo conocimiento de la denuncia y presuntamente no hizo nada para protegerla.
Aunque la Fiscal¨ªa ha anunciado su detenci¨®n como un avance en el caso, el supuesto agresor se ha entregado de forma voluntaria, seg¨²n asegura en un v¨ªdeo grabado y difundido en las redes sociales. ¡°Me vengo a entregar para que termine la violencia en contra de mi familia, la persecuci¨®n de manera injusta, y esperemos que esto se resuelva de la manera m¨¢s favorable a favor de un servidor¡±, ha dicho antes de ingresar a los juzgados. El hombre, que se ha identificado como Fernando Cuauht¨¦moc P¨¦rez Xim¨¦nez, trabajaba en la misma cl¨ªnica que S¨¢nchez en Nueva Palestina, una comunidad ind¨ªgena en el municipio de Ocosingo. Seg¨²n denunci¨® la m¨¦dica, una noche de noviembre, su compa?ero, borracho, forz¨® su cuarto para abusar de ella.
La captura se suma a la de la responsable de la cl¨ªnica, de principios de febrero, por haber tenido conocimiento del acoso que sufr¨ªa S¨¢nchez y presuntamente no haber denunciado y protegido a la v¨ªctima. Pero ninguna de estas detenciones se incluyen en el expediente del caso Mariana, sino que se tratan como dos causas aisladas: la primera contra P¨¦rez por abuso sexual y la segunda, por un delito de abuso de autoridad por omisi¨®n. De manera que el caso de su muerte corre el riesgo, como muchos otros, de enredarse en los tribunales.
P¨¦rez est¨¢ siendo investigado por el presunto abuso sexual que cometi¨® contra S¨¢nchez en noviembre, pero no como posible part¨ªcipe en su muerte el pasado 27 de enero. As¨ª como la directora est¨¢ en prisi¨®n preventiva ¡ªampliada por orden de un juez¡ª, pero tampoco la Fiscal¨ªa la ha vinculado con el presunto feminicidio.
En la carpeta de investigaci¨®n a la que ha tenido acceso EL PA?S no hay hasta el momento un solo indicio que apunte al posible feminicidio de la joven, en contra de lo que ordena la ley en los casos de la muerte violenta de una mujer. El expediente armado hasta ahora demuestra c¨®mo las autoridades no impidieron la incineraci¨®n r¨¢pida de su cad¨¢ver y responsabiliza a la v¨ªctima como ¨²nica culpable. Las investigaciones caminan estos d¨ªas a ciegas, sin cuerpo y con un solo examen forense que no ha podido ser revisado por otro especialista y que podr¨ªa resultar clave en la l¨ªnea de investigaci¨®n de feminicidio.
Nadie estaba buscando a P¨¦rez, no hab¨ªa ninguna orden de detenci¨®n. Incluso el m¨¦dico declar¨® ante la Fiscal¨ªa a principios de febrero por el caso de S¨¢nchez, seg¨²n el expediente. ¡°Nunca habl¨¦ con ella¡±, se?alaba el testimonio. El fiscal en ning¨²n momento le pregunt¨® entonces qu¨¦ estaba haciendo y d¨®nde se encontraba el d¨ªa en que S¨¢nchez muri¨®. P¨¦rez present¨® voluntariamente una constancia de que al d¨ªa siguiente estuvo haci¨¦ndose unos an¨¢lisis en un laboratorio en la capital chiapaneca. Pero la carpeta no recog¨ªa una coartada para el doctor en el momento exacto de su muerte.
La carpeta de investigaci¨®n incluye adem¨¢s una denuncia de 2013 en contra del mismo m¨¦dico. Una compa?era enfermera del doctor, cuando trabajaba en otro centro sanitario de Chiapas, interpuso una demanda por abuso sexual. ?l presuntamente hab¨ªa intentado abusar de ella en al menos dos ocasiones. La denuncia fue archivada unos a?os despu¨¦s.
Pese a la denuncia que hab¨ªa interpuesto S¨¢nchez ante la responsable de la cl¨ªnica por abuso sexual y las sospechas sobre su muerte, las autoridades desestimaron investigar el caso como feminicidio y determinaron que se trataba de un suicidio. Solo cuando el caso escal¨® al debate p¨²blico nacional y la secretaria de Gobernaci¨®n, Olga S¨¢nchez Cordero, pidi¨® que se investigara el caso con perspectiva de g¨¦nero, como exige el protocolo ante la muerte violenta de una mujer, la carpeta pas¨® a plantear esa hip¨®tesis. Aunque no ha sido sostenida ni con nuevos indicios, testimonios ni pruebas periciales.
¡°La Fiscal¨ªa sigue actuando con opacidad. No ejecut¨® la orden, el se?or se entreg¨®. De lo contrario, posiblemente no lo hubiesen detenido. Quiere mostrar una efectividad cuando no es as¨ª¡±, se?ala por su parte Carlos Hugo Tondop¨®, abogado de la familia. El defensor hab¨ªa pedido a las autoridades desde hac¨ªa una semana que se considerara al doctor como sospechoso de la muerte de S¨¢nchez. Tambi¨¦n ha pedido que se revisen los tel¨¦fonos de compa?eros y de la v¨ªctima, adem¨¢s de recuperar sus geolocalizaciones esa noche. Tondop¨® insiste en que no quieren ¡°chivos expiatorios¡±: ¡°Solo queremos que la Fiscal¨ªa haga su trabajo y primero desestime la posibilidad del feminicidio. Pero que al menos primero lo investigue como se debe¡±.
S¨¢nchez llevaba cinco meses trabajando como m¨¦dica en pr¨¢cticas en el centro de salud y desde que la hab¨ªan trasladado a esta localidad en agosto del a?o pasado, le hab¨ªa contado a su madre el infierno que viv¨ªa. El cuarto donde apareci¨® ahorcada ¡ªen suspensi¨®n ¡°incompleta¡±, de rodillas¡ª consist¨ªa en cuatro paredes de cemento, adosadas al terreno del centro de salud para el que trabajaba como m¨¦dico general en pr¨¢cticas. El ba?o, compartido con otros compa?eros pasantes, estaba del otro lado del austero recinto. Ella era la encargada de atender las consultas de 8 de la ma?ana a tres de la tarde. Y en este rinc¨®n de la selva chiapaneca, poblada de ind¨ªgenas evangelistas, llamado Nueva Palestina, la falta de internet y cobertura la manten¨ªa aislada de su familia y amigos.
En Chiapas fueron asesinadas el a?o pasado 70 mujeres: 29 reconocidas como feminicidios y 41 como homicidios, seg¨²n las cifras estatales. Este Estado no es el m¨¢s letal de M¨¦xico; a la cabeza est¨¢n Morelos, Colima y Nuevo Le¨®n (hasta agosto de 2020), seg¨²n la tasa por habitante. Los altos ¨ªndices de impunidad, con menos de un 10% de sentencias condenatorias en estos delitos, han colocado desde hace a?os a los cr¨ªmenes machistas en el pa¨ªs como un asunto de seguridad nacional. En M¨¦xico se estima que son asesinadas 10 mujeres al d¨ªa.
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