El poder adquisitivo del salario en M¨¦xico sufre su peor ca¨ªda desde 2017
La inflaci¨®n de 7,37% anula los esfuerzos por mejorar los ingresos de los trabajadores
No hay esfuerzo posible que pueda con la creciente escalada de precios en M¨¦xico. El incremento que se ha hecho a los salarios en el pa¨ªs ha quedado anulado y los trabajadores han perdido poder adquisitivo, lo que les ha orillado a cambiar sus h¨¢bitos de consumo de alimentos. Seg¨²n datos de la Secretar¨ªa del Trabajo y Previsi¨®n Social, en el pa¨ªs los salarios contractuales -que conforman alrededor del 60% d...
No hay esfuerzo posible que pueda con la creciente escalada de precios en M¨¦xico. El incremento que se ha hecho a los salarios en el pa¨ªs ha quedado anulado y los trabajadores han perdido poder adquisitivo, lo que les ha orillado a cambiar sus h¨¢bitos de consumo de alimentos. Seg¨²n datos de la Secretar¨ªa del Trabajo y Previsi¨®n Social, en el pa¨ªs los salarios contractuales -que conforman alrededor del 60% del ingreso de los trabajadores formales- tuvieron incremento nominal de 5,1% en noviembre, que se traduce en una p¨¦rdida en el poder adquisitivo de 2,14% luego de que se descuente el monto de la inflaci¨®n, que fue de 7,37% anual, la mayor cifra desde 2001. Se trata de la peor ca¨ªda de la capacidad adquisitiva de los mexicanos desde hace cuatro a?os.
Por actividad, de acuerdo con cifras de Trabajo, el ajuste salarial en la industria baj¨® 1,94% a tasa real, siendo las manufacturas y miner¨ªa los principales lastres al disminuir 2,01 y 0,84%. En los servicios el descenso fue de 3,05%. La mayor contracci¨®n en los salarios se observ¨® en Oaxaca, con 4,59% de reducci¨®n del poder adquisitivo, seguido de Tabasco, con 3,11%.
Mientras que se ha anunciado un aumento de 22% para el salario m¨ªnimo en 2022, son muy pocos los trabajadores que perciben el ingreso m¨ªnimo, seg¨²n indica en entrevista David Lozano, acad¨¦mico del Centro de An¨¢lisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Econom¨ªa de la UNAM. Hasta el a?o pasado, de acuerdo con cifras del Gobierno de M¨¦xico, 13% de los trabajadores ganaba el salario m¨ªnimo. ¡°La poblaci¨®n que recibe el salario m¨ªnimo es cada vez menor. La mayor¨ªa son de car¨¢cter contractual, que son los que menos incrementos han tenido y de este modo vemos una p¨¦rdida de m¨¢s de 80% en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas¡±, se?ala.
De acuerdo con una investigaci¨®n del CAM a la que ha tenido acceso EL PA?S, los trabajadores tienen que hacer un desembolso de 301 pesos al d¨ªa (unos 15 d¨®lares) para poder comprar una canasta alimenticia recomendable -que incluye el precio de cuarenta alimentos b¨¢sicos sin contar los instrumentos para su preparaci¨®n-, mientras que si se le a?ade el costo de energ¨ªa el¨¦ctrica y gas para cocinar, el precio se eleva a 465 pesos al d¨ªa (casi 22 d¨®lares).
Este fen¨®meno ha provocado que en los hogares mexicanos prefieran consumir alimentos en el mercado informal, como en tianguis (mercados sobre ruedas) que pueden ser de menor calidad. ¡°Los mexicanos que optan por comprar en el sector informal o productos de mala calidad se increment¨® 18%, de acuerdo con nuestro estudio¡±, se?ala Lozano.
Los ingredientes b¨¢sicos de la cocina mexicana han sufrido importantes aumentos. El tomate verde, el jitomate, los chiles frescos y la cebolla, solo por mencionar algunos, son los que m¨¢s incrementos han presentado el ¨²ltimo mes. El consumo de la tortilla, base de los platillos del pa¨ªs, se est¨¢ empezando a sacrificar debido a los grandes aumentos. ¡°Por primera vez vemos que se dejan de consumir productos que originalmente estaban en la canasta b¨¢sica para poder enfrentar los aumentos¡±, dice el economista Lozano.
Gabriela Siller, directora de an¨¢lisis econ¨®mico de banco Base, se?ala que la recuperaci¨®n del mercado laboral no se ha dado de modo uniforme. ¡°Una buena parte de las plazas est¨¢n recuperando su ocupaci¨®n en informalidad o con salarios menores¡±, dice la analista. No obstante, si contin¨²a el aumento de precios para el siguiente a?o, el panorama para los trabajadores del pa¨ªs es a¨²n m¨¢s gris. ¡°Se trata de una tendencia mundial acrecentada por la baja disposici¨®n de alimentos que afectar¨¢ a las familias de M¨¦xico, sin lugar a dudas¡±, concluye Lozano.
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