Alito Moreno y Mario Delgado: los tribunales ponen l¨ªmites a las pretensiones para prorrogar los cargos de los partidos
El proyecto del Tribunal Electoral Federal tacha de ¡°inconstitucional¡± la modificaci¨®n de los estatutos que alarga el mandato de los dirigentes de Morena. El PRI tambi¨¦n espera una resoluci¨®n
La no reelecci¨®n de cargos pol¨ªticos en M¨¦xico es casi una religi¨®n, pero no son pocos los que tienen la tentaci¨®n de salt¨¢rsela por v¨ªas opacas. Lo est¨¢ intentando Alito Moreno, l¨ªder nacional del PRI, y tambi¨¦n el presidente y la secretaria general de Morena, Mario Delgado y Citlalli Hern¨¢ndez, respectivamente, por citar unos ejemplos que estos d¨ªas se debaten en los tribunales correspondientes. Ambos partidos modificaron sus estatutos para prorrogar s...
La no reelecci¨®n de cargos pol¨ªticos en M¨¦xico es casi una religi¨®n, pero no son pocos los que tienen la tentaci¨®n de salt¨¢rsela por v¨ªas opacas. Lo est¨¢ intentando Alito Moreno, l¨ªder nacional del PRI, y tambi¨¦n el presidente y la secretaria general de Morena, Mario Delgado y Citlalli Hern¨¢ndez, respectivamente, por citar unos ejemplos que estos d¨ªas se debaten en los tribunales correspondientes. Ambos partidos modificaron sus estatutos para prorrogar sus cargos y lo justificaron por la inconveniencia de iniciar la renovaci¨®n con un proceso electoral a la vista. El Pleno del Tribunal Electoral del Poder Judicial Federal tiene que votar ahora el proyecto de resoluci¨®n que ya ha redactado la magistrada Janine Ot¨¢lora, en el que declara ¡°inconstitucional¡± la modificaci¨®n estatutaria de Morena. Si el pleno acepta su criterio jur¨ªdico, ser¨ªa un precedente que tambi¨¦n puede acabar con las pretensiones de Alito Moreno de seguir en la dirigencia del PRI m¨¢s all¨¢ de lo que su partido prev¨¦ legalmente.
En el III Congreso Nacional de Morena se establecieron algunas modificaciones en los estatutos que a nadie pasaron por alto: aquellos cambios permit¨ªan que Mario Delgado y Citlalli Hern¨¢ndez siguieran desempe?ando sus funciones m¨¢s tiempo del determinado. Un grupo de militantes recurri¨® esa decisi¨®n ante el INE, que en un primer momento les dio la raz¨®n. El caso escal¨® hasta el Tribunal Electoral Federal, donde ahora, en el proyecto de resoluci¨®n, se tacha de ¡°inconstitucional¡± ese paso y le da un tir¨®n de orejas a Morena: ¡°Comienza a ser recurrente la prorrogaci¨®n de los titulares en los cargos partidistas¡±, dice el proyecto. Se?ala que quienes detentaron el cargo en 2015 lo concluyeron en 2020, dos a?os m¨¢s de lo previsto en los estatutos, mientras que los actuales ¡°pretenden dejar el cargo en 2024¡å, cuando les corresponde abandonarlo este agosto. ¡°Aprobar la pr¨®rroga [¡] propicia la perpetuidad de los altos cargos directivos partidarios, lo que se traduce en una violaci¨®n al derecho de los dem¨¢s afiliados¡±, advierte la resoluci¨®n de Ot¨¢lora.
El enfado en estos casos proviene, efectivamente, de la propia militancia. Recientemente, se quejaba Miguel ?ngel Osorio Chong de las intenciones del l¨ªder de su partido, el priista Alito Moreno, que hizo una jugada pr¨¢cticamente id¨¦ntica a la de los morenistas. Alito se concedi¨® tres meses m¨¢s con la misma justificaci¨®n, estar a las puertas de un proceso electoral, que una vez iniciado no permite cambio de dirigencias. Esto le permitir¨ªa alargarse hasta septiembre. La ley electoral, el controvertido plan B, le cambi¨® el paso, porque la campa?a para los comicios de 2024 empezar¨ªa en noviembre. Para solucionar ese peque?o imprevisto, Alito ya no hablaba de tres meses, sino de 90 d¨ªas h¨¢biles, de tal forma que pudiera llegar a la fecha electoral. ¡°El se?or quiere quedarse en el partido, pegarlo al inicio del proceso electoral y entonces quedarse un a?o m¨¢s¡±, denunciaba recientemente en una entrevista Osorio Chong, anta?o buen amigo de Alito Moreno y hoy adversarios del mismo color. Pero el INE tumb¨® las expectativas del dirigente, que ahora se las ver¨¢ con el Tribunal Electoral.
El proyecto de Ot¨¢lora cierra la v¨ªa a quienes pretender prorrogar sus cargos argumentando una cuesti¨®n excepcional, o sea, las exigencias de una coyuntura concreta. ¡°Un partido pol¨ªtico nacional se encuentra todos los a?os participando en procesos electorales, por lo cual no es posible calificar la raz¨®n como excepcional, relevante, extraordinaria ni transitoria¡±, avisa el texto. Recuerda a los morenistas que esos cargos son por tres a?os y que deben dejar pasar un periodo entero antes de postularse al siguiente y ¨²ltimo mandato. Tratar de modificar eso con un art¨ªculo transitorio, como se hizo, ¡°vulnera al Estatuto [del partido] y al sistema democr¨¢tico¡± porque ¡°no existi¨® la posibilidad de que militantes que aspiraran a ocupar dicho cargo pudieran registrarse y contender para ser elector en asamblea o a trav¨¦s de la encuesta¡±.
En todo caso, sostiene el proyecto jur¨ªdico, si el partido lo estima pertinente, ¡°podr¨¢ extender o acortar los mandatos de los referidos cargos¡± en el futuro, para que no coincidan con los procesos electorales federales. Pero no ahora por una v¨ªa que se tacha de ¡°inconstitucional¡±.
Ot¨¢lora insta al partido a respetar el sistema democr¨¢tico; por m¨¢s que disponga de autonom¨ªa para regular sus asuntos internos y autodeterminaci¨®n, ¡°ello no resulta suficiente para que aprueben una norma que contravenga los principios constitucionales electorales¡±. Si el pleno del Tribunal aprueba este proyecto de resoluci¨®n contra las pretensiones de pr¨®rroga de Morena, el l¨ªder del PRI debe poner sus barbas a remojar.
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