Los diez d¨ªas que han dejado en el alambre al Gobierno de Guerrero
La entidad se sume en una crisis pol¨ªtica de final incierto, tras el presunto asesinato de un normalista de Ayotzinapa a manos de polic¨ªas. Salgado trata de ganar tiempo con cambios en el gabinete. La fiscal estatal se aferra al cargo
Guerrero se sume en una crisis pol¨ªtica de tama?o y final inciertos, tras el ¨²ltimo episodio de violencia contra integrantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, que dej¨® a un estudiante muerto a balazos, hace justo diez d¨ªas, en Chilpancingo, la capital. El presunto asesinato de Yanqui Kothan G¨®mez, de 23 a?os, a manos de polic¨ªas estatales, ilustra la crisis de seguridad en la entidad, no solo por los asesinatos y la extorsi¨®n, al alza...
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Guerrero se sume en una crisis pol¨ªtica de tama?o y final inciertos, tras el ¨²ltimo episodio de violencia contra integrantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, que dej¨® a un estudiante muerto a balazos, hace justo diez d¨ªas, en Chilpancingo, la capital. El presunto asesinato de Yanqui Kothan G¨®mez, de 23 a?os, a manos de polic¨ªas estatales, ilustra la crisis de seguridad en la entidad, no solo por los asesinatos y la extorsi¨®n, al alza desde hace meses, sino por la evidente incapacidad de las autoridades, sobrepasadas o negligentes, como m¨ªnimo, visto el caso del normalista.
La gobernadora Evelyn Salgado, de Morena, ha tratado de contener las cr¨ªticas, afiladas y constantes, lanzadas desde cada costado del tablero pol¨ªtico. El grupo del PAN en el Senado pidi¨® incluso esta semana que se iniciaran los tr¨¢mites para desaparecer los poderes de Guerrero, medida extrema, que motiv¨® una peque?a trifulca en la c¨¢mara, zanjada por los parlamentarios de Morena, al grito de ¡°carro?eros¡±. Aunque los rifirrafes en los congresos de M¨¦xico ocurren de vez en cuando, la cercan¨ªa de las elecciones de junio abonan el terreno para su proliferaci¨®n.
Salgado se ha defendido y ha dejado caer a dos alfiles. La mandataria ha aceptado las renuncias esta semana del secretario general de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso, y del secretario de Seguridad, Rolando Solano, que apenas llevaba un mes y medio en el cargo. Agarrada a la boya flotadora de Palacio Nacional, uno de sus pocos apoyos, Salgado trata ahora de cesar a la fiscal estatal, Sandra Luz Valdovinos, una forma, entiende, de cauterizar la herida.
El problema aqu¨ª para Salgado es que Valdovinos, militar de carrera, goza de cierta autonom¨ªa del Ejecutivo y puede tratar de defenderse. La fiscal anunci¨® esta semana que pedir¨ªa audiencia al Congreso local para explicar la actuaci¨®n de la dependencia en el caso de Yanqui Kothan. El parlamento local tiene la ¨²ltima palabra sobre el cargo de la funcionaria. Si dos terceras partes de los diputados rechazan la propuesta de Salgado, la fiscal conservar¨ªa su puesto.
Parece poco probable que esto ocurra, porque Morena controla buena parte de los curules del Congreso. Este viernes, la presidenta de la Junta de Coordinaci¨®n Pol¨ªtica de la C¨¢mara, Citlali Calixto Jim¨¦nez, dec¨ªa adem¨¢s que Valdovinos a¨²n no hab¨ªa pedido audiencia a la C¨¢mara. Mientras tanto, el Gobierno local da por hecho su salida y ha nombrado a un encargado de despacho. Se trata de Gabriel Alejandro Fern¨¢ndez, vicefiscal de Investigaci¨®n. Pese a ello, Valdovinos, que hace un mes protagoniz¨® un extra?o evento, cuando pidi¨® una licencia para dejar el cargo medio a?o, petici¨®n que luego retir¨®, no da su brazo a torcer.
Las dimisiones, renuncias y negociaciones de estos d¨ªas distraen del problema de fondo, el asesinato del muchacho, que ocurre adem¨¢s en medio de las tensiones entre el colectivo de familiares de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, hace 10 a?os, y el Gobierno federal, que comanda Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. Desde el inicio de la campa?a electoral, a principios de mes, parte del colectivo ha elevado el tono contra el Gobierno. Las familias de los 43 consideran que el Ejecutivo protege al Ej¨¦rcito, que, seg¨²n las investigaciones, oculta informaci¨®n sobre el grupo que atac¨® a los normalistas en 2014. La Secretar¨ªa de la Defensa ten¨ªa intervenidos los tel¨¦fonos de los perpetradores.
El caso de Yanqui Kothan actualiza aquella tragedia. A su muerte, la Secretar¨ªa de Seguridad de Guerrero inform¨® de que los polic¨ªas hab¨ªan respondido a una agresi¨®n a balazos. Tras ese presunto enfrentamiento, los polic¨ªas, dijo la dependencia, encontraron cartuchos y bolsitas con droga en el veh¨ªculo en que viajaban el muchacho y otros dos compa?eros. Pero el propio L¨®pez Obrador ha informado estos d¨ªas que los j¨®venes no dispararon. La madre del joven muerto asegur¨® adem¨¢s que los estudios de necropsia negaban que Yanqui hubiera tomado drogas.
El esperpento no acababa ah¨ª. Seg¨²n las autoridades iban informando del caso y la teor¨ªa del enfrentamiento empezaba a deshacerse, la mirada de la sociedad se volv¨ªa hacia los polic¨ªas agresores, tres en total. Esta semana, L¨®pez Obrador informaba de que uno de los tres hab¨ªa logrado escapar. Enfadados, compa?eros de Yanqui Koth¨¢n la tomaron contra la Fiscal¨ªa de Guerrero, a la que le quemaron varios veh¨ªculos, contra la Guardia Nacional y, en general, contra todo lo que oliese a autoridad.
La Fiscal¨ªa de Guerrero divulg¨® un comunicado informando de que los polic¨ªas no estaban en custodia de la dependencia, tirando la pelota al tejado de la Secretar¨ªa de Seguridad. La Fiscal¨ªa, que ha sufrido los embates del crimen estos a?os, con ataques contra sus instalaciones, e incluso el asesinato de un fiscal regional en la zona de Tierra Caliente, trataba de borrarse de la foto. Pero el tama?o del esc¨¢ndalo ampli¨® el foco y toc¨® tambi¨¦n a la puerta de Valdovinos. Esta semana que viene, el Congreso decidir¨¢ sobre su futuro.
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