Salir de la oscuridad: La energ¨ªa solar ilumina las comunidades en Oaxaca

Desde tiempos milenarios, a las personas del municipio de San Blas Atempa, en el Istmo de Tehuantepec, se las ha distinguido por ser valientes, con car¨¢cter, fuertes y unidas, seg¨²n la tradici¨®n zapoteca. Sin embargo, all¨¢ en sus periferias, justo en donde la copa de los cocoteros, los maizales, los sauces, mezquites y chicozapotes son los primeros en recibir el ocaso, el d¨ªa y la noche ocurren de forma distinta para muchos de sus pobladores.

Antes de la llegada del programa Luces de Esperanza de Iberdrola M¨¦xico a comunidades rurales como Nizarindani o Shabaconde, la oscuridad en centenares de familias llegaba tan pronto ca¨ªa el sol y, con ella, la din¨¢mica social de sus pobladores se ajustaba a los designios de una cotidianidad sin energ¨ªa el¨¦ctrica: se jugaba poco, se ten¨ªa que ir a dormir temprano y se cenaba en una penumbra casi total.

Entre campos de cultivo, animales de granja, palmeras gigantescas y hogares dispersos que lucen diminutos frente al tupido y frondoso paisaje que les rodea, algunos de los habitantes de las localidades de este municipio ubicado a m¨¢s de 250 kil¨®metros de la capital oaxaque?a nos cuentan el antes y el despu¨¦s de su vida, previo a la instalaci¨®n de paneles solares que hoy conforman la cuarta etapa de Luces de Esperanza en la entidad, iniciativa que ha beneficiado ya a m¨¢s de 4.500 personas de la regi¨®n.

Desde la entrada principal de su hogar, una peque?a choza con techo de paja y palma, Faustino Espinosa, campesino zapoteco, nos muestra un viejo y peque?o radio plateado con l¨¢mpara integrada, el cual fue por mucho tiempo la ¨²nica fuente de energ¨ªa el¨¦ctrica. Hoy, nos cuenta, ¡°todo es m¨¢s grande y mejor¡±, ya que puede tener varias partes de su casa completamente iluminadas y adem¨¢s prepararse su cena c¨®modamente y quedarse despierto un poco m¨¢s tarde mientras recibe a sus amigos para platicar.

No muy lejos de la casa de don Faustino se encuentra el hogar de la familia de Victoriano Reyes, quien reflexiona sobre la importancia de tener energ¨ªa solar en su casa que, situada en medio del campo, est¨¢ alejada del centro de San Blas Atempa, en donde ten¨ªa que acercarse hasta hace apenas unos meses cuando quer¨ªa hacer algo tan simple como recargar la bater¨ªa de su tel¨¦fono m¨®vil.

¡°Tal vez en otros lados solo sean cuatro foquitos, pero para nosotros tener electricidad en casa lo es todo. Ahora tenemos la posibilidad de usar una licuadora, una radio y una televisi¨®n. Y eso ya es una ventaja, especialmente aqu¨ª, que es nuestro hogar desde tiempos milenarios. Aqu¨ª vivieron nuestros ancestros y hemos vivido de generaci¨®n en generaci¨®n. Con la llegada de los paneles solares y de la luminaria, podemos pensar en producir y hacer algo m¨¢s grande hacia el futuro. Con la luz, la mentalidad cambia¡­cambia todo¡±, subraya Victoriano Reyes.

Para la cuarta fase de este programa en Oaxaca, Iberdrola M¨¦xico ha invertido siete millones de pesos en la instalaci¨®n de sistemas solares -conformados por paneles y bater¨ªas- teniendo como aliado t¨¦cnico a Ilum¨¦xico. En esta iniciativa social, se da mantenimiento oportuno y se acompa?a a los beneficiarios antes y despu¨¦s de la instalaci¨®n, estudiando cada caso y previniendo y atendiendo cualquier incidente o falla, ya sea presencialmente o por v¨ªa remota.

Para nosotros esto es una oportunidad, porque ya tenemos algo m¨¢s y estamos mejor. Los ni?os tambi¨¦n est¨¢n m¨¢s contentos, hacen su tarea y juegan m¨¢s.

David Hern¨¢ndez, beneficiario de Luces de Esperanza en San Blas Atempa.

En esta nueva fase del proyecto, Luces de Esperanza ha impactado de forma positiva la vida de 415 personas en 11 comunidades rurales de tres municipios del estado: San Blas Atempa, San Juan Guichicovi y San Francisco Ixhuat¨¢n.

Durante la ceremonia de encendido de esta cuarta etapa, celebrada en la comunidad de Shabaconde -en el municipio de San Blas Atempa- el pasado 30 de julio, Paola Mart¨ªnez, directora de Comunicaci¨®n y Responsabilidad Social de Iberdrola M¨¦xico, ratific¨® el compromiso de la compa?¨ªa con aquellas comunidades que debido a su ubicaci¨®n o condici¨®n socioecon¨®mica han quedado fuera de la electrificaci¨®n por redes convencionales.

¡°Con esta iniciativa buscamos que todas las personas tengan las mismas oportunidades de desarrollo, brindando un servicio tan esencial como es la electricidad. Este proyecto refleja nuestro compromiso con las comunidades¡±, subray¨® la directora ante autoridades del gobierno local y personas beneficiadas por el programa, que hasta la fecha ha llegado a los estados de San Luis Potos¨ª, Oaxaca y Puebla, en beneficio de m¨¢s de 7.700 personas.

Por su parte, Alicia Valcarce, directora de la Fundaci¨®n Iberdrola M¨¦xico, enfatiz¨® que la compa?¨ªa ¡°tiene el objetivo de trabajar a largo plazo en este y otros proyectos sociales que acompa?an totalmente al negocio y contribuyen al desarrollo de las comunidades¡±. Adem¨¢s, puso en valor el programa Luces de Esperanza porque se vincula directamente con la esencia de la compa?¨ªa energ¨¦tica y porque, de acuerdo con cifras del Inegi, todav¨ªa hay un 1 % de la poblaci¨®n que no cuenta con luz en sus hogares en M¨¦xico.

Luces de Esperanza arranc¨® en 2019 y cuenta con un presupuesto asignado de 80 millones de pesos. El programa contribuye al logro de varios Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) entre los que se destaca el combate a la pobreza, garantizar energ¨ªa asequible y no contaminante, la reducci¨®n de las desigualdades y la edificaci¨®n de ciudades y comunidades sostenibles.